Egipto

TERCERA JORNADA

Primera parte: Kom Ombo

A primera hora de la mañana visitamos el templo de Kom Ombo, ubicado en las márgenes del Nilo (lo que le convierte en fotogénicamente atractivo desde la distancia).

El templo tiene la particularidad de no estar dedicado a un único dios, sino a dos (Sobek y Haroeris). De hecho, cada mitad del templo está perfectamente trazada en honor al dios correspondiente. También hay otra particularidad: al fondo del templo hay grabados de instrumental médico, lo cual evoca reminiscencias de ciencia ficción...

Por otra parte, la mitad del templo está en ruinas, con lo cual el visitante que viene del norte puede considerar que esa visita es un bluff, comparándola con la de Edfu, Karnak o Luxor (y dos tercios de lo mismo pueden pensar muchos visitantes que llegan ahí desde la zona de Asuan, tras visitar Philae o Abu Simbel).

Yo creo que de ningún modo es un bluff el templo de Kom Ombo, pero está claro que la comparación es casi inevitable, y sale perdiendo contra los antedichos templos. Pero quedémonos con el hecho de que Kom Ombo es un lugar interesante, y gran parte del templo está en pie (sin ir más lejos, una sala hipóstila preciosa). También hay restos de policromía en algunas bóvedas.

Volvemos al barco y seguimos hacia el Alto Nilo. Asuan nos espera en el sur.

TERCERA JORNADA

Segunda parte: Presa de Asuan

Llegados a Asuan, bajamos del barco y nos lleva el bus a la presa grande, pasando antes por la pequeña.

En cierto modo, esto sí que constituye el primer bluff del viaje: aunque la presa de Asuan sea un prodigio de la ingeniería y tal, lo que nosotros vemos es simplemente la parte de arriba (es evidente, ya que la gran mayoría de la presa per se está bajo las aguas). A un lado está el Lago Nasser, que tampoco tiene mucho que ver, y al otro lado se extiende la zona anterior a la presa pequeña, donde se encuentra el templo de Philae (que para más inri no se observa desde la presa grande, sino cuando pasamos en bus por la pequeña).

Estamos en una zona vigilada por militares. Cosa normal por otra parte, ya que si de algún modo se destruyese la presa de Asuan, Egipto desaparecería en un máximo de nueve horas bajo las aguas del Lago Nasser.

TERCERA JORNADA

Tercera parte: Paseo en Faluca

Nos obligan a ponernos los chalecos salvavidas que tenemos en nuestra habitación, ya que vamos a dar un paseo en faluca por el Nilo.

Suena muy bien todo eso, pero acaba siendo una verdadera gilipuertez, ya que la faluca no hace otra cosa que dar vueltas y vueltas en torno al mismo punto (un lugar indeterminado del Nilo a medio camino entre las tumbas occidentales de Asuan, el jardín botánico, y la isla Elefantina). Varios comerciantes se aproximan en otros barcos a hacer su agosto con los turistas; incluso el tío que lleva la faluca saca de la nada su correspondiente quincallería con el objeto de hacer negocio. Tras un interminable regateo, una de las chicas de nuestro grupo se lleva unos abalorios a relativo buen precio, pues cuando parecía tener el regateo perdido, el comerciante zanja la cuestión pidiéndola pocos euros y un bolígrafo para su hija (así que ya sabéis: llevad bolis para los regateos).

Volvemos al barco. Hay que dormir, pues al día siguiente habrá madrugón para visitar Abu Simbel.

Las vistas del lago Nasser desde la presa estaban bastante bien. Enorme. Parecía el mar.

Lo de la faluca fue una auténtica trampa. Una tienda flotante de la que no podíamos escapar.

CUARTA JORNADA

Primera parte: Abu Simbel

Madrugón mañanero. Nos levantamos ni más ni menos que a las dos de la mañana para ir a Abu Simbel.

En una callejuela de Asuan, paran los buses más de media hora para que vayan subiendo militares. Los soldados nos acompañarán cuatro horas por el desierto, y otras tantas de vuelta, así que vamos constituyendo un convoy de lo más variopinto.

"Es por su seguridad", dicen. En verdad, en ese desierto son susceptibles los ataques a turistas. De todas formas, los ronquidos de uno de los soldados nos acompañarán durante todo el viaje, con lo cual muy seguros no nos sentimos, la verdad.

Amanece en el desierto. Horizonte rojizo. Inmenso. No extraña que los egipcios adorasen al sol de esa forma.

Varios controles en el camino. Pura rutina. Llegamos a Abu Simbel.

El complejo de Abu Simbel tiene dos templos, de los cuales el que más vale la pena con diferencia es el mayor, dedicado a Ramses II (aunque el frontal de ambos es espectacular). Los grabados, pinturas, y estatuaria interior invocan inmediatamente un complejo síndrome de Stendhal del que será difícil sustraerse. A ello deberíamos añadir la maravilla que supone el pensar que todo aquello se trasladó piedra a piedra desde otro lugar cercano, para evitar su desaparición bajo las aguas tras la construcción de la presa grande.

Volvemos en el bus a Asuan. En el camino encontraremos un regalo visual inesperado: espejismos en el desierto. Creemos ver el agua del Lago Nasser a pocos kilómetros, cuando verdaderamente se encuentra mucho más allá.

Joseba escribió:CUARTA JORNADA

Primera parte: Abu Simbel

Amanece en el desierto. Horizonte rojizo. Inmenso. No extraña que los egipcios adorasen al sol de esa forma.

Impresionante. Para mí uno de los mejores momentos del viaje.

Nosotros hicimos el viaje a Abu Simbel en avión, huelga decir que, por lo que comentaba la gente que fue en bus, nos arrepentimos de la decisión.

y era muy grande su "simbel"?

Ayers escribió:y era muy grande su "simbel"?

helterstalker escribió:Nosotros hicimos el viaje a Abu Simbel en avión, huelga decir que, por lo que comentaba la gente que fue en bus, nos arrepentimos de la decisión.

Otra opción es ir en barco.

Shackleton escribió:

Joseba escribió:CUARTA JORNADA

Primera parte: Abu Simbel

Amanece en el desierto. Horizonte rojizo. Inmenso. No extraña que los egipcios adorasen al sol de esa forma.

Impresionante. Para mí uno de los mejores momentos del viaje.

Sublime.

CUARTA JORNADA

Segunda parte

Nos encaminamos hacia el templo de Isis en Philae, ubicado en una isla.

Al igual que Abu Simbel, este templo se trasladó piedra a piedra tras la construcción de la segunda presa de Asuan. La actual ubicación es preciosa: rodean al templo palmeras, formaciones kársticas de gran belleza, y agua por todas partes.

A medio camino, el barco que nos traslada a la isla se queda parado debido a algún extraño suceso con el combustible u otra causa desconocida, con lo que un segundo barco se aproxima y hemos de abordarlo en mitad de las aguas, con el riesgo que supone para ciertas personas mayores del grupo, pero finalmente el traslado de barco a barco se acomete sin mayor percance.

El templo de Philae es precioso, si bien algo más caótico que otros templos, como puede ser por ejemplo el de Edfu. Su visita vale la pena, pero en ocasiones no está programada por las agencias, con lo que os aconsejo encarecidamente que contratéis este viaje, bien sea desde España o una vez estéis en Egipto.

Como casi todas las visitas eran al amanaecer o al atardecer, la luz era preciosa, incrementando la belleza de los templos.

¡Y pasamos a El Cairo!

¿Quieres comenzar tú, Shackleton?

Joseba escribió:¡Y pasamos a El Cairo!

¿Quieres comenzar tú, Shackleton?

Te cedo el privilegio, que ahora no voy a poder.

Shackleton escribió:

Joseba escribió:¡Y pasamos a El Cairo!

¿Quieres comenzar tú, Shackleton?

Te cedo el privilegio, que ahora no voy a poder.

Yo tampoco. Procedo a ello en otro momento.

Datos e incidencias del crucero:

El barco zarpó la segunda noche de estancia (el primer día lo dedicamos a Luxor). Salió de Luxor a eso de las cinco de la mañana. No parece que hubiese entre los pasajeros problemas de mareo o derivados.

Nuestro barco era de clase media-alta. Pudimos comparar con otros barcos en el transcurso del viaje, ya que en diversas paradas hay que pasar de barco a barco para llegar a tierra firme (se detienen de forma paralela y a través de sucesivas pasarelas se juntan las compuertas de los respectivos halls) y había barcos bastante peores (y unos pocos mejores). Desde la agencia se nos recomendó que pillásemos un barco bueno aunque nos costase más, ya que en uno de categoría inferior las respectivas habitaciones eran cubículos pequeños (o eso nos dijeron, al menos).

Hay cinco pisos principales en el barco (para los turistas): En el inferior está el restaurante, espacioso. Más arriba está el hall, y también había habitaciones. El siguiente de arriba tiene habitaciones y también una pequeña sala de internet. En un nivel superior, el bar-sala de fiestas, bastante espacioso, con muchas butacas y la barra al fondo. Arriba del todo, en cubierta, tumbonas, una mini-piscina, toldos, mesa de ping-pong...

Las propinas se pagaban aparte, o sea que en el barco se está tranquilo de ver manos extendidas, y tal.

La comida estaba buena. Las bebidas (tanto del bar como del restaurante) se cargaban en la cuenta de la respectiva habitación de cada uno. Yo me inflé a cervezas Stella, que están bastante buenas, así que la cuenta final me subió un huevo (es más barato sacar botellas de agua para varios).

El primer día hubo fiesta con un mago y una danzarina del vientre por llamarla de alguna forma, cuyo show fue horrible. Me sacaron en todos los saraos a participar.

El segundo día nos disfrazamos a la usanza tradicional egipcia y hubo otra clase de juegos y sorteos, pero yo estaba cansado y me retiré pronto.

Al paso por la esclusa de Esna, una miríada de comerciantes rodearon el barco intentando vender sus productos. Parecía el asalto de unos piratas.

El trato en el barco, correcto. Yo intuí, eso sí, demasiada artificialidad en el asunto. Tampoco voy a dar muchas vueltas a eso: Yo ya me entiendo.

A nuestro compañero le choraron 10 euros el primer día. Mucho cuidado con lo que dejais en las habitaciones: utilizad la caja de caudales y llevad candado en la maleta. Os he avisado.

Si me acuerdo de más cosas, ya os iré diciendo.

No es un buen destino estos días.

Yo me quedé con ganas de usar la piscina. Mira que estuve a punto... Por cierto, alguna de las pasajeras:

Al llegar a El Cairo nos trasladaron directamente al hotel. Estos días ha salido un montón de veces en los informativos, en las imagenes que llegan de las protestas. Justo situado detrás del Museo. Muy buen hotel en mi opinión, aunque ya con algunos años.

DIA 5

Tras el desayuno nos llevan a las Pirámides de Gizeh. El tráfico es intenso y algunas personas se ponen un poco nerviosas, temerosas de no llegar a tiempo para coger una entrada que permita entrar en la Grán Pirámide de Keops. En principio, sólo se ponían a la venta unas 150.

Tras alguna que otra carrera hasta la taquilla, los primeros afortunados van consiguiendo su entrada. Pero al final, por lo visto, pusieron a la venta muchas más así que yo pude hacerme con una, sin tantos agobios :-)

¿Qué decir de las Pirámides? Desde cerca, uno pierde cierta perspectiva. Son enormes eso es evidente, pero no hay nada, ningún edificio cerca, para poder comparar.

(continúa)

Gora Rock escribió:No es un buen destino estos días.

Por eso fuimos unos días antes.

Shackleton escribió:Yo me quedé con ganas de usar la piscina. Mira que estuve a punto... Por cierto, alguna de las pasajeras:

Al llegar a El Cairo nos trasladaron directamente al hotel. Estos días ha salido un montón de veces en los informativos, en las imagenes que llegan de las protestas. Justo situado detrás del Museo. Muy buen hotel en mi opinión, aunque ya con algunos años.

Era mejor el Sofitel, pero el nuestro era bastante bueno, sí.

Y sí. alguna de las pasajeras

Shackleton escribió:algunas personas se ponen un poco nerviosas, temerosas de no llegar a tiempo para coger una entrada que permita entrar en la Grán Pirámide de Keops

esperemos que se calmen un poco las cosas, porque como entren a saco los radicales islamicos en tunez, egipto, etc... se puede montar un belen, y ademas con israel por medio, en fin, un destino que igual se tarda tiempo en ir...

Entramos en Keops. Los primeros metros, curiosamente, nos recuerdan (para el que la conozca) a la gruta de el parque de La Florida de Vitoria, donde cada navidad instalan el nacimiento. Es, supuestamente, el túnel excavado por los ladrones. Pero muy pronto llegamos al primer corredor de subida: estrecho, con dificultad caben dos personas. Y después llegamos a la Gran Galería...

Continúa tú Joseba...

Shackleton escribió:DIA 5

Tras el desayuno nos llevan a las Pirámides de Gizeh. El tráfico es intenso y algunas personas se ponen un poco nerviosas, temerosas de no llegar a tiempo para coger una entrada que permita entrar en la Grán Pirámide de Keops. En principio, sólo se ponían a la venta unas 150.

Tras alguna que otra carrera hasta la taquilla, los primeros afortunados van consiguiendo su entrada. Pero al final, por lo visto, pusieron a la venta muchas más así que yo pude hacerme con una, sin tantos agobios :-)

¿Qué decir de las Pirámides? Desde cerca, uno pierde cierta perspectiva. Son enormes eso es evidente, pero no hay nada, ningún edificio cerca, para poder comparar.

(continúa)

Yo era una de esas personas cardíacas por conseguir una entrada. En el viaje en bus hacia las pirámides me ponía nerviosísimo cada vez que el bus paraba en algún hotel a recoger pasajeros, o en el atasco final que se creó.

Nada más bajar del bus, corriendo hacia la taquilla. Me puse en la cola, y cada vez que veía a alguien de delante con su entrada para Keops, mi envidia era malsana. Estuve a punto de comprársela a uno por 50 euros, pero esperé. De mientras, pedía a un compañero que me comprase en la otra fila una entrada para Micerinos (de las tres pirámides, suele haber una cerrada de manera rotativa para que descansen del paso de los turistas, y en ese entonces la cerrada era Kefren).

Cuando llegó mi momento y me dieron entrada para Keops, casi me corro. Uno de los momentos de mi vida. Superior incluso a entrar en la gran pirámide

Luego sigo.

Shackleton escribió:Entramos en Keops. Los primeros metros, curiosamente, nos recuerdan (para el que la conozca) a la gruta de el parque de La Florida de Vitoria, donde cada navidad instalan el nacimiento. Es, supuestamente, el túnel excavado por los ladrones. Pero muy pronto llegamos al primer corredor de subida: estrecho, con dificultad caben dos personas. Y después llegamos a la Gran Galería...

Continúa tú Joseba...

Justo iba a escribir lo que te he puesto en negrita.

Shackleton escribió:Entramos en Keops. Los primeros metros, curiosamente, nos recuerdan (para el que la conozca) a la gruta de el parque de La Florida de Vitoria, donde cada navidad instalan el nacimiento. Es, supuestamente, el túnel excavado por los ladrones. Pero muy pronto llegamos al primer corredor de subida: estrecho, con dificultad caben dos personas. Y después llegamos a la Gran Galería...

Continúa tú Joseba...

Los que sean claustrofóbicos, que tengan cuidado en ese primer corredor ascendente. De todas formas, yo lo soy y no lo pasé tan mal, posiblemente porque no coincidió con gente bajando. Donde si me agobié (solo un poco) fue en la Gran Galería. La Gran Galería es un lugar muy espacioso (sobre todo en contraste al antedicho corredor ascendente) pero estaba REPLETO de personas. Parecía una manifestación. Casi todo, turistas orientales. Algunos de ellos de avanzada edad (más de uno lo pasaría mal con su espalda en determinados puntos de la pirámide...).

La Gran Galería es una obra de ingeniería que deja patidifuso a cualquiera: Es una estancia larga, alta, y (en comparación con otros corredores) relativamente ancha, que se extiende de manera ascendente hacia la cámara de Keops. En su parte de arriba, sucesivas bovedillas en varios niveles reparten los pesos. Si alguien os dice que en Gizah hay pirámides mejor que la de Keops, no le hagáis caso: solo por la Gran Galería, la pirámide que tenéis que visitar es Keops. Y añadamos a esto la circunstancia de ser la única de las grandes pirámides donde la cámara principal se encuentra más o menos en el centro de esta. No a ras de suelo o en los subterráneos.

Llegados a la parte superior de la Gran Galería, una pequeña escalera nos ayuda a subir una especie de gran escalón, y tras ello giramos 90º hacia nuestra izquierda y nos agachamos para llegar, unos pocos metros más allá, a una especie de antecámara. Nos volvemos a agachar y entramos... ¡a la Cámara de Keops!

Luego sigo.

Joseba escribió:

Shackleton escribió:Entramos en Keops. Los primeros metros, curiosamente, nos recuerdan (para el que la conozca) a la gruta de el parque de La Florida de Vitoria, donde cada navidad instalan el nacimiento. Es, supuestamente, el túnel excavado por los ladrones. Pero muy pronto llegamos al primer corredor de subida: estrecho, con dificultad caben dos personas. Y después llegamos a la Gran Galería...

Continúa tú Joseba...

Los que sean claustrofóbicos, que tengan cuidado en ese primer corredor ascendente. De todas formas, yo lo soy y no lo pasé tan mal, posiblemente porque no coincidió con gente bajando. Donde si me agobié (solo un poco) fue en la Gran Galería. La Gran Galería es un lugar muy espacioso (sobre todo en contraste al antedicho corredor ascendente) pero estaba REPLETO de personas. Parecía una manifestación. Casi todo, turistas orientales. Algunos de ellos de avanzada edad (más de uno lo pasaría mal con su espalda en determinados puntos de la pirámide...).

La Gran Galería es una obra de ingeniería que deja patidifuso a cualquiera: Es una estancia larga, alta, y (en comparación con otros corredores) relativamente ancha, que se extiende de manera ascendente hacia la cámara de Keops. En su parte de arriba, sucesivas bovedillas en varios niveles reparten los pesos. Si alguien os dice que en Gizah hay pirámides mejor que la de Keops, no le hagáis caso: solo por la Gran Galería, la pirámide que tenéis que visitar es Keops. Y añadamos a esto la circunstancia de ser la única de las grandes pirámides donde la cámara principal se encuentra más o menos en el centro de esta. No a ras de suelo o en los subterráneos.

Llegados a la parte superior de la Gran Galería, una pequeña escalera nos ayuda a subir una especie de gran escalón, y tras ello giramos 90º hacia nuestra izquierda y nos agachamos para llegar, unos pocos metros más allá, a una especie de antecámara. Nos volvemos a agachar y entramos... ¡a la Cámara de Keops!

Luego sigo.

Te da para escribir un libro,además tu que estudiaste historia,lo debiste gozar a lo grande,babe!!!!!!!!

La cámara de Keops tiene algo.

Posiblemente, una antigua energía prevalece entre esas viejas piedras. Extrañas fuerzas que convergen en su ubicación en el centro de la pirámide, caso único en Egipto.

Me introduzco en el sarcófago haciendo caso omiso al guardia, que me pedía 100 euros por permitirme cometer tal sacrilegio. Permanezco en su interior unos 20 segundos, ignorando las burlas y chanzas de los otros turistas.

La sobriedad de la estancia es abrumadora. Existe una peculiar perfección entre esos muros, reflejada en su inmejorable acústica. Toco las paredes a lo largo y ancho de la cámara, estremecido por tanta belleza escondida, que solo unos pocos parecen discernir. La mayoría saldrá diciendo que no hay nada en esa cámara ni en el resto de la pirámide, ¡pobre ignorancia!

En uno de los lados, un pequeño agujero rompe parcialmente esa armonía. Supongo que es uno de los canales de ventilación, ensanchado a posteriori con la intención de colocar algún adminículo moderno que facilite al viajero la estancia a nivel de respiración u otros.

Abandono la cámara de Keops sintiendo que algo de mí permanecerá para siempre en esa inquietante sala.

Mu bonito todo,pero de follar nanai.....

Lástima que no te diera tiempo a echarte una paja dentro del sarcófago, que hubiera sido lo suyo.

Steve Trumbo escribió:Lástima que no te diera tiempo a echarte una paja dentro del sarcófago, que hubiera sido lo suyo.

YOMISMO escribió:

Steve Trumbo escribió:Lástima que no te diera tiempo a echarte una paja dentro del sarcófago, que hubiera sido lo suyo.

Aunque lo mismo me estoy equivocando, no creas:

Joseba escribió:
Abandono la cámara de Keops sintiendo que algo de mí permanecerá para siempre en esa inquietante sala.

Steve Trumbo escribió:

YOMISMO escribió:

Steve Trumbo escribió:Lástima que no te diera tiempo a echarte una paja dentro del sarcófago, que hubiera sido lo suyo.

Aunque lo mismo me estoy equivocando, no creas:

Joseba escribió:
Abandono la cámara de Keops sintiendo que algo de mí permanecerá para siempre en esa inquietante sala.

Puede ser,quizá hubo lefazo ...

Me introduzco en el sarcófago haciendo caso omiso al guardia, que me pedía 100 euros por permitirme cometer tal sacrilegio

YOMISMO escribió:Me introduzco en el sarcófago haciendo caso omiso al guardia, que me pedía 100 euros por permitirme cometer tal sacrilegio

En uno de los lados, un pequeño agujero rompe parcialmente esa armonía


Por ahí la metió,ya lo tenemos

YOMISMO escribió:En uno de los lados, un pequeño agujero rompe parcialmente esa armonía


Por ahí la metió,ya lo tenemos

y también sabemos que no calza mucha tranca, que digamos

Joseba escribió:La cámara de Keops tiene algo.

La sobriedad de la estancia es abrumadora. Existe una peculiar perfección entre esos muros, reflejada en su inmejorable acústica. Toco las paredes a lo largo y ancho de la cámara, estremecido por tanta belleza escondida, que solo unos pocos parecen discernir. La mayoría saldrá diciendo que no hay nada en esa cámara ni en el resto de la pirámide, ¡pobre ignorancia!

Los muros son increíbles. Entre piedra y piedra no hay ni un milímetro de espacio. Son tan lisas y tan perfectamente colocadas, que parece que las han puesto ayer.

Joseba escribió:La cámara de Keops tiene algo.

Así es.
Cuando entras tienes una sensación que no se puede describir

Joseba escribió:La cámara de Keops tiene algo.

Posiblemente, una antigua energía prevalece entre esas viejas piedras. Extrañas fuerzas que convergen en su ubicación en el centro de la pirámide, caso único en Egipto.

Me introduzco en el sarcófago haciendo caso omiso al guardia, que me pedía 100 euros por permitirme cometer tal sacrilegio. Permanezco en su interior unos 20 segundos, ignorando las burlas y chanzas de los otros turistas.

La sobriedad de la estancia es abrumadora. Existe una peculiar perfección entre esos muros, reflejada en su inmejorable acústica. Toco las paredes a lo largo y ancho de la cámara, estremecido por tanta belleza escondida, que solo unos pocos parecen discernir. La mayoría saldrá diciendo que no hay nada en esa cámara ni en el resto de la pirámide, ¡pobre ignorancia!

En uno de los lados, un pequeño agujero rompe parcialmente esa armonía. Supongo que es uno de los canales de ventilación, ensanchado a posteriori con la intención de colocar algún adminículo moderno que facilite al viajero la estancia a nivel de respiración u otros.

Abandono la cámara de Keops sintiendo que algo de mí permanecerá para siempre en esa inquietante sala.

Como si te viera...

Nashville escribió:

Joseba escribió:La cámara de Keops tiene algo.

Posiblemente, una antigua energía prevalece entre esas viejas piedras. Extrañas fuerzas que convergen en su ubicación en el centro de la pirámide, caso único en Egipto.

Me introduzco en el sarcófago haciendo caso omiso al guardia, que me pedía 100 euros por permitirme cometer tal sacrilegio. Permanezco en su interior unos 20 segundos, ignorando las burlas y chanzas de los otros turistas.

La sobriedad de la estancia es abrumadora. Existe una peculiar perfección entre esos muros, reflejada en su inmejorable acústica. Toco las paredes a lo largo y ancho de la cámara, estremecido por tanta belleza escondida, que solo unos pocos parecen discernir. La mayoría saldrá diciendo que no hay nada en esa cámara ni en el resto de la pirámide, ¡pobre ignorancia!

En uno de los lados, un pequeño agujero rompe parcialmente esa armonía. Supongo que es uno de los canales de ventilación, ensanchado a posteriori con la intención de colocar algún adminículo moderno que facilite al viajero la estancia a nivel de respiración u otros.

Abandono la cámara de Keops sintiendo que algo de mí permanecerá para siempre en esa inquietante sala.

Como si te viera...

JAJAJAJAJAAJAJAJAJAJAJA!!

La página 20 de este topic me acaba de proporcionar unas risas que necesitaba.

A veces un paseo por el foro sienta cojonudo.

atila escribió:

La página 20 de este topic me acaba de proporcionar unas risas que necesitaba.

De lejos, la mejor del topic

La pirámide de Keops es impresionante... pero personalmente me gustó más la de Dashur....

Todo ello por supuesto por detrás de lo que más me ha impresionado de Egipto y que me ha parecido "escasamente" narrado en este topic:

Comemos en el restaurante Felfela (al colega Shackleton por alguna extraña razón no se le queda el nombre y lo denomina aún hoy en día con el nombre de "Felefa").

Felfela es una cadena de restaurantes de El Cairo. El mejor parece ser que es el del centro, pero aquel día comimos en el de la zona de Pirámides.

Nos habíamos despedido previamente del grupo (los servicios del guía para con nosotros terminaban ese día a la mañana), y la verdadera aventura estaba a punto de comenzar en ese momento.

Tras comer más o menos bien en el Felfela, llamo a un taxista que me había sido recomendado por una amiga de Vitoria, y el tío me dice que se ha jodido la pierna y acaba de salir del hospital, con lo que me va a endosar a un colega suyo llamado... ¡Aladino! para que nos transporte a donde deseemos.

Es entonces cuando pequé un poco de inocente: varios taxistas se encuentran en la puerta y les digo que no me interesan sus servicios, que yo quiero a Aladino. Viene al de unos minutos un tal Aladino (que presupongo que es el tío del que se ha hablado en este topic, ya que se le parece) y nos dice que montemos. Le decimos que nos lleve al barrio copto. Al de cinco minutos me llama al movil el taxista de la pierna jodida y cuando le digo que ya estamos en el taxi, me dice a voz en grito que salgamos de ahí cuanto antes, que ese no es el verdadero Aladino que él nos había dicho. Le paso el movil al tal Aladino y hablan los dos, en lo que creo que eran juramentos en su idioma. Me vuelve a pasar el movil y el del hospital me dice que le diga que se vuelva al Felfela, cosa que hace Aladino rechistando, aunque por un momento creía yo que ibamos a acabar como carnaza de algún puticlub gay egipcio.

Volvemos al Felfela y llega el verdadero Aladino (por cierto que llegados a ese punto yo ya creía que había cientos de Aladinos en El Cairo que se hacen pasar por el mismo, y lo sigo pensando en parte...). Este nuevo Aladino me llama por el nombre (ese error del nombre es el que cometí con el anterior Aladino) así que presupuse que era el verdadero, y un telefonazo al gilipuertas antedicho de la pata jodida del hospital me lo confirma.

Este nuevo Aladino tiene cierta pinta de chuloputas, pero como está recomendado, pues confío en él (segundo error del día) y le digo que nos lleve al barrio copto. Nos transporta allá conduciendo más mal que Carlos Sainz en sus días de mala suerte, y le decimos en la entrada al barrio que nos espere, a lo cual contesta el muy ioeputa: "Estaré aquí como un clavo".

Visitado el bario copto (hablaré de esa visita en otro mensaje, que es para darla de comer aparte) llegamos al taxi y ante nuestra sorpresa, lo están desguazando, aparte de que al tal Aladino no se le ve por ninguna parte. Pedimos a uno del taller que le vaya a buscar.

Aparece Aladino al de media hora, todo enfadado porque le hemos interrumpido en su rezo. Parece ser que estaba en una mezquita próxima cumpliendo fielmente uno de sus deberes como buen musulmán (cosa sobre la que tengo mis dudas, he de decir, por el aliento alcohólico que emanaba), mientras dejaba el taxi a cargo de unos del taller próximo para que le reparasen algunas movidas.

Comenzamos a discutir en mitad de la calle, lo que nos valió la bronca de unos parroquianos de un bar cercano, que alegaban que no les dejábamos escuchar el partido del Manchester que emitían en la tele. Conclusión: Dejamos ahí plantado a Aladino y su taxi y nos vamos a buscar otro taxi en las cercanías.

Lo de los taxis es un mundo en el Cairo...

Nosotros el primer día cogimos un taxi "en exclusiva" por 20 euros, medio día...

Primera y última, nos propusimos un precio tope, e hicimos TODOS los viajes restantes por 15 libras, de cualquier parte a cualquier parte independientemente de los pasajeros... y fue mucho más rentable. Previo regateo, claro... Sólo un taxista se negó a hacer el viaje desde la mezquita de alabastro hasta Giza por 15libras... y cogimos el siguiente de la fila, al que le propusimos 10 libras, y pensó que ibamos en serio porque habíamos dejado marchar el taxi anterior... así que al final el viaje más largo fue el más barato; 4 personas 10 libras cruzar el Cairo (menos de 2 euros!!)