Azkena Undergorund - Ray Owen´s Moon

Ray Owen´s Moon es el único álbum en solitario del cantante, guitarrista y compositor Ray Owen. Un disco de excelentes y potentes temas, con influencias de Jimi Hendrix, por el que Owen sentía verdadera pasión, repleto de los nuevos sonidos del Hard Rock de finales de los 60s, que llega a ofrecer, incluso, algún riff en el límite del Metal. Con gran trabajo de dobles, y triples, guitarras, a cargo del propio Ray Owen y de los excelentes guitarristas Les Nicol y Dick Stubbs, con un trabajo de bajo, cortesía del genio de Sid Gardner, realmente excepcional, y con unas partes de batería, de Ian McLean, realmente portentosas en algunos momentos. Un disco de sonido personal y directo, creativo y muy trabajado, de buenos temas y cuya enorme calidad es directamente proporcional al olvido absoluto en el que ha caído durante más de cuatro décadas.

“Ray Owen´s Moon”, el disco, es una obra interesantísima, repleta de buen hacer y madurez musical por todos lados. Una obra de temas potentes, a veces desplegando riffs en el límite del Metal, y siempre con esa extraña cualidad melódica en estribillos pegadizos, con una base rítmica, a cargo Sid Gardner e Ian Malean, excepcional, y unas dobles, y triples, guitarras, que interactúan juntas de una forma original y creativa. El disco en solitario de Ray Owen es una bocanada de aire fresco entre tanto abuso de los temas de base Blues de los grupos Ingleses a finales de los 60s. Lo principal, lo primero que llama la atención del oyente, y la columna vertebral del sonido del grupo, es la guitarra y la voz de Ray Owens. Sus partes de guitarra, sobre todo sus riffs, nos recuerdan a su idolatrado Jimi Hendrix, y son la base de las excelentes composiciones del grupo. Unas composiciones que mantienen siempre un nivel realmente alto en todo el disco. Ray Owen no tiene una excepcional voz, en cuanto a potencia, pero aun así demuestra que es un gran cantante, de voz camaleónica y perfectamente reconocible. Y no sólo es un buen cantante y guitarrista, y excelente compositor, también se atreve con partes de piano en algún tema, dejando patente su increíble talento musical.
El álbum Ray Owen´s Moon se abre con el extraño, y ya clásico, sonido - entre tenebroso y espacial - del Sintetizador Modular Moog de Sid Garner, mientras Ray Owen pronuncia, de forma tétrica, la frase “It´s Moon time, Moon time from London”…a la que siguen unas breves palabras en Ingles y Alemán (¿?) hasta fundirse en medio de un excelente riff “estilo Hendrix”, que sirve de base para el fenomenal “Talk to Me”. Un tema de estribillo pegadizo, con buen trabajo de voces y coros. “Try My Love” posee otro riff pegadizo marca de la casa, movido y dinámico, con influencias del Blues y el Boogie. “Hey Sweety” nos presenta un riff realmente heavy, con potente trabajo de guitarras a cargo de Les Nicol y Dick Stubbs, con buenas improvisaciones. Ray Owen con un estilo más potente de lo habitual, manteniendo siempre esa cualidad melódica de su voz. El trabajo de Sid Gardner al bajo, y de Ian McLean a la batería son magníficos. “Free Man” es un tema de Hard Blues tremendo, de ritmo rápido y riff potente y pegadizo. Con un trabajo de Ian McLean a la batería sólido, potente y enérgico, con unos dobles solos de guitarra excelentes. “Don´t Matter” es una verdadera maravilla, precioso tema de estilo melancólico y atmosférico, ritmo lento, con un sentimiento encantador formado a partir de una sucesión de acordes limpios y deliciosos de guitarra rítmica que, en un momento dado, cambian, del sonido limpio del comienzo a un sonido cargado de efecto wah wah de resultados excelentes y maravillosos. Y en el momento en que se une toda la banda, a la guitarra de Ray Owen y a la batería de Ian McLean, (guitarras rítmicas/solistas y bajo), el resultado es increíble y te parece transportarte a otro plano de existencia. Relajado, atmosférico, precioso. Las líneas e improvisaciones de bajo, de Sid Garner, son magnificas, y las partes de batería de Ian Malean en el estribillo maravillosas. Ambos están geniales, captando y amplificando todo ese sentimiento melódico de este fenomenal tema. A destacar la increíble clase que atesoraba Sid Gardner. Este tema te puede poner, perfectamente, un nudo en la garganta. Y le llega el turno a la versión de “Voodoo Child”, de Jimi Hendrix. La versión que se marca Ray Owen es excelente, ya que nunca tratan de imitar la versión de Hendrix sino que mantiene su propio estilo en todo momento, con un sonido y un estilo más actual y menos Bluesy que el tema de Hendrix. Las partes de guitarra solista son especialmente buenas en las improvisaciones y los solos. Es una pena que no se especifique en ningún momento quien es el responsable de los solos en cada tema, ya que tanto Rray Owens como Les Nicol y Dick Stubbs se alternan en las labores de rítmica y solista. “Ouiji” es un tema con toque Funk y R&B de ritmo tranquilo, con una guitarra una solista excelente, con buen gusto, y una labor vocal de Owens excelente, con mucho feeling, Esta vez con armonías vocales que le va como anillo al dedo a este tema. “Mississipi Woman” es otro tema de riff realmente potente, con cualidades del Metal. Se podria decir que es un Heavy Blues de potentes guitarras que interactúan juntas de una forma original y creativa. Las partes de guitarra rítmica como las de solista se alternan en cada canal, siempre con Ray Owen manteniendo el riff principal del tema, y Les Nicol y Dick Stubbs turnándose en la labores solistas muchas veces. Y sin pausa, llegamos a “50 Years Older”, el tema que cierra el álbum con broche de oro. Otro poderoso tema de Hard Rock con fantásticas dobles guitarras con un nuevo riff marca de la casa y un Ray Owen demostrando sus buenas cualidades vocales, cantando más histérico y con mas potencia que nunca. Uno de los temas más potentes del disco, y el mas adelantado a su tiempo de todos. En este tema el grupo nos presenta unos cambios de tiempo interesantes, pasando del vibrante y arrollador Hard Rock al ritmo sosegado de una balada melódica. El trabajo de bajo de Sid Garner es estratosférico e Ian McLean esta magnífico de nuevo a la batería, sobre todo en las partes en que improvisan. La producción de este tema es realmente excelente. El clímax, el crescendo final al que llega toda la banda, es tremendo. Un tema que cierra con broche de oro un álbum fantástico que se deja oír con facilidad y satisfacción. Una pequeña obra de arte olvidada de principios de los 70s. Una más de tantas.
Por suerte, este magnifico trabajo, después de décadas de olvido, fue reeditado en el año 2000, en CD, por el sello “SPM”, en una edición sencilla y parca en detalles. Menos es nada, y se puede conseguir con cierta facilidad en la actualidad.