CONCURSO MICRORRELATOS: Ronda 14 - Edición IV. DE GALA

5.- Varsovia, 1944

Tenía que destruir esa carta al terminar de leerla, como me indicabas en la última línea con tu pulcra caligrafía. Era vital que no cayera en otras manos. Tenía que haberla desmenuzado, tirado al fuego, en el mismo momento de terminar su lectura. Pero no lo hice. La he llevado siempre conmigo, y releído cada noche, en cada lugar que he estado, mientras el olor a perfume que aún la impregnaba, penetraba en mis fosas nasales evocando tu imagen en mi cerebro, mitigando tu ausencia.

No la destruí y ahora  ambos pagamos las consecuencias. Yo, arrodillado en la nieve, junto a mi coche, contemplando el negro agujero que me encañona, mientras el condecorado oficial, carta en mano, grita órdenes a sus hombres; y tú aguardando, sin saberlo, que una bota embarrada derribe tu puerta de una patada para arrastrarte a un húmedo calabozo. Demasiado tarde para decir que lo siento.

6.- Compasión

Tenía que destruir esa carta en cuanto llegase, como había hecho con todas las demás. La reconoció en el correo de la tarde, la letra picuda e impaciente de Lady Hay. Metió la misiva en su bolsillo y llevó el resto de la correspondencia en la bandeja a los señores. Más tarde, cuando la casa quedó en silencio, la abrió. Esta vez era corta y urgente, sin aquellas descripciones de los paisajes suizos ni de los paseos por la montaña con los otros enfermos. Ya no le quedaba tiempo, la tuberculosis empeoraba y rogaba al señor que fuera a verla.
Mientras la carta se convertía en cenizas sacó la pluma y escribió la última carta de amor, maldiciendo la cobardía de su amo por haber abandonado así a su joven amante.

Hank escribió:

3.- Isla Mujeres

Tenía que destruir esa carta de navegación. Si encontraban la isla se me iba a acabar rápido el chollo. Lo más complicado del viaje era regresar a casa sin ser descubierto. Finalmente, me aprendí la ruta sin necesidad de la carta y acabé por quemarla.

Solía ir dos veces por semana. Cuando amarraba mi embarcación me esperaba la jefa, Yennifer. El polvo con ella era siempre obligatorio. Después me dejaba elegir, pero claro, necesitaba unas horas para recuperarme.

Allí vivían unas doscientas mujeres. Había de todas las razas. Incluso una enana y dos siamesas. La única norma era que debía follármelas a todas al menos una vez cada trimestre. Al principio tuve libre albedrío, pero Yennifer se percató rápido de mis favoritismos.

Lógicamente, había semanas mejores que otras. La peor era la última del segundo mes, ya que tenía asignadas a todas las gordas de la isla.

no he podido evitar pensar en esta genial historia:

7.- Pavor

Tenía que destruir esa carta. Desde la primera vez que cruzamos miradas, cuando la encontré sobre la alfombra del salón aislada de una baraja que llevaba años sin ser jugada,
me transmitió que no era un simple trozo de cartón.

"Estoy vivo y voy a por ti..."

Era el funesto mensaje que parecía sugerirme esa macabra sonrisa.

Un escalofrío recorrió mi espalda mientras la veía consumirse en la chimenea, mirándome fijamente, con esa mueca diabólica.

"Nunca podrás librarte de mi..."

Comparto estas palabras con vosotros, desconocidos, en este foro, porque no puedo evitar desviar la mirada hacia la puerta de la habitación.

8.- Vigilante

Tenía que destruir esa carta, costara lo que costara. La enfermiza ansiedad que me generaba provocó que cuando el mensajero llegó misiva en mano, el estómago me había jugado una mala pasada y me pilló cagando. Ingratamente, abandoné lo que me ocupaba. Cuando aparecí en escena él ya estaba inquieto, probablemente consciente de la trascendencia del momento. Inmediatamente supo lo que estaba ocurriendo, y no pudo sino girar sobre sí mismo y huir. Corrí tras él, pero no tardé en descubrir que habían seleccionado al mejor agente para esta misión, y gradualmente conseguía alejarse de mí.

Maldiciendo para mis adentros, di esta persecución por infructuosa y volví descorazonado de vuelta al jardín. Juro que en ese momento lo habría dejado todo. A decir verdad, todo se me pasó al vislumbrar el cuenco repleto de pienso. Terminé de cagar y me dispuse a aprovechar ese manjar. Mañana sería otro día.

salakov escribió:

Hank escribió:

3.- Isla Mujeres

Tenía que destruir esa carta de navegación. Si encontraban la isla se me iba a acabar rápido el chollo. Lo más complicado del viaje era regresar a casa sin ser descubierto. Finalmente, me aprendí la ruta sin necesidad de la carta y acabé por quemarla.

Solía ir dos veces por semana. Cuando amarraba mi embarcación me esperaba la jefa, Yennifer. El polvo con ella era siempre obligatorio. Después me dejaba elegir, pero claro, necesitaba unas horas para recuperarme.

Allí vivían unas doscientas mujeres. Había de todas las razas. Incluso una enana y dos siamesas. La única norma era que debía follármelas a todas al menos una vez cada trimestre. Al principio tuve libre albedrío, pero Yennifer se percató rápido de mis favoritismos.

Lógicamente, había semanas mejores que otras. La peor era la última del segundo mes, ya que tenía asignadas a todas las gordas de la isla.

no he podido evitar pensar en esta genial historia:

Hostis, me leí hace años el libro de Vargas Llosa —un coñazo— y posteriormente vi la película porque salía Angie Cepeda.

Oh, Angie...

salakov escribió:No me gusta Vargas Llosa, no.

Ni como persona ni como escritor.

Hank escribió:

6.- Compasión

Tenía que destruir esa carta en cuanto llegase, como había hecho con todas las demás. La reconoció en el correo de la tarde, la letra picuda e impaciente de Lady Hay. Metió la misiva en su bolsillo y llevó el resto de la correspondencia en la bandeja a los señores. Más tarde, cuando la casa quedó en silencio, la abrió. Esta vez era corta y urgente, sin aquellas descripciones de los paisajes suizos ni de los paseos por la montaña con los otros enfermos. Ya no le quedaba tiempo, la tuberculosis empeoraba y rogaba al señor que fuera a verla.
Mientras la carta se convertía en cenizas sacó la pluma y escribió la última carta de amor, maldiciendo la cobardía de su amo por haber abandonado así a su joven amante.

¿los señores? ¿qué señores?

me gusta el relato, pero después de leerlo dos veces se me queda una cara de WTF! como un piano...

Koikila escribió:

Hank escribió:

6.- Compasión

Tenía que destruir esa carta en cuanto llegase, como había hecho con todas las demás. La reconoció en el correo de la tarde, la letra picuda e impaciente de Lady Hay. Metió la misiva en su bolsillo y llevó el resto de la correspondencia en la bandeja a los señores. Más tarde, cuando la casa quedó en silencio, la abrió. Esta vez era corta y urgente, sin aquellas descripciones de los paisajes suizos ni de los paseos por la montaña con los otros enfermos. Ya no le quedaba tiempo, la tuberculosis empeoraba y rogaba al señor que fuera a verla.
Mientras la carta se convertía en cenizas sacó la pluma y escribió la última carta de amor, maldiciendo la cobardía de su amo por haber abandonado así a su joven amante.

¿los señores? ¿qué señores?

me gusta el relato, pero después de leerlo dos veces se me queda una cara de WTF! como un piano...

Hank escribió:

Koikila escribió:

Hank escribió:

6.- Compasión

Tenía que destruir esa carta en cuanto llegase, como había hecho con todas las demás. La reconoció en el correo de la tarde, la letra picuda e impaciente de Lady Hay. Metió la misiva en su bolsillo y llevó el resto de la correspondencia en la bandeja a los señores. Más tarde, cuando la casa quedó en silencio, la abrió. Esta vez era corta y urgente, sin aquellas descripciones de los paisajes suizos ni de los paseos por la montaña con los otros enfermos. Ya no le quedaba tiempo, la tuberculosis empeoraba y rogaba al señor que fuera a verla.
Mientras la carta se convertía en cenizas sacó la pluma y escribió la última carta de amor, maldiciendo la cobardía de su amo por haber abandonado así a su joven amante.

¿los señores? ¿qué señores?

me gusta el relato, pero después de leerlo dos veces se me queda una cara de WTF! como un piano...

qué buen gif

salakov escribió:

Hank escribió:

Koikila escribió:

Hank escribió:

6.- Compasión

Tenía que destruir esa carta en cuanto llegase, como había hecho con todas las demás. La reconoció en el correo de la tarde, la letra picuda e impaciente de Lady Hay. Metió la misiva en su bolsillo y llevó el resto de la correspondencia en la bandeja a los señores. Más tarde, cuando la casa quedó en silencio, la abrió. Esta vez era corta y urgente, sin aquellas descripciones de los paisajes suizos ni de los paseos por la montaña con los otros enfermos. Ya no le quedaba tiempo, la tuberculosis empeoraba y rogaba al señor que fuera a verla.
Mientras la carta se convertía en cenizas sacó la pluma y escribió la última carta de amor, maldiciendo la cobardía de su amo por haber abandonado así a su joven amante.

¿los señores? ¿qué señores?

me gusta el relato, pero después de leerlo dos veces se me queda una cara de WTF! como un piano...

qué buen gif

Y qué buena película. Y qué buen libro.

Nomeko7 escribió:Bai es vamos en italiano.

Hank escribió:¿te has levantado encriptado?

Hank escribió:

Nomeko7 escribió:Bai es vamos en italiano.

Bai es como llamo a mi mejor amigo...

será Dai, ¿no?

Nomeko7 escribió:

Hank escribió:

Nomeko7 escribió:Bai es vamos en italiano.

Bai es como llamo a mi mejor amigo...

será Dai, ¿no?

Vamos en italiano es andamio.

Hank escribió:

Nomeko7 escribió:

Hank escribió:

Nomeko7 escribió:Bai es vamos en italiano.

Bai es como llamo a mi mejor amigo...

será Dai, ¿no?

Vamos en italiano es andamio.

tú también andas fino hoy...

será andiamo... ¿no?

Hank escribió:

3.- Isla Mujeres

Tenía que destruir esa carta de navegación. Si encontraban la isla se me iba a acabar rápido el chollo. Lo más complicado del viaje era regresar a casa sin ser descubierto. Finalmente, me aprendí la ruta sin necesidad de la carta y acabé por quemarla.

Solía ir dos veces por semana. Cuando amarraba mi embarcación me esperaba la jefa, Yennifer. El polvo con ella era siempre obligatorio. Después me dejaba elegir, pero claro, necesitaba unas horas para recuperarme.

Allí vivían unas doscientas mujeres. Había de todas las razas. Incluso una enana y dos siamesas. La única norma era que debía follármelas a todas al menos una vez cada trimestre. Al principio tuve libre albedrío, pero Yennifer se percató rápido de mis favoritismos.

Lógicamente, había semanas mejores que otras. La peor era la última del segundo mes, ya que tenía asignadas a todas las gordas de la isla.

no he podido evitar pensar en esta genial historia:

Hank escribió:

8.- Vigilante

Tenía que destruir esa carta, costara lo que costara. La enfermiza ansiedad que me generaba provocó que cuando el mensajero llegó misiva en mano, el estómago me había jugado una mala pasada y me pilló cagando. Ingratamente, abandoné lo que me ocupaba. Cuando aparecí en escena él ya estaba inquieto, probablemente consciente de la trascendencia del momento. Inmediatamente supo lo que estaba ocurriendo, y no pudo sino girar sobre sí mismo y huir. Corrí tras él, pero no tardé en descubrir que habían seleccionado al mejor agente para esta misión, y gradualmente conseguía alejarse de mí.

Maldiciendo para mis adentros, di esta persecución por infructuosa y volví descorazonado de vuelta al jardín. Juro que en ese momento lo habría dejado todo. A decir verdad, todo se me pasó al vislumbrar el cuenco repleto de pienso. Terminé de cagar y me dispuse a aprovechar ese manjar. Mañana sería otro día.

pues vale 2...

esta ronda ha empezado regulera regulera... espero que la cosa se anime mi querido Toro, tu frase bien lo merece...

minutos musicales:

RegSound escribió:Aprovecho para felicitar al grandísimo Kupi si nos lee

Toro escribió:

Hank escribió:

8.- Vigilante

Tenía que destruir esa carta, costara lo que costara. La enfermiza ansiedad que me generaba provocó que cuando el mensajero llegó misiva en mano, el estómago me había jugado una mala pasada y me pilló cagando. Ingratamente, abandoné lo que me ocupaba. Cuando aparecí en escena él ya estaba inquieto, probablemente consciente de la trascendencia del momento. Inmediatamente supo lo que estaba ocurriendo, y no pudo sino girar sobre sí mismo y huir. Corrí tras él, pero no tardé en descubrir que habían seleccionado al mejor agente para esta misión, y gradualmente conseguía alejarse de mí.

Maldiciendo para mis adentros, di esta persecución por infructuosa y volví descorazonado de vuelta al jardín. Juro que en ese momento lo habría dejado todo. A decir verdad, todo se me pasó al vislumbrar el cuenco repleto de pienso. Terminé de cagar y me dispuse a aprovechar ese manjar. Mañana sería otro día.

pues vale 2...

esta ronda ha empezado regulera regulera... espero que la cosa se anime mi querido Toro, tu frase bien lo merece...

minutos musicales:

Gracias Hank, aunque a mi los relatos me están gustando

De hecho en este creo que todo es un tema de planteamiento, a lo mejor te ha situado en el punto de vista que el narrador es un humano.... y a mi me da que más que eso, ladra

Toro escribió:9.- Ántrax

Tenía que destruir esa carta que estaba creando el pánico. Nos llegó el aviso a las autoridades de que una de las cartas del despacho presidencial contenía ántrax, la que tuviese un ribete morado era la única pista que teníamos. Tras la deliberación del equipo fui el asignado para la misión, así que allí estaba yo, dentro del despacho con mi traje de protección puesto.

Busqué en la mesa la susodicha carta y cuando la encontré me subí en ella, abrí el conducto de ventilación, despegué con un abrecartas el sello que cerraba el sobre, la deposité en el conducto y lo cerré. La epidemia se propagaría por todo el edificio.

Saqué del bolsillo del traje una carta con ribete morado que me serviría de señuelo y la destruí siguiendo el procedimiento. Mi trabajo ya estaba hecho. Nunca pensarán que yo era parte de la conspiración.

Toro escribió:10.- Tal vez solo soy un salvaje y no comprendo nada (Noah Sealth)

Tenía que destruir esa carta, ese fue el primer impulso de Franklin Pierce. Leerla le había causado dolor, ese tipo de dolor soterrado y persistente que solo las verdades incómodas pueden producir. Con las palabras de Noah resonando en su mente salió al balcón, cerró los ojos con la esperanza de escuchar el aleteo de los insectos o el sonido de las flores abriéndose en primavera, pero todo era devorado por el bullicio de la ciudad. Miró después el río y solo encontró suciedad y podredumbre, luego el rostro de sus hombre y solo encontró arrogancia. Entonces se sintió desgraciado. —Tal vez solo soy un salvaje—dudaba el jefe indio. Pero no, Noah era un gran hombre. Pensó entonces que un mundo justo las cosas deberían pertenecer a aquellos que saben cuidarlas, y aunque sabía el terrible destino que aguardaba al piel roja, en su conciencia habían ganado los indios.

Toro escribió:Todo listo para la batalla con m

La asignación del relato que le toca abanderar para la victoria final es:

4.- Estoy en Minas Anor

- Tenía que destruir esa carta.
- ¿Qué?
- La de cócteles, la del Blue Angel.
- La hostia, ¿otra vez tía? ¿lo de escribir tu número y el mensaje? joder.
- Llevaba encima tres gintonics.
- No me lo digas, pusiste lo de Patty Smith.
- Fue lo de Éowyn.
- Joder.


Quedo a la espera de su asignación para poder hacerle frente con un buen saco de bonanzas del relato que me proponga

Hank escribió:

Toro escribió:Todo listo para la batalla con m

La asignación del relato que le toca abanderar para la victoria final es:

4.- Estoy en Minas Anor

- Tenía que destruir esa carta.
- ¿Qué?
- La de cócteles, la del Blue Angel.
- La hostia, ¿otra vez tía? ¿lo de escribir tu número y el mensaje? joder.
- Llevaba encima tres gintonics.
- No me lo digas, pusiste lo de Patty Smith.
- Fue lo de Éowyn.
- Joder.


Quedo a la espera de su asignación para poder hacerle frente con un buen saco de bonanzas del relato que me proponga

Toro escribió:Todo listo para la batalla con m

La asignación del relato que le toca abanderar para la victoria final es:

4.- Estoy en Minas Anor

- Tenía que destruir esa carta.
- ¿Qué?
- La de cócteles, la del Blue Angel.
- La hostia, ¿otra vez tía? ¿lo de escribir tu número y el mensaje? joder.
- Llevaba encima tres gintonics.
- No me lo digas, pusiste lo de Patty Smith.
- Fue lo de Éowyn.
- Joder.


Quedo a la espera de su asignación para poder hacerle frente con un buen saco de bonanzas del relato que me proponga

Toro escribió:2.- Collage

Tenía que destruir esa carta, todo en ella era patético. Era una carta llena de reproches crueles como sólo se pueden lanzar a alguien muy amado. Había conocido a V hacía cuatro años, una historia de renuncias y menesteres, y en esas últimas palabras había intentado condensar toda su frustración. Su propósito había sido hacer kintsugi, reconstruir los pedazos rotos de su corazón uniéndolos con oro, pero el resultado final había sido un collage hierático e incoherente. No había belleza en sus cicatrices, ni poesía en sus palabras. Su epílogo eran los desvaríos de un loco rencoroso; su amor, un amor lejano. «Los besos por correo no llegan nunca a su destino, se los beben por el camino los fantasmas», recordó las palabras de Kafka. Y prendió fuego.
(…)
Los periódicos titularían al día siguiente: “VÁNDALOS QUEMAN UN BUZÓN POR VALOR DE 500 EUROS”. Las noticias nunca dicen la verdad.

Ecthelion escribió:

Toro escribió:Todo listo para la batalla con m

La asignación del relato que le toca abanderar para la victoria final es:

4.- Estoy en Minas Anor

- Tenía que destruir esa carta.
- ¿Qué?
- La de cócteles, la del Blue Angel.
- La hostia, ¿otra vez tía? ¿lo de escribir tu número y el mensaje? joder.
- Llevaba encima tres gintonics.
- No me lo digas, pusiste lo de Patty Smith.
- Fue lo de Éowyn.
- Joder.


Quedo a la espera de su asignación para poder hacerle frente con un buen saco de bonanzas del relato que me proponga

Gran relato. Muy original, sutil y divertido, con referencias accesibles. Pero el que lo tiene que defender es otro.

Pinta a gran ronda de nuevo.

Toro escribió:

Hank escribió:

Toro escribió:Todo listo para la batalla con m

La asignación del relato que le toca abanderar para la victoria final es:

4.- Estoy en Minas Anor

- Tenía que destruir esa carta.
- ¿Qué?
- La de cócteles, la del Blue Angel.
- La hostia, ¿otra vez tía? ¿lo de escribir tu número y el mensaje? joder.
- Llevaba encima tres gintonics.
- No me lo digas, pusiste lo de Patty Smith.
- Fue lo de Éowyn.
- Joder.


Quedo a la espera de su asignación para poder hacerle frente con un buen saco de bonanzas del relato que me proponga

m señor escribió:

Ecthelion escribió:

Toro escribió:Todo listo para la batalla con m

La asignación del relato que le toca abanderar para la victoria final es:

4.- Estoy en Minas Anor

- Tenía que destruir esa carta.
- ¿Qué?
- La de cócteles, la del Blue Angel.
- La hostia, ¿otra vez tía? ¿lo de escribir tu número y el mensaje? joder.
- Llevaba encima tres gintonics.
- No me lo digas, pusiste lo de Patty Smith.
- Fue lo de Éowyn.
- Joder.


Quedo a la espera de su asignación para poder hacerle frente con un buen saco de bonanzas del relato que me proponga

Gran relato. Muy original, sutil y divertido, con referencias accesibles. Pero el que lo tiene que defender es otro.

Pinta a gran ronda de nuevo.

Si te quieres unir....cuanto más seamos más diversión......puedo esperar a que Toro me de otro,arqui...
m

m señor escribió:

Toro escribió:2.- Collage

Tenía que destruir esa carta, todo en ella era patético. Era una carta llena de reproches crueles como sólo se pueden lanzar a alguien muy amado. Había conocido a V hacía cuatro años, una historia de renuncias y menesteres, y en esas últimas palabras había intentado condensar toda su frustración. Su propósito había sido hacer kintsugi, reconstruir los pedazos rotos de su corazón uniéndolos con oro, pero el resultado final había sido un collage hierático e incoherente. No había belleza en sus cicatrices, ni poesía en sus palabras. Su epílogo eran los desvaríos de un loco rencoroso; su amor, un amor lejano. «Los besos por correo no llegan nunca a su destino, se los beben por el camino los fantasmas», recordó las palabras de Kafka. Y prendió fuego.
(…)
Los periódicos titularían al día siguiente: “VÁNDALOS QUEMAN UN BUZÓN POR VALOR DE 500 EUROS”. Las noticias nunca dicen la verdad.

Vamos allá. ....tu relato toro.....que conste que pensaba dejarlo para otra ronda,ya que creo de verdad que juegas con ventaja. .....pero acepto el reto.
m

Ecthelion escribió:

m señor escribió:

Ecthelion escribió:

Toro escribió:Todo listo para la batalla con m

La asignación del relato que le toca abanderar para la victoria final es:

4.- Estoy en Minas Anor

- Tenía que destruir esa carta.
- ¿Qué?
- La de cócteles, la del Blue Angel.
- La hostia, ¿otra vez tía? ¿lo de escribir tu número y el mensaje? joder.
- Llevaba encima tres gintonics.
- No me lo digas, pusiste lo de Patty Smith.
- Fue lo de Éowyn.
- Joder.


Quedo a la espera de su asignación para poder hacerle frente con un buen saco de bonanzas del relato que me proponga

Gran relato. Muy original, sutil y divertido, con referencias accesibles. Pero el que lo tiene que defender es otro.

Pinta a gran ronda de nuevo.

Si te quieres unir....cuanto más seamos más diversión......puedo esperar a que Toro me de otro,arqui...
m

No, no, por favor. Prefiero observar desde la barrera. Ya me ha dado bastante pudor hacer shows viviendo en la mediocridad de la tabla.

m señor escribió:

Toro escribió:

Hank escribió:

Toro escribió:Todo listo para la batalla con m

La asignación del relato que le toca abanderar para la victoria final es:

4.- Estoy en Minas Anor

- Tenía que destruir esa carta.
- ¿Qué?
- La de cócteles, la del Blue Angel.
- La hostia, ¿otra vez tía? ¿lo de escribir tu número y el mensaje? joder.
- Llevaba encima tres gintonics.
- No me lo digas, pusiste lo de Patty Smith.
- Fue lo de Éowyn.
- Joder.


Quedo a la espera de su asignación para poder hacerle frente con un buen saco de bonanzas del relato que me proponga

RYU era mucho mejor. .....Sin comparación.
m