Ronda 7.35 del SUPER Concurso de Microrrelatos del ForoAzkena. Votaciones hasta las 22. Gala 22.45

Me han gustado tanto los anuncios de la ronda anterior que vamos a usar uno de ellos para esta Ronda:



Quiero que conteis vuestra historia con Masymas y luego enviemos los micros al concurso. Así que esta ronda es TEMÁTICA

Concepto: Masymas

Pero para que no me odies aún más y más, voy a poner frase:

“Pasé por el Masymas a comprar…”

Como todo buen súper, tendremos unas cuantas ofertas. Para empezar, 2 puntos adicionales a los que envíen el micro antes del lunes a las 12

Durante la ronda actualizaremos promociones.

Abrazo!!

Oferta Early Bird!! Hasta el martes a las 9 AM los micros recibidos llevan 1 punto extra.

Oferta Chou! Punto extra para los que hagan show. Vinny se lleva 2 puntos por abrir el baile.

Reglas:

Accesorios varios:

CLASIFICACIÓN VII EDICIÓN:

Relatos a concurso

1-Dignidad

Pasé por el Masymas a comprar más y más. Es el supermercado de referencia para los que sufrimos de oniomanía. No nos compadezcan; sí, somos compradores compulsivos, pero a mucha honra. Mucho peor son los que acuden a AhorraMas, que cuentan las monedas antes de salir de casa. O los del Carrefour, que nunca se deciden; siempre están en una encrucijada. Yo sin embargo lo tengo claro, pero también me gusta comer bien, así que Lidl y Aldi quedaron descartados hace ya tiempo. Auchán no está mal, pero su nombre me recordaba demasiado a mi enemiga por antonomasia: la hucha. Ahora si me disculpan he de dejarles, acaban de abrir otra caja y debemos pasar en orden de llegada para pagar nuestra compra cuanto antes.

¿Cómo? ¿Se han quedado pensando por qué no he mencionado Mercadona? Sí, estoy enfermo, probablemente no tenga cura, pero todavía me queda algo de dignidad.



2-Aida

Pasaba todos los días por el Masymas de la calle Instituto a comprar embutido. Estrenábamos milenio y yo era un estudiante que compartía piso en Cimadevilla. Los bocadillos fríos eran mi principal sustento y así la conocí. Detrás de la charcutería del supermercado brillaba la criatura más celestial que hayáis conocido: pelo moreno, piel luminosa, sus ojos verdes relampagueaban como la llama del cobre. Me enamoré como un loco y comencé a pedir raciones diminutas —«apenas cincuenta gramos de salchichón»— para tener la excusa de regresar. Algunos días acudía mañana y tarde por verla. Aida, se llamaba, y nunca logré derribar el muro de mi proverbial timidez. Simplemente, un día dejó de estar. «Se ha ido a Londres con su novio», me explicaron y yo abandoné el Masymas envuelto en lágrimas. Todavía hoy puedo regresar a aquel dolor, a aquella rabia despechada, arrojando jamón de pavo contra la playa de San Lorenzo.


3-Cvonfedsión.

Acabvvo de msstar a mi marrrido, su snangre fresca tiñwwe mivcueertpo. Mis dedssdos yyerran lads teclas, imprecisos, viscoosos. Skilencio...ssspólo el batzir de mis mzanmdíbulas mierrntras matstiico syus vbbísceras. Dcios mío qu´é he hehcho. No espero que nadie lo entienda. Pero ttennnía que conmer...¡Ddfe vewras lo necesitaba11!
Una sewmana  buscandppo como una deseeeñperada, recorrié´bndome la ciudad y alrrrrededdores todos los masymas. ¿Y para qué? Para nada...hjjoder. ¿Y en la tienmda online?'' Tres cuartros de lo mnnismoo, niuna mísera bandeja de chuletas sajonas El chico.
Tendría que habersospechado, no era npormsal ese ansía. Un mes comiendo chgguletas... Al principio conmimarido, hasta que al cuaerto día seguido sde quejó,el pobre... En es emommento debí parar, peron no pyyude. Copmmía a escondidas. Las cajkeras empezaron a sospechar, me mniraban mal. Todffo el muyndo memiramal, y esxrte dolor mío solo hallla copnsuelo comiewwndo.

spoiler:

4-Consumo

Pasé por el Masymas a comprar aceite de girasol, pero no quedaba. Tampoco de oliva. Me dirigí a droguería y la sección de papel higiénico se encontraba igual. En ese momento pensé que no quedaba leche, por lo que fui a su parte y las entera estaban agotadas, también las entera sin lactosa. Aprovecharía para buscar algo de cena. Fui a por filetes de pollo, cero unidades también. Las hamburguesas de buey tenían buena pinta, pero su precio era prohibitivo, por lo que descarte su compra. Me fui asqueado, pero me llamó la atención de que había una estantería totalmente repleta, la de preservativos y lubricantes, justo la que más vacía debería de estar en estos tiempos, bien porqué al menos te des una alegría con tu pareja (o quién sea) en estos tiempos de mierdas o para usarlos con el sistema que nos está follando día tras día.


5-Deseas Masymas, sí, movimiento sensual

Llevo toda una vida trabajando aquí, imagínese, desde que se llamaba Supermercado Rodríguez. En los ochenta, Don Luis se obsesionó con aquella dichosa canción y cambió el nombre, pero siguió siendo una tranquila empresa familiar. Y así seguiría si no nos hubiesen comido el terreno los valencianos, preocupando muchísimo a la dirección. Decidieron mandar al maula de Luisito a hacer unos cursos a América —como Martita, la hija de Amancio, decían—. Afortunadamente ha vuelto lleno de buenas ideas. Esta semana, con el kilo de carne de guiso damos un paquete de azúcar y un paraguas, con dos latas de fabada, una olla express y comprando un jamón de Teruel, regalamos un aumento de pechos. Ha funcionado, tenemos esto de bote en bote, hasta cola hay para entrar. «¿Veis? ¡Nos follamos a Mercadona, con el pito nos los follamos!» —se ufana Luisito a diario—. Por eso es tan importante tener estudios.


6-¡Salud!

Pasé por el Masymas a comprar alcohol. Era un lugar de precios asequibles y mi economía no daba para muchas alegrías, pero sí lo suficiente como para endulzar mi soledad. Me hice con dos botellas de un brandy con el que ni el peor cocinero se atrevería a flambear el postre más asqueroso que imaginar pudiera.
Eran casi las ocho de otra tarde de viernes cualquiera y, mientras vaciaba poco a poco la primera de las botellas en mi escueta humanidad, observaba con cierto anhelo el deambular de jóvenes y no tanto que, alegres y bulliciosos, inauguraban el fin de semana. Uno más.
Mis recuerdos, algo borrosos, se difuminan en un charco de vómito. Huele a una mezcla de verduras fermentadas y bodega insalubre. Agarro la otra botella por el cuello hasta ahogarla, abro la ventana y despego hacia otra vida más generosa mientras brindo con el mundo entero.


7-Tenía hambre

Pasé por el MasyMas a comprar algo de cena, así que fui a la sección de congelados y cogí un preparado de setas y trigueros. Cuál fue mi sorpresa al abrir el paquete y encontrarme dentro dedos humanos, congelados junto a los espárragos.

Al día siguiente, fui al supermercado para poner una reclamación.

-“Pero, ¿ha traído usted la bolsa con los dedos para comprobarlo? Comprenderá que no podemos fiarnos solo de su palabra”- desconfiaba el personal.

-“Verá, ya había puesto el fuego y los ajos se estaban dorando en el aceite. No quise desaprovecharlo y eché toda la bolsa… Una vez deshuesados estaban bien ricos, el truco fue sazonarlos a conciencia.”- me defendí, pero salí sin ninguna compensación.

Se hacía tarde, así que cogí otra bolsa congelada. Lo que había dentro eran dedos del pie, pero esta vez recordé hacerles una foto como prueba, antes de echarles sal y pimienta.


8- Singularidad

Al salir de trabajar, fui al Masymas a comprar algo de comer. Bueno, ya no era un Masymas, lo había comprado una cadena alemana y ahora se llamaba Aldel, o Ladi, o algo así. Quise comprar cachopo, pero me dijeron que ya no lo trabajaban. En lugar de fabes tenían beans, y de sidra solo había Ladrón de Manzanas. Pasé por la pescadería y pregunté si tenían pixín. “¿Pixín? No aidia de qué es eso, bro, pero tenemos un rape buenísimo”. Salí del súper y marché a Gascona a tomar algo, pero los chigres estaban cerrados y lo único que quedaba abierto era un 100 Montaditos. Llegué a casa y puse las noticias. El parlamento regional había aprobado la cooficialidad del asturiano. El presidente estaba exultante: “Con esta llei, garantizamos que'l Principáu siga siendo una tierra auténtica y geniuna, arguyosa de la so singularidá”.


9-Vacío

Pasé por el Masymas a comprar por necesidad.
En cuanto comencé a recorrer pasillos empezó la fiesta; hileras de colorines, brillos, plásticos y números danzaban a mi alrededor. Un festín de verduras, carnes, pastas y bebidas dibujaban una seductora coreografía rendida ante mi poder.
Sí, fuera de allí no era nadie. Cuarentón en casa de sus padres repartiendo pizzas. Pero aquí mandaba yo, y ellos lo sabían.
Juro que todos se pavoneaban y postraban para ser elegidos, si bien es cierto que cuando tienes insomnio nunca estas del todo dormido, ni despierto.
Así que decidí comprar eso, cápsulas de melatonina. Necesitaba dormir y descansar.
Tras sentirme poderoso con mi compra esperaba quedarme saciado unas horas.
Extraña realidad esta que me ha tocado en la que para sentirme lleno tengo que gastar lo poco que consigo a cambio de una repulsiva vida.
Ya ves tú que problema, habiendo supermercados de sobra.



10-La cena

Pasé por el Masymas a comprar más cerillas para rematar la torre de mi maqueta de la Catedral de Oviedo. También compré un tetrabrik de vino para llevar a la cena, para una vez que hago un amigo y me invita a un evento no quiero quedar como un idiota.



11-Genios del naming

Pasé por el Masymas a comprar una botella de aceite, pero me lié y me acabé llevando tres packs de cervezas, una lata de aceitunas, otra de boquerones, una pizza congelada, dos cajas de galletas de chocolate, un helado de caramelo y cacahuetes y un paquete de mascarillas FFP-2, que estaban de oferta. Podría ser peor: si hubiera pasado por el Menosymenos, no habría traído nada.


12-Príncipe

Pasé por el Masymas a comprar harina para galletas. Los niños querían “Príncipe”, pero era fin de mes. La cajera miró con mala cara, casi estaban cerrando, así que me apresuré por aquel pasillo que parecía más largo de lo habitual. No encontraba las harinas por mucho que buscara, y al mirar atrás en lugar de la caja vi una estantería de frascos extraños. Me habría despistado. Deambulé un buen rato, pero no encontraba a quien preguntar, tan sólo más corredores, cada vez más profundos. Bajo aromas a gominola y bollería se adivinaba cierto tufo a fango. Aceleré el paso al ver a un reponedor a lo lejos… Desapareció al doblar la esquina. Una risa histérica resonó tras estantes repletos de bandejas de carne chorreando. Vagué durante horas. Todo estaba en silencio. Grité, y me derrumbé entre sollozos.

Han pasado varios días. Sigo aquí. Los niños están solos. Por favor.


13-Benito, el litronas.

Pasé por el Masymas a por mi cheque descuento, me encontré con la Encarni que me quiso contar lo de su hijo camionero y convencerme para comprar una botella de aceite de girasol, necesidad que me habían creado otros, total que casi al empezar, se unió Roberto que era transportista para criticar al gobierno, el suyo, supongo. La abuela Sole nos dijo que se iban a acabar los limones y que deberíamos comprar varios kilos, yo no utilizaba limones como tampoco aceite de girasol y Koque nos recordó que en casa siempre tiene que haber papel higiénico y harina.
Me pareció todo muy coherente y al llegar a casa no tenía nada de lo que me recomendaron comprar, pero tenía la certeza de que todos eran gilipollas, más y más.


14-Noche de colegas

Pasé por el Masymas a comprar unos tragos, el licor de melón que tienen es buenísimo. También pillé unos 3D y pizzas congeladas. Habíamos quedado en el local para pasar la noche jugando al Assasin's Creed Valhalla, que acababa de salir. De pasada metí una botella de Black Vodka en oferta. La cajera pasó de mí sin pedirme el carnet ni nada. Fuera, había un tío pidiendo sin dientes se me quedó mirando y me acerqué sin pensar. «Dame algo, chico», dijo con acento raro, del Este o yo qué sé. No quitaba ojo a la bolsa del súper. Me sonó el móvil: «¿Te has perdido o qué?». «Voy, joder». Cuando llegué con él al local me miraron algo raro, haciendo payasadas a su espalda. Hasta que cogió el mando de la Play. ¡Menudo máquina! Nos machacó, se zampó una pizza y nos dejó sin vodka. Fue de puta madre.



15-Procrastinando

Pasé por el Masymas a comprar pero ya estaba cerrado. Es por esto que tendré que volver mañana.



16-Compras recurrentes

Pasé por el Másymás a comprar todos los tápers azules que quedaban. Me había dado cuenta de mi fallo de cálculo sobre el volumen de Andrés y en la sección del congelador dedicada a cuartos traseros me había quedado sin los recipientes preceptivos. Cada color y cada cajón tenían sus reglas y era preciso respetarlas. El chico de la caja me miró con curiosidad y cierta insistencia; creo que pensó que había vuelto por él.



17-Olvido

Pasé por el Masymas, pagué y regresé a mi casa. Nadie me señaló, nadie me dijo nada, hacía años que nadie se me acercaba a pedirme un autógrafo.

Definitivamente, el mundo había olvidado a Juan Carlos Ablanedo.



18-El encuentro

Pasé por el Masymás a comprar hachís. Quedaba con Ahmed una vez a la semana, en supermercados del barrio, donde los yogures. Masymás, decía el mensaje. Me puse el chándal viejo y la mascarilla usada; Bat y Clow se alborotaron, arañaban la puerta y ladraban mientras bajaba las escaleras, pero ya les sacaría de noche. Había poca gente, mejor. Vi a Ahmed, murmuramos algo. Ya que estaba allí cogí un fuet, tres packs de cerveza y una botella de whisky de oferta. Había una señora delante. Esperé, mientras miraba a la cajera. Era Elisa, mi novia del instituto. Bajé los ojos. Vi mis playeros raídos, el chándal desgastado, los dedos amarillentos agarrando las latas, mi diente mellado, mi barba de siete días, mi pelo sucio. Traté de enderezarme, pero me dolía. No la miré. No me reconoció. Lo propia miseria que quería ocultar sirvió de careta.

¿Masymas es un supermercado?

¿Ese "mas" implica conjunción adversativa?

En caso negativo, ¿por qué no tiene tilde?

salakov escribió:¿Masymas es un supermercado?

¿Ese "mas" implica conjunción adversativa?

En caso negativo, ¿por qué no tiene tilde?

info@aniversariomasymas.com

Cabeceras actualizadas          

Reglas:

Accesorios varios:

CLASIFICACIÓN VII EDICIÓN:

No sé lo que es el Masymás. Necesito documentarme.

Qué idea más cojonuda. Los del súper lo van a flipar.

¡Miasmas!  

Qué cancionaza. Qué discazo.

Pero oyeeee que creo q el plazo termina el domingo 27

Esta cláusula también es coercitiva:

https://www.aniversariomasymas.com/bases-concurso-cuentanos-tu-historia/

«Si se detecta que las historias son inventadas se considerará cómo fraude y automáticamente se excluye del concurso y de las condiciones de este.»

Es un puto reto, me encanta

Pues tenía un relato con extraterrestre.

No sé, me voy a arriesgar.

Bueno bueno bueno ya veo a Sala

Esto pide moñismo

Y yo debo ser la única que es cliente, vais a morder el polvo

lo de la recepción hasta el domingo 27 es claramente para presionar, seguro que al final aguantan hasta el jueves

Yo si gano, cedo el premio a los microrrelatenses asturianos.

Y que se lo gasten en alcohol. En alcohol del bueno. Sidra no.

salakov escribió:Yo si gano, cedo el premio a los microrrelatenses asturianos.

Y que se lo gasten en alcohol. En alcohol del bueno. Sidra no.

Te van a descalificar

Veo justo dar puntos a los que se animen y consigan que no los descalifiquen. Ojo que las bases son duras

Vinny, mira el primer post de este hilo

https://www.foroazkenarock.com/t59720-albums-desde-la-a-hasta-la-z

Esmeralda escribió:

salakov escribió:Yo si gano, cedo el premio a los microrrelatenses asturianos.

Y que se lo gasten en alcohol. En alcohol del bueno. Sidra no.

Te van a descalificar

Veo justo dar puntos a los que se animen y consigan que no los descalifiquen. Ojo que las bases son duras

A ver... 20 minutos de alocución???

Yo es que no veo el microrrelato por ahí por ninguna parte

RegSound escribió:Vinny, mira el primer post de este hilo

https://www.foroazkenarock.com/t59720-albums-desde-la-a-hasta-la-z

Pero cuando hiciste eso, no existía impera

salakov escribió:¿Masymas es un supermercado?

¿Ese "mas" implica conjunción adversativa?

En caso negativo, ¿por qué no tiene tilde?

pórque la gente, hal rebés que tu, no semos unos mimimimis de la bida!

Leído hasta aquí el hilo sin profundizar y...


Seguiré leyendo a ver si me entero

Toro escribió:

Esmeralda escribió:

salakov escribió:Yo si gano, cedo el premio a los microrrelatenses asturianos.

Y que se lo gasten en alcohol. En alcohol del bueno. Sidra no.

Te van a descalificar

Veo justo dar puntos a los que se animen y consigan que no los descalifiquen. Ojo que las bases son duras

A ver... 20 minutos de alocución???

Yo es que no veo el microrrelato por ahí por ninguna parte

Tienes contador de palabras de voz?

90 años han tenido que pasar para que servidor conozca de la existencia de masymas...bien.

Alguien más ha pensado en el difunto Luis Aragonés? Ya saben y más y más yganaryganar...cosas mías.

A alguien más,  le ha dado un vuelco el corazón cuando al inicio, casi parece leerse esto?:

Los participantes deberán ser mayores de edad.
Hijos de Luis Rodríguez S.A.
¿Seré yo hijo del señor Rodríguez Sa?
¿Lo seremos todos?

Me había planteado reclutar para la causa del microrrelatismo a una buena amiga que nos lee desde hace poco, pero antes le pido a la todopoderosa y maravillosa administración que me aclare algún concepto.
1. Nos regimos por las bases  del supermercado en cuanto a temática se refiere?*
2.¿Qué día termina el plazo de entrega?
3.¿Cabe la posibilidad de que cientos, qué digo cientos, miles de microrrelatos surgidos de este sacrosanto lugar, puedan llegar a colapsar a este emporio del tercer sector?

*Yo, como Salakov, tenía ya una historia pesparada, en mi caso sobre necropedofília.
También como él, la veo factible.

Lo que más cuesta es imaginar historias humanas protagonizadas por asturianos.

Nuxe escribió:90 años han tenido que pasar para que servidor conozca de la existencia de masymas...bien.

Alguien más  ha pensado en el difunto Luis Aragonés? Ya saben y más y más yganaryganar...cosas mías.

A alguien más,  le ha dado un vuelco el corazón cuando al inicio, casi parece leerse esto?:

Los participantes deberán ser mayores de edad.
Hijos de Luis Rodríguez S.A.
¿Seré yo hijo del señor Rodríguez Sa?
¿Lo seremos todos?

Me había planteado reclutar para la causa del microrrelatismo a una buena amiga que nos lee desde hace poco, pero antes le pido a la todopoderosa y maravillosa administración que me aclare algún concepto.
1. Nos regimos por las bases  del supermercado en cuanto a temática se refiere?*
2.¿Qué día termina el plazo de entrega?
3.¿Cabe la posibilidad de que cientos, qué digo cientos, miles de microrrelatos surgidos de este sacrosanto lugar, puedan llegar a colapsar a este emporio del tercer sector?

*Yo, como Salakov, tenía ya una historia pesparada, en mi caso sobre necropedofília.
También como él, la veo factible.

Hola Nuxe!!

1-Nos regimos por nuestras reglas habituales. El relato debe llevar el concepto Masymas, o si prefieres frase, empezar con "Pasé por el Masymas a comprar..."
2-La recepción terminará el Jueves a las 9 AM
3-Estoy seguro de que Masymas es capaz de leer por lo menos 30 microrrelatos sin colapsar

Ya tenemos los primeros chucruts!

1-Dignidad

Pasé por el Masymas a comprar más y más. Es el supermercado de referencia para los que sufrimos de oniomanía. No nos compadezcan; sí, somos compradores compulsivos, pero a mucha honra. Mucho peor son los que acuden a AhorraMas, que cuentan las monedas antes de salir de casa. O los del Carrefour, que nunca se deciden; siempre están en una encrucijada. Yo sin embargo lo tengo claro, pero también me gusta comer bien, así que Lidl y Aldi quedaron descartados hace ya tiempo. Auchán no está mal, pero su nombre me recordaba demasiado a mi enemiga por antonomasia: la hucha. Ahora si me disculpan he de dejarles, acaban de abrir otra caja y debemos pasar en orden de llegada para pagar nuestra compra cuanto antes.

¿Cómo? ¿Se han quedado pensando por qué no he mencionado Mercadona? Sí, estoy enfermo, probablemente no tenga cura, pero todavía me queda algo de dignidad.


2-Aida

Pasaba todos los días por el Masymas de la calle Instituto a comprar embutido. Estrenábamos milenio y yo era un estudiante que compartía piso en Cimadevilla. Los bocadillos fríos eran mi principal sustento y así la conocí. Detrás de la charcutería del supermercado brillaba la criatura más celestial que hayáis conocido: pelo moreno, piel luminosa, sus ojos verdes relampagueaban como la llama del cobre. Me enamoré como un loco y comencé a pedir raciones diminutas —«apenas cincuenta gramos de salchichón»— para tener la excusa de regresar. Algunos días acudía mañana y tarde por verla. Aida, se llamaba, y nunca logré derribar el muro de mi proverbial timidez. Simplemente, un día dejó de estar. «Se ha ido a Londres con su novio», me explicaron y yo abandoné el Masymas envuelto en lágrimas. Todavía hoy puedo regresar a aquel dolor, a aquella rabia despechada, arrojando jamón de pavo contra la playa de San Lorenzo.

Pienso mandarles mi micro aunque sea fuera de plazo sólo para imaginar la cara del que lo reciba.

Troy Mc Clure escribió:

Nuxe escribió:90 años han tenido que pasar para que servidor conozca de la existencia de masymas...bien.

Alguien más  ha pensado en el difunto Luis Aragonés? Ya saben y más y más yganaryganar...cosas mías.

A alguien más,  le ha dado un vuelco el corazón cuando al inicio, casi parece leerse esto?:

Los participantes deberán ser mayores de edad.
Hijos de Luis Rodríguez S.A.
¿Seré yo hijo del señor Rodríguez Sa?
¿Lo seremos todos?

Me había planteado reclutar para la causa del microrrelatismo a una buena amiga que nos lee desde hace poco, pero antes le pido a la todopoderosa y maravillosa administración que me aclare algún concepto.
1. Nos regimos por las bases  del supermercado en cuanto a temática se refiere?*
2.¿Qué día termina el plazo de entrega?
3.¿Cabe la posibilidad de que cientos, qué digo cientos, miles de microrrelatos surgidos de este sacrosanto lugar, puedan llegar a colapsar a este emporio del tercer sector?

*Yo, como Salakov, tenía ya una historia pesparada, en mi caso sobre necropedofília.
También como él, la veo factible.

Hola Nuxe!!

1-Nos regimos por nuestras reglas habituales. El relato debe llevar el concepto Masymas, o si prefieres frase, empezar con "Pasé por el Masymas a comprar..."
2-La recepción terminará el Jueves a las 9 AM
3-Estoy seguro de que Masymas es capaz de leer por lo menos 30 microrrelatos sin colapsar

Muchas gracias!!
Ahora mismo se lo comento a mi amiga a ver si la convenzo, que además escribe muy bien.

Nuxe, convence a tu amiga. Yo intenté lo propio con un amigo y dejó de serlo.

Por cierto, yo no leo ni Miasmas ni Ganaryganar. Yo leo Marimar, se nota quién tiene una mente sana y quién la tiene atormentada.

Zzzz escribió:Nuxe, convence a tu amiga. Yo intenté lo propio con un amigo y dejó de serlo.

Por cierto, yo no leo ni Miasmas ni Ganaryganar. Yo leo Marimar, se nota quién tiene una mente sana y quién la tiene atormentada.

No lo sabes tú bien...

Zzzz escribió:Pienso mandarles mi micro aunque sea fuera de plazo sólo para imaginar la cara del que lo reciba.

Joder, si

El primer micro que hice fue relativo a esta canción, aunque me equivoqué en el título y gané uno de mis negrospoeta.

No encontraba el hilo

Se restarán puntos a los que no acrediten haber mandado relato al masymas?

Yo tengo pensado el relato y no dudéis que lo voy a mandar a los señores de Masymas. Previa consulta a mi abogado, claro.

El envío de los micros a masymas es opcional, pero ya os comento que cualquier respuesta obtenida desde el departamento de marketing asturiano me la pasáis por privado y serán 2 puntos más de bonus

Más allá del acuse de recibo

Espero que podamos publicar un show del departamento de comunicación de masymas

tenemos tercer micro, realmente potente:

3-Cvonfedsión.

Acabvvo de msstar a mi marrrido, su snangre fresca tiñwwe mivcueertpo. Mis dedssdos yyerran lads teclas, imprecisos, viscoosos. Skilencio...ssspólo el batzir de mis mzanmdíbulas mierrntras matstiico syus vbbísceras. Dcios mío qu´é he hehcho. No espero que nadie lo entienda. Pero ttennnía que conmer...¡Ddfe vewras lo necesitaba11!
Una sewmana  buscandppo como una deseeeñperada, recorrié´bndome la ciudad y alrrrrededdores todos los masymas. ¿Y para qué? Para nada...hjjoder. ¿Y en la tienmda online?'' Tres cuartros de lo mnnismoo, niuna mísera bandeja de chuletas sajonas El chico.
Tendría que habersospechado, no era npormsal ese ansía. Un mes comiendo chgguletas... Al principio conmimarido, hasta que al cuaerto día seguido sde quejó,el pobre... En es emommento debí parar, peron no pyyude. Copmmía a escondidas. Las cajkeras empezaron a sospechar, me mniraban mal. Todffo el muyndo memiramal, y esxrte dolor mío solo hallla copnsuelo comiewwndo.

spoiler:

Me encantaría que me contestaran, aunque sea insultando.

Buenos días

Ya es domingo, tenemos Menosymenos tiempo.

Tic, tac. Tic, tac...

Y algo de TOC también.

Eduardo Montenegro escribió:Buenos días

Ya es domingo, tenemos Menosymenos tiempo.

Tic, tac. Tic, tac...

Y algo de TOC también.

Toc toc
Adelante...


m

a las 2 fueron las 3, así que tenemos 2 micros que valen por 3

4-Consumo

Pasé por el Masymas a comprar aceite de girasol, pero no quedaba. Tampoco de oliva. Me dirigí a droguería y la sección de papel higiénico se encontraba igual. En ese momento pensé que no quedaba leche, por lo que fui a su parte y las entera estaban agotadas, también las entera sin lactosa. Aprovecharía para buscar algo de cena. Fui a por filetes de pollo, cero unidades también. Las hamburguesas de buey tenían buena pinta, pero su precio era prohibitivo, por lo que descarte su compra. Me fui asqueado, pero me llamó la atención de que había una estantería totalmente repleta, la de preservativos y lubricantes, justo la que más vacía debería de estar en estos tiempos, bien porqué al menos te des una alegría con tu pareja (o quién sea) en estos tiempos de mierdas o para usarlos con el sistema que nos está follando día tras día.


5-Deseas Masymas, sí, movimiento sensual

Llevo toda una vida trabajando aquí, imagínese, desde que se llamaba Supermercado Rodríguez. En los ochenta, Don Luis se obsesionó con aquella dichosa canción y cambió el nombre, pero siguió siendo una tranquila empresa familiar. Y así seguiría si no nos hubiesen comido el terreno los valencianos, preocupando muchísimo a la dirección. Decidieron mandar al maula de Luisito a hacer unos cursos a América —como Martita, la hija de Amancio, decían—. Afortunadamente ha vuelto lleno de buenas ideas. Esta semana, con el kilo de carne de guiso damos un paquete de azúcar y un paraguas, con dos latas de fabada, una olla express y comprando un jamón de Teruel, regalamos un aumento de pechos. Ha funcionado, tenemos esto de bote en bote, hasta cola hay para entrar. «¿Veis? ¡Nos follamos a Mercadona, con el pito nos los follamos!» —se ufana Luisito a diario—. Por eso es tan importante tener estudios.

Estoy en casa de mi cuñada y esto me persigue

¿Una toalla con miasmas? Puaj

Qué color más sufrido.