RONDA 10.12 DEL CONCURSO DE MICRORRELATOS DE VENDEDORES DEL MUNDO - BOWIE GALA

Frase:

"Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo"

La frase no cuenta para las 150 palabras. Se admite el hombre o la mujer. Estás, está, estoy, estamos… aceptados.

Aseguro una administración lamentable. Buena semana relatistas  


Recepción de relatos hasta el Miércoles a las 22h.

RELATOS MARAVILLOSOS:

1. Macías y Facal

-Está hablando cara a cara con el hombre que vendió el mundo.
Macías se retrepó en su sillón por toda respuesta, mientras dejaba vagar su vista un instantes hacia unas amenazadores nubes oscuras que habían ocupado casi todo el hueco de la ventana.
El silencio no consiguió que Emiliano Facal prosiguiese con más revelaciones, por lo que Macías juzgó adecuado intervenir.
-Señor Facal, eso que usted me dice es extraordinario. Mire, por curiosidad, ¿le pidieron factura?, ¿tuvo que incluir el IVA? hizo las preguntas un poco al tuntún, por dar continuidad al diálogo, mientras venía a su mente la certeza de que no se había traído un paraguas.
Facal se quitó lentamente las gafas y fijó sus ojos en los de su interlocutor durante unos segundos.
Finalmente preguntó:
-¿Se encuentra usted bien?
En ese momento la enfermera Montes, sin llamar, como siempre, entró en el cuarto y reclamó a Facal para una analítica. El doctor Macías dio por finalizada la entrevista.

           

2. Conquistador

Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo. Te mira impasible conociendo su poder. Eres poco más que una partícula a punto de ser desterrada de la morada de los diez mil pueblos. Diez mil pueblos de diez mil familias que vivieron durante centurias antes de la gran lluvia. El cielo se oscurece antes de la última precipitación. Estás desnudo, desamparado, perdido antes de sucumbir a un ineludible destino. Se ha extinguido tu raza, tu sangre, y a punto están de desaparecer tus recuerdos. Putruk, el hombre que vendió el mundo, alarga su mano para tomar la tuya. Pero ignora tu última apuesta, ignora que eres Marduk, perpetuo Dios de las tormentas. Llueve a mares, inundando el mundo hasta sus últimas consecuencias. Sin tiempo a reaccionar, libera Putruk esa inmensa esfera de tierras y océanos, justo a tiempo para que tú, Marduk, rey de reyes, le regales la primera de tus carcajadas.

           

3. Bowie

Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo. En circunstancias normales esto no debería ser ni siquiera reseñable, pero éstas no lo son: estás muerto.
Por más que lo niegues, lo estás.
Estas escaleras donde nos encontramos me hacen pensar si estamos aquí en realidad. Pensé en ti y te imaginé dormido, pero no. Tras morir he conseguido ver lo que antes no podía. Solo en mi sonambulismo era capaz de ver más allá de lo que alcanzaban mis ojos.
No quise darme importancia con ese título, todos saben que Metrobolist era el nombre elegido y que fue un encuentro casual con la última canción la que me llevó a vender el mundo.
No solo vendí el mundo, sino que vine de otro mundo en forma de polvo estelar para poder ser un héroe.
Un héroe que terminó en polvo de estrella, de una estrella negra.

           

4. A ver cómo te quedas

—Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo.
La afirmación parecía extraña viniendo del tipo corriente que tenía frente a mí en la cafetería. Adopté mi pose de periodista imparcial y seguí tomando notas.
—Entiendo entonces que el mundo era previamente suyo.
—Exacto.
Intenté no levantar la ceja.
—¿Puede explicarme el proceso? Para que los lectores lo entiendan.
—Como anticristo, el mundo me pertenecía desde hace varios siglos…
—¿No pertenecía a dios?
Soltó una sonora carcajada.
—Anda, calla… ¿no ves cómo está el mundo?
—Sigamos.
—El caso es que me cansé de… la gestión administrativa. Lo vendí para tomarme unas vacaciones. Había un planeta de una galaxia lejana interesado en apropiárselo como inversión turística. Y aquí estamos —dijo sorbiendo el batido con su pajita.
Unos barrotes de hierro emergieron del suelo rodeándonos. Me hice pis encima al ver a los extraños seres acercándose a la jaula, cuando uno de ellos sacó una bolsa y nos lanzó unos cacahuetes.

           

5. La espera

«Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo».
Aquellas palabras me sorprendieron. Había transcurrido el tiempo suficiente como para que mis ojos atisbaran algo ―al menos un resquicio de claridad en aquella celda―, pero no había sido así. Hasta ese momento, había  imaginado como el miedo escapaba con cada exhalación; que el frío dibujaba en la noche ciega exuberantes nubes esculpidas sobre el calor que mi cuerpo liberaba. Esta ingenua ilusión me había servido para recobrar cierta calma. Y agradecí haber asistido junto a Janine a las clases de relajación antes de que Ziggy naciera. Entonces, desde el mismo rincón que la negrura había liberado antes, la voz emergió de nuevo.  
«Tú eres el que vendió su alma, ¿verdad?»
Asentí, Ziggy estaba vivo… «¡Vivo!».
...
Tom se sentó junto al hombre que vendió el mundo, y esperó.
...
«Estás cara a cara con el hombre que vendió su alma.
Tú eres el que vendió a su madre, ¿verdad?».

           

6. Cloruro mórfico

Estoy cara a cara con el hombre que vendió el mundo, mi mundo. Es el dios Baco uniformado de azul, es la primavera y una tarde de verano al mismo tiempo. Mago de la neuroquímica capaz de disipar cualquier sensación de dolor. Un millón de orgasmos contenidos en una jeringuilla de un mililitro. Recorrí el mundo entero en segundos. El mejor viaje de mi vida. La euforia invadía mis axones a la velocidad de la luz, mis poros se dilataban uno a uno erizados de lujuria, el éxtasis. Y de repente, la nada. La oscuridad me atrapa. Morfeo se adueña de todo mi ser y quedo a su merced. Un sueño babeante gustoso, la mejor siesta de mi puta vida. Sonrío. El tormento quedó atrás. Donde me encuentro hay paz, una habitación blanca me envuelve. No existe el mal. Hasta que el efecto me abandona y vuelvo a ser solo yo de vuelta al mundo tangible postrado en una cama de hospital.

           

7. Parque Paraíso

«Estás cara a cara con El Hombre Que Vendió El Mundo», escupió con la lengua fuera. Le gustaba ponerse nombres grandilocuentes, pero EHQVEM se llamaba Esteban. Tampoco vendió nunca el mundo, sino que se limitaba a trapichear. EHQVEM era el chandalero al que pedir polvo para volar o pastillas para dormir. Siempre acompañado de La Rodi —Rocío, AKA La Rodaballo, plana como una oblea y de ojos saltones—, se les podía encontrar en el anfiteatro del parque ministrando caramelos tras el envés de la mano. Inseparable pareja, EHQVEM sufrió mucho cuando La Rodi le dejó. Arrastraba los pies como alma en pena y comenzó a consumir. Se volvió impreciso y fue degradado del anfiteatro al arenal, junto con el resto de yonquis. «Hey, Esteban», me crucé anteayer con él. «No te equivoques, ¡soy El Hombre Que Vendió El Mundo!», respondió, pero la frase sonó banal como si a estas alturas, sumergido en el arroyo, ni él mismo se la creyera.

           

8. Número de ventas

-Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo, no puedes despedirme.
-Aunque sigas repitiendo eso constantemente, tu número de ventas es paupérrimo y no puedes continuar en el cargo.
-Es que nunca estás contento. La semana pasada vendí los números y hace dos las letras. Hace tres semanas los colores el lunes y el jueves el mundo, no sé que más hacer para tu beneplácito.
-Tú mismo lo estás diciendo. En tres semanas has vendido sólo una lámpara de globo terráqueo, un cubo de rubik, un Rummikub y un Scrabble. Esas ventas no sostienen este Toys' R' Us, por eso estás despedido.

           

9. El último susurro del océano

"Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo", dijo la anciana señalando la caja del vendedor ambulante en la esquina del mercado. "Cada objeto lleva el recuerdo de un lugar que ya no existe", explicó: una pieza de muralla de una ciudad olvidada, un reloj oxidado que no marcaba ninguna hora, o la piedra de un río extinto. La gente pasaba, ignorándolo. Pero cuando lo miré, quedé atrapada en sus ojos, en esa profunda tristeza que hablaba de un sacrificio.
"¿Por qué vendiste el mundo?", pregunté.
"Lo vendí porque no era mío", contestó, ofreciéndome una concha que, aseguraba, aún contenía el último susurro del océano que una vez bañó nuestras costas. Al tocarla, sentí el oleaje de algo que jamás había conocido, un eco de un mundo que jamás me perteneció. Me alejé, pero su voz me alcanzó: "Recuerda, todo lo que amas tiene un precio." Entonces sentí un vacío inexplicable, como si ya hubiera empezado a perderlo.

           

10. Quién te ha visto y quién te ve

Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo. Así, visto de cerca, no parece gran cosa, quizás porque se ha afeitado mal y el bigotito que se ha dejado para intentar pasar desapercibido le ha quedado asimétrico, el lado izquierdo ostensiblemente más corto que el derecho.
Ahora no es nadie, pero no hace tanto, sus tentáculos llegaban a cada rincón del planeta, a cada casa, a cada puerta. Luego vino la caída en bolsa, la quiebra, el escándalo y el exilio en este pueblo de la Costa Brava.
Tardaste tres meses en localizarlo, cuando lo hiciste, para tu sorpresa accedió a concederte una entrevista para el periódico. Estáis sentados en una terraza y se ha pedido un Bitter Kas, una bebida que por algún motivo te hace pensar en señoras mayores con permanente. Sacas la grabadora, aprietas el botón y lanzas la primera pregunta.
—Jeff Bezos, El hombre que vendió el mundo. ¿Se siente cómodo con ese apelativo?

           

11. El testaferro, el polígono industrial y resabios a Cucal

Está cara a cara con el hombre que vendió el mundo a las cucarachas —confesó—. No me juzgue, por un bonito monto usted también lo habría hecho. Además, incluí una clausula de usufructo para humanos, ellas no tienen prisa, saben que nos queda poco. Simpáticos insectos, extremadamente hábiles para las finanzas. Sólo algunas, claro, esas que nunca verá, la mayoría se limitan a corretear, comer algo de basura y tratar de que no las aplasten, en eso apenas se diferencian de los humanos. Mire, ahí llega una... ¡Rubiaaaa! How are you, darling? Es americana, ¿sabe? Ande, marche ya que perderá el vuelo, ingréselo en la cuenta suiza que indiqué —me despidió alcanzándome el maletín—. Había anochecido cuando salí de aquella nave destartalada. Entre toda la gente extraña que conocí en el negocio, jamás encontré un tarado semejante, pero no me pagaban para pensar. Una cucaracha salió de una alcantarilla y correteó entre mis pies. Me cuidé de pisarla, uno nunca sabe.

           

12. Homenaje

¡Estás delante del Hombre Que Vendió El Mundo! —dijo altivo aquel tipo estirado.

Todos los presentes en el carromato de hombres extraordinarios Viuda Gómez de Honrubia le miraron con desdén. 
No parecía algo tan extraordinario, solo un tema comercial sin más.

—¿Y cuánto te han pagado? —preguntó Uno. 
—Y si eres tan rico, ¿qué haces aquí con nosotros? —preguntó Dos. 
—¿Y dónde tienes las escrituras? —preguntó Tres.

No había aún abierto la boca para responder cuando, de un portazo, se abrió la puerta del carromato. 
Todos se volvieron a mirar, todos lo olían. Acababa de entrar El Que Asó La Manteca.

           

13. Los últimos serán los primeros (si yo quiero)

—Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo—me dijo sonriendo mientras me entregaba un avejentado y enorme mapamundi. Lo llevé a mi casa y lo fijé con chinchetas a la pared. Provocaba olas de calor acercando cerillas a Grecia o cualquier otra región dibujada a escala. Creaba la niebla exhalando el humo de un cigarrillo sobre San Francisco o el lugar que me placiera. Pero pronto todo esto me pareció muy predecible y aburrido. Decidí que algunos merecían mejor suerte; decidí que los Inuit merecían aprender a surfear, así que con un cutter recorté Alaska y la situé a la altura de Hawái. —¿Qué tal le iría a Trump en Níger? —me pregunté mientras recortaba la quinta avenida.

           

14. Desorden mundial

—Estamos cara a cara con el hombre que vendió el mundo, Ana Rosa, te escucha Arturo. — El reportero acercó el micrófono a un joven estudiante de informática.

Tres meses antes había creado por puro aburrimiento el CAOS (Criptomoneda Absoluta Opuesta al Sistema). Su éxito fue inmediato, la juventud sólo quería CAOS. Ayudado por la IA ideó un sistema de recompensas que adjudicaba montones de CAOS a quien publicara vídeos quemando billetes de curso legal. En un mes el CAOS era mayoritario en Amazon, Revolut, Bizum... En dos meses el mundo entero hacía todas sus transacciones con CAOS. El sistema bancario tradicional se hundió, se disolvió el Banco Mundial, desapareció el FMI. Hasta que ayer un avergonzado Arturo había reconocido en redes que en el desorden de su habitación no encontraba el disco duro que alojaba todos los CAOS del mundo, y que quizás lo había vendido en Wallapop por error.

—¡A que voy yo y lo encuentro! — amenazó indignada Ana Rosa.

           

15. Ojos azules pálidos

Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo y piensas en lo diferente que habría sido tu vida si hubieras seguido su camino. Ahora tiene arrugas, el pelo blanco y viste traje, pero sus ojos son del mismo azul pálido de entonces.

Ese segundo en el que cruzas tu mirada con la suya se hace una eternidad, y es como ver, al mismo tiempo, la película de tu vida real, junto con la que podrías haber tenido. Huyes aparentando tranquilidad, como si nada hubiera pasado o como si creyeras en el destino, pero él te ha reconocido. Eres también más vieja, pero sigues aferrada a tus ideas, y tus ojos son del mismo verde vivo que entonces.

Vendió el mundo para que nada cambiara, para que todo siga siendo del mismo gris, del que solo se escapan, muy de vez en cuando, fugaces destellos azules y verdes.


            

16. El nuevo mundo.

Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo y culo con culo con el hombre que quiere comprarlo, la transacción debería ser fácil, con una pequeña comisión para mí y mi jefe. Bueno, no tan pequeña.
Desde la resistencia teníamos otra idea, hacer de intermediarios en la venta y corromperlo todo para volverlo a inventar. El caos era necesario y secuestrar al vendedor y el comprador era la única solución.
Hay que dar la cara y poner el culo para cambiar la situación.

             

17. La guía del autista galáctico

“Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo.” Su espejo le devolvía ese gesto orgulloso, Fulgencio había encontrado, en sus largas horas de ordenador, un vacío legal. A pesar del papeleo, cogió y puso en el registro de la propiedad el mundo a su nombre. Nadie en la administración se fijó en la solicitud y pasó todos los trámites, surrealista, pero así fue. Más tarde, buceando por la Deep web, abrió una subasta por probar, pero llevó la broma hasta el final y no fueron pocas las razas alienígenas que pujaron. 

Y ahora, toda la Tierra va a ser desahuciada. Van a tirar todo abajo para crear un resort de lujo para los habitantes de un planeta muy lejano. El pobre Fulgencio tasó mal, y vendió por debajo de lo que podría haber sacado. Además, recibió el dinero en euros, moneda que ya no era válida para los extraterrestres. Tendría que buscar trabajo en los nuevos hoteles.


              

18. ¿Un buen trato?

-Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo- dijo Joel, sonriendo mientras pagaba su cortado.
-¿A quién se lo has vendido?
-A ese tipo trajeado. Me ha preguntado qué quería y qué le daría a cambio. Le he dicho que por mí se podía quedar con el mundo si me conseguía un Ferrari… ¡y mira las llaves!
La camarera se acercó a la mesa del hombre, con los brazos en jarras.
-¿Quién eres y qué crees que estás haciendo?
-Compro lo que otros no valoran y, como castigo, reciben lo que creen que desean. 
-Eso no es posible.
-Hagamos la prueba… ¿Qué pedirías?
Ella rio, echando la cabeza hacia atrás (si tú supieras…)
-Pues al revés, ¿qué me ofreces?
-Te invito a una cerveza, no tienes que darme nada.
-Eso no es un trato… Eres una persona peculiar, Helena, y, desde ahora, inexplicablemente afortunada…
En la calle se oyeron sirenas, un Ferrari acababa de estrellarse…


             

19. Examen de debate

- Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo.
- Estupendo, yo soy la mujer que lo compró. Quería hablar de la garantía.
- ¿Garantía? No había garantía. Se firmó ante Notario.
- Ya, pero yo soy consumidora final y la ley me ampara. Quiero resolver la compraventa por vicios ocultos. 
- Ni hablar. Los vicios no eran ocultos.
- Pues no te pago los plazos.
- Pues te demando.
- Pues los tribunales son míos, van con el mundo, y van a decir que tengo razón.
- Pues resolvemos y te demando yo, y los tribunales me darán la razón, porque seran míos.
- Pues te follo.
- Ah, pues guay.
- ¡Basta ya! ¡Suspenso! ¡Los dos! ¡A mi despacho!
- ¡Usted lo que quiere es un trío!
-....

             

UN DÍA UN RODABALLO:

Y ya es jueves!!!  

Me gusta, sí, señor, me gusta...

Porque los días festivos también son productivos, ahí va el primero de la ronda  

1. Macías y Facal

-Está hablando cara a cara con el hombre que vendió el mundo.
Macías se retrepó en su sillón por toda respuesta, mientras dejaba vagar su vista un instantes hacia unas amenazadores nubes oscuras que habían ocupado casi todo el hueco de la ventana.
El silencio no consiguió que Emiliano Facal prosiguiese con más revelaciones, por lo que Macías juzgó adecuado intervenir.
-Señor Facal, eso que usted me dice es extraordinario. Mire, por curiosidad, ¿le pidieron factura?, ¿tuvo que incluir el IVA? hizo las preguntas un poco al tuntún, por dar continuidad al diálogo, mientras venía a su mente la certeza de que no se había traído un paraguas.
Facal se quitó lentamente las gafas y fijó sus ojos en los de su interlocutor durante unos segundos.
Finalmente preguntó:
-¿Se encuentra usted bien?
En ese momento la enfermera Montes, sin llamar, como siempre, entró en el cuarto y reclamó a Facal para una analítica. El doctor Macías dio por finalizada la entrevista.

LeChaperonRouge escribió:Porque los días festivos también son productivos, ahí va el primero de la ronda  

1. Macías y Facal

-Está hablando cara a cara con el hombre que vendió el mundo.
Macías se retrepó en su sillón por toda respuesta, mientras dejaba vagar su vista un instantes hacia unas amenazadores nubes oscuras que habían ocupado casi todo el hueco de la ventana.
El silencio no consiguió que Emiliano Facal prosiguiese con más revelaciones, por lo que Macías juzgó adecuado intervenir.
-Señor Facal, eso que usted me dice es extraordinario. Mire, por curiosidad, ¿le pidieron factura?, ¿tuvo que incluir el IVA? hizo las preguntas un poco al tuntún, por dar continuidad al diálogo, mientras venía a su mente la certeza de que no se había traído un paraguas.
Facal se quitó lentamente las gafas y fijó sus ojos en los de su interlocutor durante unos segundos.
Finalmente preguntó:
-¿Se encuentra usted bien?
En ese momento la enfermera Montes, sin llamar, como siempre, entró en el cuarto y reclamó a Facal para una analítica. El doctor Macías dio por finalizada la entrevista.

Curioso relato, al final la locura es totalmente subjetiva... ¿Quiénes son los locos? Por si no lo sabíais, Homme es un gran fan de los vulgarmente conocidos como chalados... Esto empieza muy bien, pero que muy bien... Seguimos siendo lo mejor del foro, mucho más ahora y bien lejos de tópics venenosos y frustraciones enquistadas...

Me flipa “The Man Who Sold The World”. Contiene mi canción favorita de Bowie…

Aprovecharemos esta semana para recuperar a Bowie...

Una de Masterchef celebrity tuvo un hijo y lo llamó Pepe Bowie.

Me surge una duda entre "vender el mundo", que para mí tiene un carácter positivo, o más positivo si cabe que "vender al mundo".

Podríamos cambiar ese "el" por el "al" sugerido?

Gracias.

Yo no permitiría cambios a las frases cuando ya hay relatos publicados...

Todos debemos partir del mismo origen, esa es la gracia...

Las modificaciones permitidas ya están fijadas. Sorry Nuxe, toca vender el mundo.

Hank escribió:Yo no permitiría cambios a las frases cuando ya hay relatos publicados...

Todos debemos partir del mismo origen, esa es la gracia...

Coño, pero si es que tú partes siempre mucho antes   (y mira que también yo suelo ser de gatillo fácil).

LeChaperonRouge escribió:Las modificaciones permitidas ya están fijadas. Sorry Nuxe, toca vender el mundo.

Acato como no puede ser de otra manera la decisión de la soberana y rodaballa administración.

Se hará lo que se pudo.

Nuxe escribió:

LeChaperonRouge escribió:Las modificaciones permitidas ya están fijadas. Sorry Nuxe, toca vender el mundo.

Acato como no puede ser de otra manera la decisión de la soberana y rodaballa administración.

Se hará lo que se pudo.

Seguro te sale algo chulo igualmente

Ayer Montenegro puso SU gif

Esmeralda escribió:Ayer Montenegro puso SU gif

Sólo un minuto, para los que estaban atentos.

Pocos lo vieron, y por suerte nadie hizo quote.

Viviendo al límite

Nuxe escribió:

Hank escribió:Yo no permitiría cambios a las frases cuando ya hay relatos publicados...

Todos debemos partir del mismo origen, esa es la gracia...

Coño, pero si es que tú partes siempre mucho antes   (y mira que también yo suelo ser de gatillo fácil).

yo eyaculador precoz, así me va..

por cierto, esto se publica hoy... al final de vuelta mis queridos Nachtmystium...

Ronda de vendedores. Voy a tener que tener cuidado de no ganar. Puedo escribir sobre tantas historias sobre gente feliz de gastarse tres mil pelotes en una Biblia…

Se me olvidó darle las gracias a Nomeko por el Julián Contreras. 


Sienta bien ganar, hacia mucho que no ganaba nada por estos lares (y por ninguno).

y vamos con el segundo del día...

2. Conquistador

Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo. Te mira impasible conociendo su poder. Eres poco más que una partícula a punto de ser desterrada de la morada de los diez mil pueblos. Diez mil pueblos de diez mil familias que vivieron durante centurias antes de la gran lluvia. El cielo se oscurece antes de la última precipitación. Estás desnudo, desamparado, perdido antes de sucumbir a un ineludible destino. Se ha extinguido tu raza, tu sangre, y a punto están de desaparecer tus recuerdos. Putruk, el hombre que vendió el mundo, alarga su mano para tomar la tuya. Pero ignora tu última apuesta, ignora que eres Marduk, perpetuo Dios de las tormentas. Llueve a mares, inundando el mundo hasta sus últimas consecuencias. Sin tiempo a reaccionar, libera Putruk esa inmensa esfera de tierras y océanos, justo a tiempo para que tú, Marduk, rey de reyes, le regales la primera de tus carcajadas.

Hank escribió:

Nuxe escribió:

Hank escribió:Yo no permitiría cambios a las frases cuando ya hay relatos publicados...

Todos debemos partir del mismo origen, esa es la gracia...

Coño, pero si es que tú partes siempre mucho antes   (y mira que también yo suelo ser de gatillo fácil).

yo eyaculador precoz, así me va..

por cierto, esto se publica hoy... al final de vuelta mis queridos Nachtmystium...

No eres eyaculador precoz, sino que te gustan mucho las mujeres. Los heteros puros se caracterizan por no saber contener su pasión.

¡Ay en cambio los que aguantan mucho!

Por supuesto, me han empezado a salir mogollón de cosas en las redes sociales relacionadas con el rodaballo. Comparto está receta. 

salakov escribió:

Hank escribió:

Nuxe escribió:

Hank escribió:Yo no permitiría cambios a las frases cuando ya hay relatos publicados...

Todos debemos partir del mismo origen, esa es la gracia...

Coño, pero si es que tú partes siempre mucho antes   (y mira que también yo suelo ser de gatillo fácil).

yo eyaculador precoz, así me va..

por cierto, esto se publica hoy... al final de vuelta mis queridos Nachtmystium...

No eres eyaculador precoz, sino que te gustan mucho las mujeres. Los heteros puros se caracterizan por no saber contener su pasión.

¡Ay en cambio los que aguantan mucho!

Sí, claro. Las mujeres pueden tomarlo como un halago. Venga, hombre.

Decía el sargento Arensivia: Qué macho soy que mi corro enseguida.

Zzzz escribió:Decía el sargento Arensivia: Qué macho soy que mi corro enseguida.

  

salakov escribió:

Hank escribió:

Nuxe escribió:

Hank escribió:Yo no permitiría cambios a las frases cuando ya hay relatos publicados...

Todos debemos partir del mismo origen, esa es la gracia...

Coño, pero si es que tú partes siempre mucho antes   (y mira que también yo suelo ser de gatillo fácil).

yo eyaculador precoz, así me va..

por cierto, esto se publica hoy... al final de vuelta mis queridos Nachtmystium...

No eres eyaculador precoz, sino que te gustan mucho las mujeres. Los heteros puros se caracterizan por no saber contener su pasión.

¡Ay en cambio los que aguantan mucho!

Pues seré hetero puro... Las mujeres son adorables, de hecho, lo son casi todo... Con respecto a lo aguantar, pues no me gusta enviar tarde...

Los miercoleros… ellos deberían ofrecer explicaciones.

salakov escribió:Los miercoleros… ellos deberían ofrecer explicaciones.

No lo sé, pero estoy seguro que alguno de ellos envía siempre tarde por capricho... Nadie marca mis ritmos más que yo mismo, si corro es porque yo lo decidí... No vivo a merced de nadie...

Nomeko7 escribió:Por supuesto, me han empezado a salir mogollón de cosas en las redes sociales relacionadas con el rodaballo. Comparto está receta. 

https://x.com/messedupfoods/status/1852122629542412480?t=pn2QlBi5KVU1eZmGRrBkWg&s=19

Rodaballo come huevo 🤍

Hank escribió:

salakov escribió:Los miercoleros… ellos deberían ofrecer explicaciones.

No lo sé, pero estoy seguro que alguno de ellos envía siempre tarde por capricho... Nadie marca mis ritmos más que yo mismo, si corro es porque yo lo decidí... No vivo a merced de nadie...

"No lo sé, pero estoy seguro que..." es un gran principio, es la esencia del forero experto multidisciplinar  

Por supuesto cada uno marca sus ritmos (sobre todo m Señor   ), pero son todos válidos si entran en plazo.

Yo cuando soy miercolero suele ser por distintas causas:

- No haber tenido una idea aceptable durante los cinco días anteriores.

-No conseguir que mi idea se entienda suficientemente, y seguir intentando redondear alguna frase hasta el último día, que caigo agotado y desisto.

-Tener un relato aceptable, pero con 186 palabras, y no tener habilidad en la poda, sufriendo cada vez que elimino un sintagma. Bajo las teclas de mi teclado se acumulan mares de lágrimas.

-Trabajar sobre dos ideas y no decidirme hasta el último día sobre cuál me satisface más, soy padre de hijo único por algo.

-No vivir a merced de nadie.


En ninguno de los casos el motivo fue "por tocar lo huevos", pero ahora tengo curiosidad por saber qué se siente.    

Es raro que mande un viernes o un sábado, sólo ocurre cuando me surge una idea que me gusta mucho y pienso que alguien me la va a pisar. Lo normal es que vaya rumiando varias ideas hasta que el lunes o el martes ya decido por donde tirar. Pero es que aunque se me ocurra algo que creo buenísimo si pienso que nadie me lo va a pisar no escribo rápido porque si no, me quedo sin entretenimiento mental el resto de semana.

El vacío de una semana entera sin darle al magín se me hace largo.

Zzzz escribió:Es raro que mande un viernes o un sábado, sólo ocurre cuando me surge una idea que me gusta mucho y pienso que alguien me la va a pisar. Lo normal es que vaya rumiando varias ideas hasta que el lunes o el martes ya decido por donde tirar. Pero es que aunque se me ocurra algo que creo buenísimo si pienso que nadie me lo va a pisar no escribo rápido porque si no, me quedo sin entretenimiento mental el resto de semana.

El vacío de una semana entera sin darle al magín se me hace largo.

Flechitas a todo.

Eduardo Montenegro escribió:

Hank escribió:

salakov escribió:Los miercoleros… ellos deberían ofrecer explicaciones.

No lo sé, pero estoy seguro que alguno de ellos envía siempre tarde por capricho... Nadie marca mis ritmos más que yo mismo, si corro es porque yo lo decidí... No vivo a merced de nadie...

"No lo sé, pero estoy seguro que..." es un gran principio, es la esencia del forero experto multidisciplinar  

Por supuesto cada uno marca sus ritmos (sobre todo m Señor   ), pero son todos válidos si entran en plazo.

Yo cuando soy miercolero suele ser por distintas causas:

- No haber tenido una idea aceptable durante los cinco días anteriores.

-No conseguir que mi idea se entienda suficientemente, y seguir intentando redondear alguna frase hasta el último día, que caigo agotado y desisto.

-Tener un relato aceptable, pero con 186 palabras, y no tener habilidad en la poda, sufriendo cada vez que elimino un sintagma. Bajo las teclas de mi teclado se acumulan mares de lágrimas.

-Trabajar sobre dos ideas y no decidirme hasta el último día sobre cuál me satisface más, soy padre de hijo único por algo.

-No vivir a merced de nadie.


En ninguno de los casos el motivo fue "por tocar lo huevos", pero ahora tengo curiosidad por saber qué se siente.    

Después de leerte me he tenido que sentar, yo soy de los que se quita cosas de en medio lo más rápido que puedo...

Sólo mandé micro un viernes una vez que me quedé sin llaves y me entretuve con eso hasta que llegó el portero.

Una vez mandé un micro un viernes y luego se me ocurrió una idea buenísima.

Nunca mais

salakov escribió:Me flipa “The Man Who Sold The World”. Contiene mi canción favorita de Bowie…

After All.

Una canción enfermiza. Heredera y precursora a la vez. Interesante elección en un disco con canciones mucho más potentes como la que da título al disco, la que lo abre y la que lo cierra.
Ah, coño, dices además favorita de Bowie, no del disco.

En ese caso, lo siento. No soy psiquiatra, no puedo ayudarte.

Y nos llega el tercer relatazo de la semana...

3. Bowie

Estás cara a cara con el hombre que vendió el mundo. En circunstancias normales esto no debería ser ni siquiera reseñable, pero éstas no lo son: estás muerto.
Por más que lo niegues, lo estás.
Estas escaleras donde nos encontramos me hacen pensar si estamos aquí en realidad. Pensé en ti y te imaginé dormido, pero no. Tras morir he conseguido ver lo que antes no podía. Solo en mi sonambulismo era capaz de ver más allá de lo que alcanzaban mis ojos.
No quise darme importancia con ese título, todos saben que Metrobolist era el nombre elegido y que fue un encuentro casual con la última canción la que me llevó a vender el mundo.
No solo vendí el mundo, sino que vine de otro mundo en forma de polvo estelar para poder ser un héroe.
Un héroe que terminó en polvo de estrella, de una estrella negra.

¿Qué ha pasado con "Un día, un rodaballo?

Ya ha salido un micro de Bowie, qué menos.

Mi favorita de Bowie, de mi álbum favorito de Bowie, que a su vez es uno de mis álbumes favoritos de siempre. ¿Qué tal ando yo de lo mío, mugu?

Zzzz escribió:Ya ha salido un micro de Bowie, qué menos.

Mi favorita de Bowie, de mi álbum favorito de Bowie, que a su vez es uno de mis álbumes favoritos de siempre. ¿Qué tal ando yo de lo mío, mugu?

Renunció al papel de validador de gustos. Lo de Salakas se salía de los carriles normales, por eso lo mencioné. Lo tuyo no puede ser más convencional, así que poca mención merece. Ser normal no puntúa, amigo zetas

Te dice convencional por no decirte vulgar.

Mi segunda canción prefer de Bowie es “Ashes to ashes”.

Mi tema preferido del Duque Blanco es compartido

Eduardo Montenegro escribió:¿Qué ha pasado con "Un día, un rodaballo?

Tenemos el bonito rodaballo anaranjado del sábado. Precioso espécimen Scophthalmus maximus.

salakov escribió:Te dice convencional por no decirte vulgar.

Mi segunda canción prefer de Bowie es “Ashes to ashes”.

Esnobismo ilustrado no elegir sus mejores canciones por ser original.

Como preferir el chopped al cinco jotas porque lo fácil es que te guste lo segundo.