Tonterías que habéis hecho de pequeños

¿Alguien tenía a bien en los cursos finales de la EGB pillarse unos ciegos gloriosos metiéndose un edding 500 en la tocha?

Vaya colocones que nos agarrabamos en la parte de atras mientras nos pasaban diapositivas de monumentos en sociales.

Yo no sé como no acabamos hechos unos Dumbies de la vida.

crancranc escribió:

loaded escribió:

crancranc escribió:Hay anécdotas muy buenas y siento que estoy ensuciando el tópic.

En mi colegio, aparte de subir palmeras, otro de los entretenimientos habituales era tirar piedras.

En una de ésas, jugamos a "A ver quién tira la piedra más lejos". Como había mucha gente en el patio, un servidor no quería darle a nadie y propuso, muy astutamente, tirar la piedra hacia arriba. Por suerte era un renacuajo y calculo que no llegaría muy alto, pero casi le saco un ojo a un pobre chaval que pasaba por allí... 

En la ikas había uno de "los mayores" (de trece o catorce años) que se divertía tirándonos piedras a los pequeños. Un pieza de cuidado.

Hace poco me vendió, amabilísimamente, un artículo en El Corte Inglés. Después de pagar me identifiqué y le recordé sus hazañas     

El tiempo (parece que) reforma a grandísimos hijos de puta  

Hablas del amigo de Loaded o de Loaded?

Aquí tiran con posta.

Jijiji.

Eloy escribió:

pinkpanther escribió:A día de hoy todavía nos preguntamos como reconocio las salchichas

   

estoy llorando jajajaja

javi clemente escribió:

Eloy escribió:

pinkpanther escribió:A día de hoy todavía nos preguntamos como reconocio las salchichas

   

estoy llorando jajajaja

               

Joder, pantera.

Lo de meterse en casas ajenas lo hacían bastante amigos míos en invierno, en el pueblo en que hemos veraneado siempre.

Sois la repolla.

Yo fuera de birlar ropa interior de los tenderetes, carreras en containers, meternos con el coche por un campo de golf haciendo trompos, fui poco gamberro. Y estas cosas las hice ya víctima del alcohol.

Así de peque, pues psicofonías en cementerios, bromas telefónicas y poco más.

elway escribió:Sois la repolla.

Yo fuera de birlar ropa interior de los tenderetes, carreras en containers, meternos con el coche por un campo de golf haciendo trompos, fui poco gamberro. Y estas cosas las hice ya víctima del alcohol.

A

Te parecerá poco   

Una verdadera tontería que solíamos hacer, pero con la que nos echábamos buenas risas, era llevar una bocina o un saco de la risa a clase, concretamente a clase de lengua castellana, cuya profesora era más inocente que un cucurucho. Total, que cuando, por ejemplo, terminaba de explicar algo nos poníamos a aplaudir como descosidos y, disimuladamente, a dar bocinazos como si estuviéramos en San Mamés. Y cuando la clase estaba en completo silencio (extraño y sospechoso), le dábamos al saco de la risa.

Era una chorrada, pero yo me moría. Joder, me estoy acordando ahora y me meo: la tía acaba de analizar una oración, dice algo así como "entonces la frase es una oración subordinada sustantiva de complemento directo" y, de repente, todo cristo empieza a aplaudir y se oye "mec-mec-mec-mec-mec".

     

loaded escribió:

elway escribió:Sois la repolla.

Yo fuera de birlar ropa interior de los tenderetes, carreras en containers, meternos con el coche por un campo de golf haciendo trompos, fui poco gamberro. Y estas cosas las hice ya víctima del alcohol.

A

Te parecerá poco   

Una verdadera tontería que solíamos hacer, pero con la que nos echábamos buenas risas, era llevar una bocina o un saco de la risa a clase, concretamente a clase de lengua castellana, cuya profesora era más inocente que un cucurucho. Total, que cuando, por ejemplo, terminaba de explicar algo nos poníamos a aplaudir como descosidos y, disimuladamente, a dar bocinazos como si estuviéramos en San Mamés. Y cuando la clase estaba en completo silencio (extraño y sospechoso), le dábamos al saco de la risa.

Era una chorrada, pero yo me moría. Joder, me estoy acordando ahora y me meo: la tía acaba de analizar una oración, dice algo así como "entonces la frase es una oración subordinada sustantiva de complemento directo" y, de repente, todo cristo empieza a aplaudir y se oye "mec-mec-mec-mec-mec".

     

 

Necesito que se aclare la historia de las salchichas

Cada vez que sintáis rabia o envidia por los dos meses de vacaciones que tienen los profesores de primaria y secundaria, recordad las cosas por las que les hicimos pasar.

Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

En el fragor de la batalla no nos damos cuenta pero con tonteridas como esta se le puede traumatizar a alguienvy facilmente joderle la vida

scabbed wings escribió:

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

En el fragor de la batalla no nos damos cuenta pero con tonteridas como esta se le puede traumatizar a alguienvy facilmente joderle la vida

Seguramente, y viéndolo ahora son barbaridades. Pero es que el patio es como la carcel, y a los chivatos se los quiere igual. En mi instituto había uno del que era más o menos colega y que normalmente defendía porque era un chivatazo y siempre le querían pulir unos u otros, pero como en EGB había ido con él, pues me pasaba el día sacando la cara para evitar que le dieran candela. Un día que se la buscó el solito y yo ya estaba cansado de discutir y hasta pegarme por un imbécil, les dejé hacer a los que querían venganza.

Pues resulta que el tío fue corriendo a su madre y al director, y al día siguiente llaman al despacho a los que le habían estado dando collejas y ensuciándole con tiza el jersey, y resulta que estoy yo entre ellos. No nos pasó absolutamente nada, pero a partir de ese día dejé de hablarle y defenderle y eso sí que debió ser un infierno para él. Me dio igual, hay que ser hijodeputa miserable. Al año siguente le mandaron a un internado, no se si para evitar problemas o por merluzo, que lo era un rato. Hoy sigue siendo un tipo de lo más extraño, sigue en el pueblo pero debe llevar muchos años sin salir de casa para hacer vida social.

Stoneheart escribió:Cada vez que sintáis rabia o envidia por los dos meses de vacaciones que tienen los profesores de primaria y secundaria, recordad las cosas por las que les hicimos pasar.

Totalmente.

El cielo se merecen.

Yo siempre he tenido mucha vocación docente, y sólo me ha echado p'atrás la posibilidad de toparme con gentuza como la de nuestra clase. En nuestro caso, además, se daba la jodida coincidencia (para el profesorado) de que encima, salvo dos o así, sacábamos por lo general bastante buenas notas, o sea que no había por dónde cogernos.

De hecho, estas trastadas que os voy contando muchas veces se nos ocurrían (aunque no fuéramos el brazo ejecutor) a un amigo y a mí, y los dos éramos los empollones gafotas de clase.

Gora Rock escribió:

Godofredo escribió:En mi pueblo también teníamos todo tipo de variantes para juegos consistentes en meternos de hostias... el club de los guarros (soltábamos una pelota y aquel que tuviera la posesión o lo pareciera era objeto de todo tipo de patadas a la tibia), mosca (una variante del túnel, a veces la cosa acababa bastante heavy), el puching-ball salvaje (lo mismo que el puching-ball pero intentando hostiar a los de al lado lo que se pudiera, en el jeto puntuaba más)... y las que no me acuerdo, porque era todo el día así. Jugando y sin jugar. En 7º-8º de EGB creo que me pegaba unas 10 veces al mes. La percha los palos, me llamaba mi padre.

El juego del cinturón. Esconder un cinturón y el que lo encontraba le pegaba de hostias a los demás hasta que llegaran al punto designado.

A eso jugábamos nosotros. Solo se podía pegar de cintura para abajo, el que pegaba de cintura para arriba iba al paredón, o sea, pasillo de hostias.

La mayor tontería fue querer crecer.

yo lo que estoy sacando en claro es que potencialmente la mayoría somos unos delincuentes y que por circunstancias de la vida no hemos acabado en el trullo unos cuantos    

scabbed wings escribió:

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

En el fragor de la batalla no nos damos cuenta pero con tonteridas como esta se le puede traumatizar a alguienvy facilmente joderle la vida

Eso es cierto.

Hombre, lo que cuenta Riki, por fortuna, parece ser algo puntual que se hizo a ese chico. A todos nos han puteado alguna vez por una cosa o por otra, pero el puteo continuo es muy, muy jodido y, como dices, en muchos casos traumatiza.

Dos de mis mejores amigos, de los de la ikastola de toda la vida, de críos era unos auténticos cabronazos. Uno de ellos se ensañaba particularmente con un repetidor de mi clase, más bueno que el pan, que tenía un problema serio con el tartamudeo (en la actualidad muy corregido) y, al ser hijo de típica familia sabiniana, era tremendamente beatón.

El nivel de puteo al que sometió a este chico a cuenta de esos dos aspectos (religiosidad y tartamudeo) fue terrible. Pero peores éramos otros que, o bien no éramos conscientes de aquel abuso, o bien lo éramos y pasábamos de hacer nada para no desviarnos del rebaño.

Hoy en día el chaval tartamudo es un encanto de tío y, a veces, suelo correr con él porque prepara maratones y tal, me tiene en mucha estima con lo que entiendo que no me considera cómplice por omisión del puteo al que le sometieron. Y lo cojonudo es que hace poco nos encontramos con él en el Casco Viejo mi amigo el que tanto le puteó y yo, y estuvieron los dos hablando muy animadamente durante mucho rato; cuando se fue, mi amigo me dijo "es increíble que este tío me siga hablando".

Y por cierto, este amigo cabrón es un auténtico pedazo de pan hoy en día.

javi clemente escribió:

Eloy escribió:

pinkpanther escribió:A día de hoy todavía nos preguntamos como reconocio las salchichas

   

estoy llorando jajajaja

     

Tenían que ser de importación porque sino yo tampoco me lo explico   
R.Y

scabbed wings escribió:

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

En el fragor de la batalla no nos damos cuenta pero con tonteridas como esta se le puede traumatizar a alguienvy facilmente joderle la vida

Yo era más inocente que un cubo. Pero como estaba bastante fuerte no se metía nadie conmigo. Hasta que llegué al instituto... me apunté a uno para ir con mis amigos... y a ellos les tocó por la mañana y a mi por la tarde.Donde no conocía a nadie. Fui objeto de decenas de bromas, que fueron subiendo de intensidad ante mi falta de respuesta. Lapos dentro de los libros, me metían mierda en dentro de la mochila, se reían de cualquier comentario que hiciera constantemente...

Por suerte soy un tipo con memoria. Y ese verano se juntó la marginación con descubrir a la polla records.

Os aseguro que todos y cada uno de esos hijosdeputa tuvieron ciertos problemas estomacales para acabar el instituto.

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

Jajajajaja joder Riki santo dios... y rematas diciendo ahora es un buen tipo    Pero alguna vez fué malo?

Esa última frase me deja más tranquilo por cierto    
R.Y

De todas formas, me acuerdo de una muy buena del compañero de clase tartamudo. A veces la venganza se presenta en ocasiones inesperadas:

Otra jauría de cazurros se solía formar en el vestuario de tíos cuando acabábamos las clases de gimnasia. Supongo que en todos había los mismos personajes: el que iba de Rocco porque se había desarrollado antes, el gordo, el vergonzoso, etc.

Total, que un par de clase que se subieron al carro de intentar putear a este chaval le llamaron "cura" cuando nos estábamos cambiando, y éste les respondió riéndose y diciéndoles "igual soy cura, pero por lo menos no tengo el pito pequeño como vosotros"     

Hostia! lo de encerrar a un fulano en un contenedor y tirarlo cuesta abajo mientras le explotan dentro petardos no la hize pero estuve presente cuando se la hicieron a un compi.. pobre hombre joder.. el rollo es que era un cruce bastante peligroso y no se mato de milagro..

Rockin' Yakuza escribió:

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

Jajajajaja joder Riki santo dios...  y rematas diciendo ahora es un buen tipo    Pero alguna vez fué malo?

Esa última frase me deja más tranquilo por cierto    
R.Y

  
Por aquellas se hacía la asociación chivato=malo

Maniac escribió:

scabbed wings escribió:

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

En el fragor de la batalla no nos damos cuenta pero con tonteridas como esta se le puede traumatizar a alguienvy facilmente joderle la vida

Yo era más inocente que un cubo. Pero como estaba bastante fuerte no se metía nadie conmigo. Hasta que llegué al instituto... me apunté a uno para ir con mis amigos... y a ellos les tocó por la mañana y a mi por la tarde.Donde no conocía a nadie. Fui objeto de decenas de bromas, que fueron subiendo de intensidad ante mi falta de respuesta.  Lapos dentro de los libros, me metían mierda en dentro de la mochila, se reían de cualquier comentario que hiciera constantemente...  

Por suerte soy un tipo con memoria. Y ese verano se juntó la marginación con descubrir a la polla records.  

Os aseguro que todos y cada uno de esos hijosdeputa tuvieron ciertos problemas estomacales para acabar el instituto.

Yo en cambio era (soy) un tipo digamos poco atlético pero como mi hermano mayor iba tres cursos por delante y él si que era un delicuente y además éramos jevis pues nuestro apellido era una institución en mi cole. Con lo cual los más bandarras me respetaban bastante. De hecho era colega de gente que luego me contaron que fueron bastante delicuentes. Yo en cambio de canijo siempre supe dónde estaba la raya que no debía traspasar para ser un sátrapa.

loaded escribió:

DUMBHEAD escribió:

calamardo escribió:

Godofredo escribió:Ah coño, y una de las peores.
Una profesora se dejó un seiscientos o un 127 una semana aparcado en la puerta del colegio. Un sábado estábamos por allí para jugar al fútbol y allí estaba el coche, que lo habían abierto los de otro curso. Nos montamos y nos dedicamos a dar pirulas empujando y uno conduciendo... hasta que se nos fue de las manos y el coche acabó estrellado en un muro. Tampoco fue demasiado (aquellos coches eran muy duros) pero faros y frontal a tomar por culo. Salimos pitando y menos mal que no nos pillaron, que nos echan. Buenos eran los maristas.

Unos colegas también se ciscaron un supermirafiori del abuelo de uno, pero esta vez conduciendo de verdad, que estaba la llave y pudieron arrancarlo. Quedó de desguace.

de mas pequeño, tendria unos 8 años, jugábamos a (no recuerdo el nombre), pero era dibujar en terreno de tierra unos cuadros con números y cada cuadro clavar un destornillador..si se clavaba seguías, sino, perdías. Dad un destornillador a unos niños de 8 años....de ahi pasaba de todo menos bueno (cristales rotos, casi se clava uno el destornillador en el pie cual jesucristo...)...que recuerdos....era la época que se puso de moda el break dance (seria año 84-85) y claro, todo el mundo iba vestido de payaso con sus bambotas breakdancer Yumas o Paredes (las nike jordan eran de ricachones) y los cordones de colorines...

al Dolar!

valencianot, principios de los noventa ajajaja

Aquí se llamaba hinque.

A eso también jugaba yo, en mi barrio le llamábamos el chu.
Y podía ser muy peligroso como dice calamar según con quién jugaras.

Recuerdo ahora una que se queda en chiquillada de parvulario comparada con la de los maestros Loaded y Maniac.  Había un coche abandonado en la calle completamente reventado y encontramos una bujía rota, uno de los mayores dijo ''si coges ese trozo de bujía y se lo tiras a un cristal con fuerza estalla en mil pedazos",  ''qué va..'' dije yo, otro dijo que también era imposible.
Me dijo el mayor entonces ''prueba con la ventanilla de ese coche" (nuevo) y dije ''vale'', lancé con todas mis fuerzas y el cristal estalló en cientos de pedacitos. Joder que manera de correr todos!! Recuerdo que me pasé varios días acojonado y nervioso por si alguien nos había visto y llegaba a oídos de mis padres     
R.Y

loaded escribió:

elway escribió:Sois la repolla.

Yo fuera de birlar ropa interior de los tenderetes, carreras en containers, meternos con el coche por un campo de golf haciendo trompos, fui poco gamberro. Y estas cosas las hice ya víctima del alcohol.

A

Te parecerá poco   

Una verdadera tontería que solíamos hacer, pero con la que nos echábamos buenas risas, era llevar una bocina o un saco de la risa a clase, concretamente a clase de lengua castellana, cuya profesora era más inocente que un cucurucho. Total, que cuando, por ejemplo, terminaba de explicar algo nos poníamos a aplaudir como descosidos y, disimuladamente, a dar bocinazos como si estuviéramos en San Mamés. Y cuando la clase estaba en completo silencio (extraño y sospechoso), le dábamos al saco de la risa.

Era una chorrada, pero yo me moría. Joder, me estoy acordando ahora y me meo: la tía acaba de analizar una oración, dice algo así como "entonces la frase es una oración subordinada sustantiva de complemento directo" y, de repente, todo cristo empieza a aplaudir y se oye "mec-mec-mec-mec-mec".

     

Nosotros cuando el profe se daba la vuelta levantábamos una revista porno (normalmente una Private, cuántas mentes adolescentes no ha pevertido y perturbado esta revista....) y toda la clase hacía la ola    
R.Y

Rockin' Yakuza escribió:

loaded escribió:

elway escribió:Sois la repolla.

Yo fuera de birlar ropa interior de los tenderetes, carreras en containers, meternos con el coche por un campo de golf haciendo trompos, fui poco gamberro. Y estas cosas las hice ya víctima del alcohol.

A

Te parecerá poco   

Una verdadera tontería que solíamos hacer, pero con la que nos echábamos buenas risas, era llevar una bocina o un saco de la risa a clase, concretamente a clase de lengua castellana, cuya profesora era más inocente que un cucurucho. Total, que cuando, por ejemplo, terminaba de explicar algo nos poníamos a aplaudir como descosidos y, disimuladamente, a dar bocinazos como si estuviéramos en San Mamés. Y cuando la clase estaba en completo silencio (extraño y sospechoso), le dábamos al saco de la risa.

Era una chorrada, pero yo me moría. Joder, me estoy acordando ahora y me meo: la tía acaba de analizar una oración, dice algo así como "entonces la frase es una oración subordinada sustantiva de complemento directo" y, de repente, todo cristo empieza a aplaudir y se oye "mec-mec-mec-mec-mec".

     

Nosotros cuando el profe se daba la vuelta levantábamos una revista porno (normalmente una Private, cuántas mentes adolescentes no ha pevertido y perturbado esta revista....) y toda la clase hacía la ola    
R.Y

A mí una que me hicieron mientras resolvía un problema de mate en la pizarra fue mostrar al profesor y a toda la clase el poster de Samantha Fox que guardaba como oro en paño en la carpeta.

Imaginaos el descojono general, incluido el profesor. No me eché a llorar de milagro.

Maniac escribió:

Os aseguro que todos y cada uno de esos hijosdeputa tuvieron ciertos problemas estomacales para acabar el instituto.

Tío, eres el que más attitude tiene de todos los de por aquí. De lejos.

Jaja, me he acordado de otra que me hicieron mis amigos, para que veáis que esto era guerra sin cuartel: mientras meaba en un baño portátil de esos en fiestas de Bermeo, con el pedal, le dieron la vuelta y lo pusieron contra la pared, de forma que no podía salir, y se largaron a un bar.

Me sacaron unos lugareños al cabo de cinco minutos (no veáis el pestazo del baño), que me miraban con cara de "pobre chaval".

y nadie chorizaba revista guarras en el kiosko?? fui yo el único??...también recuerdo lo de comprar pitis sueltos. A 5 pelas el pitillo..ahora el kioskero si hace eso iría directamente a prisión...

Steve Trumbo escribió:yo lo que estoy sacando en claro es que potencialmente la mayoría somos unos delincuentes y que por circunstancias de la vida no hemos acabado en el trullo unos cuantos    

o'tuerto escribió:La mayor tontería fue querer crecer.

   pero muy cierto.
R.Y

loaded escribió:

Rockin' Yakuza escribió:

loaded escribió:

elway escribió:Sois la repolla.

Yo fuera de birlar ropa interior de los tenderetes, carreras en containers, meternos con el coche por un campo de golf haciendo trompos, fui poco gamberro. Y estas cosas las hice ya víctima del alcohol.

A

Te parecerá poco   

Una verdadera tontería que solíamos hacer, pero con la que nos echábamos buenas risas, era llevar una bocina o un saco de la risa a clase, concretamente a clase de lengua castellana, cuya profesora era más inocente que un cucurucho. Total, que cuando, por ejemplo, terminaba de explicar algo nos poníamos a aplaudir como descosidos y, disimuladamente, a dar bocinazos como si estuviéramos en San Mamés. Y cuando la clase estaba en completo silencio (extraño y sospechoso), le dábamos al saco de la risa.

Era una chorrada, pero yo me moría. Joder, me estoy acordando ahora y me meo: la tía acaba de analizar una oración, dice algo así como "entonces la frase es una oración subordinada sustantiva de complemento directo" y, de repente, todo cristo empieza a aplaudir y se oye "mec-mec-mec-mec-mec".

     

Nosotros cuando el profe se daba la vuelta levantábamos una revista porno (normalmente una Private, cuántas mentes adolescentes no ha pevertido y perturbado esta revista....) y toda la clase hacía la ola    
R.Y

A mí una que me hicieron mientras resolvía un problema de mate en la pizarra fue mostrar al profesor y a toda la clase el poster de Samantha Fox que guardaba como oro en paño en la carpeta.

Imaginaos el descojono general, incluido el profesor. No me eché a llorar de milagro.

Una vez entre clase y clase metimos varias revistas porno en el cajón de la mesa del profesor. Evidentemente esperamos a que fuese depués de la clase de un profesor y antes de la de una profesora.

Rockin' Yakuza escribió:

loaded escribió:

DUMBHEAD escribió:

calamardo escribió:

Godofredo escribió:Ah coño, y una de las peores.
Una profesora se dejó un seiscientos o un 127 una semana aparcado en la puerta del colegio. Un sábado estábamos por allí para jugar al fútbol y allí estaba el coche, que lo habían abierto los de otro curso. Nos montamos y nos dedicamos a dar pirulas empujando y uno conduciendo... hasta que se nos fue de las manos y el coche acabó estrellado en un muro. Tampoco fue demasiado (aquellos coches eran muy duros) pero faros y frontal a tomar por culo. Salimos pitando y menos mal que no nos pillaron, que nos echan. Buenos eran los maristas.

Unos colegas también se ciscaron un supermirafiori del abuelo de uno, pero esta vez conduciendo de verdad, que estaba la llave y pudieron arrancarlo. Quedó de desguace.

de mas pequeño, tendria unos 8 años, jugábamos a (no recuerdo el nombre), pero era dibujar en terreno de tierra unos cuadros con números y cada cuadro clavar un destornillador..si se clavaba seguías, sino, perdías. Dad un destornillador a unos niños de 8 años....de ahi pasaba de todo menos bueno (cristales rotos, casi se clava uno el destornillador en el pie cual jesucristo...)...que recuerdos....era la época que se puso de moda el break dance (seria año 84-85) y claro, todo el mundo iba vestido de payaso con sus bambotas breakdancer Yumas o Paredes (las nike jordan eran de ricachones) y los cordones de colorines...

al Dolar!

valencianot, principios de los noventa ajajaja

Aquí se llamaba hinque.

A eso también jugaba yo, en mi barrio le llamábamos el chu.
Y podía ser muy peligroso como dice calamar según con quién jugaras.

Recuerdo ahora una que se queda en chiquillada de parvulario comparada con la de los maestros Loaded y Maniac.  Había un coche abandonado en la calle completamente reventado y encontramos una bujía rota, uno de los mayores dijo ''si coges ese trozo de bujía y se lo tiras a un cristal con fuerza estalla en mil pedazos",  ''qué va..'' dije yo, otro dijo que también era imposible.
Me dijo el mayor entonces ''prueba con la ventanilla de ese coche" (nuevo) y dije ''vale'', lancé con todas mis fuerzas y el cristal estalló en cientos de pedacitos. Joder que manera de correr todos!! Recuerdo que me pasé varios días acojinadl y nervioso por si alguien nos había visto y llegaba a oídos de mis padres     
R.Y

A lo del destornillador también jugaba pero lo llamábamos la navaja y jugábamos con machetes. A mi hermano y a mí nos encantaban los machetes, teníamos varios y alguno de más de ocho dedos con sierra en un lado de la hoja. Teníamos machetes porque ibamos de campamento y ahí no estaba mal visto que un niño de ocho años llevase un machete que le llegaba casi a la rodilla.   

Eso sí sólo nos lo poníamos cuando ibamos de campamento en la ciudad no (aunque me consta que mi hermano alguna vez se llevó alguno al cole, no sé muy bien con qué intenciones, espero que sólo para fardar, preferí no saberlo nunca).

Steve Trumbo escribió:yo lo que estoy sacando en claro es que potencialmente la mayoría somos unos delincuentes y que por circunstancias de la vida no hemos acabado en el trullo unos cuantos    

Seguro que alguno lamenta no haber acabado ahí

Johnny Kashmir escribió:

Maniac escribió:

Os aseguro que todos y cada uno de esos hijosdeputa tuvieron ciertos problemas estomacales para acabar el instituto.

Tío, eres el que más attitude tiene de todos los de por aquí. De lejos.

Sea lo que sea, no tiene utilidad alguna. No sirve para nada. Y además, dura segundos. El resto es mediocridad y aburrimiento.     

Maniac escribió:

scabbed wings escribió:

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y  un churumbel creo

En el fragor de la batalla no nos damos cuenta pero con tonteridas como esta se le puede traumatizar a alguienvy facilmente joderle la vida

Yo era más inocente que un cubo. Pero como estaba bastante fuerte no se metía nadie conmigo. Hasta que llegué al instituto... me apunté a uno para ir con mis amigos... y a ellos les tocó por la mañana y a mi por la tarde.Donde no conocía a nadie. Fui objeto de decenas de bromas, que fueron subiendo de intensidad ante mi falta de respuesta.  Lapos dentro de los libros, me metían mierda en dentro de la mochila, se reían de cualquier comentario que hiciera constantemente...  

Por suerte soy un tipo con memoria. Y ese verano se juntó la marginación con descubrir a la polla records.  

Os aseguro que todos y cada uno de esos hijosdeputa tuvieron ciertos problemas estomacales para acabar el instituto.

La madre que me parió Maniac, tú eres un tío muy peligroso     
R.Y

Rikileaks escribió:

Steve Trumbo escribió:yo lo que estoy sacando en claro es que potencialmente la mayoría somos unos delincuentes y que por circunstancias de la vida no hemos acabado en el trullo unos cuantos    

Seguro que alguno lamenta no haber acabado ahí

En Orange is the new black, una de las guardias le dice a una presa... todos hemos cogido el camino equivocado alguna vez. La diferencia entre nosotras es que te pillaron a ti.

Si bien yo era un ensañandor de primera, sobre todo en lo psicológico, pronto me daba cosica ver sufrir al prójimo y paraba. De hecho alguna vez actué de freno en algún caso.
Tampoco he torturizado animalejos ni bichillos. No puteé nunca a profesores.
Un niño de perfil bajo, por lo que tampoco fui objeto de mofa y chanza ni agresión de otros niños.

Angus Glop escribió:

Maniac escribió:

scabbed wings escribió:

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

En el fragor de la batalla no nos damos cuenta pero con tonteridas como esta se le puede traumatizar a alguienvy facilmente joderle la vida

Yo era más inocente que un cubo. Pero como estaba bastante fuerte no se metía nadie conmigo. Hasta que llegué al instituto... me apunté a uno para ir con mis amigos... y a ellos les tocó por la mañana y a mi por la tarde.Donde no conocía a nadie. Fui objeto de decenas de bromas, que fueron subiendo de intensidad ante mi falta de respuesta.  Lapos dentro de los libros, me metían mierda en dentro de la mochila, se reían de cualquier comentario que hiciera constantemente...  

Por suerte soy un tipo con memoria. Y ese verano se juntó la marginación con descubrir a la polla records.  

Os aseguro que todos y cada uno de esos hijosdeputa tuvieron ciertos problemas estomacales para acabar el instituto.

Yo en cambio era (soy) un tipo digamos poco atlético pero como mi hermano mayor iba tres cursos por delante y él si que era un delicuente y además éramos jevis pues nuestro apellido era una institución en mi cole. Con lo cual los más bandarras me respetaban bastante. De hecho era colega de gente que luego me contaron que fueron bastante delicuentes. Yo en cambio de canijo siempre supe dónde estaba la raya que no debía traspasar para ser un sátrapa.

   

Rockin' Yakuza escribió:

Maniac escribió:

scabbed wings escribió:

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y  un churumbel creo

En el fragor de la batalla no nos damos cuenta pero con tonteridas como esta se le puede traumatizar a alguienvy facilmente joderle la vida

Yo era más inocente que un cubo. Pero como estaba bastante fuerte no se metía nadie conmigo. Hasta que llegué al instituto... me apunté a uno para ir con mis amigos... y a ellos les tocó por la mañana y a mi por la tarde.Donde no conocía a nadie. Fui objeto de decenas de bromas, que fueron subiendo de intensidad ante mi falta de respuesta.  Lapos dentro de los libros, me metían mierda en dentro de la mochila, se reían de cualquier comentario que hiciera constantemente...  

Por suerte soy un tipo con memoria. Y ese verano se juntó la marginación con descubrir a la polla records.  

Os aseguro que todos y cada uno de esos hijosdeputa tuvieron ciertos problemas estomacales para acabar el instituto.

La madre que me parió Maniac, tú eres un tío muy peligroso     
R.Y

Lo era. Ahora soy un tipo regordete con ciatica que no se agacha por menos de un euro al suelo.    

Tengo amigos de aquella época que cuando rememoramos hazañas siempre acaban diciendo que estoy vivo de milagro... tenía una confianza en mi físico y mi locura muy por encima de la realidad. Una vez, con 17 años, reté a dos porteros y uno o dos camareros de unos treinta años, a pelear... y que cara me verían que nadie avanzaba hacía mi. Lo mismo era porque estaba subido en una barra lanzándoles barriles de cerveza...      

Por suerte ahora soy un tio muy tranquilo.    y ya canalicé la rabia de otras formas alejadas de la violencia.

loaded escribió:

Rockin' Yakuza escribió:

loaded escribió:

elway escribió:Sois la repolla.

Yo fuera de birlar ropa interior de los tenderetes, carreras en containers, meternos con el coche por un campo de golf haciendo trompos, fui poco gamberro. Y estas cosas las hice ya víctima del alcohol.

A

Te parecerá poco   

Una verdadera tontería que solíamos hacer, pero con la que nos echábamos buenas risas, era llevar una bocina o un saco de la risa a clase, concretamente a clase de lengua castellana, cuya profesora era más inocente que un cucurucho. Total, que cuando, por ejemplo, terminaba de explicar algo nos poníamos a aplaudir como descosidos y, disimuladamente, a dar bocinazos como si estuviéramos en San Mamés. Y cuando la clase estaba en completo silencio (extraño y sospechoso), le dábamos al saco de la risa.

Era una chorrada, pero yo me moría. Joder, me estoy acordando ahora y me meo: la tía acaba de analizar una oración, dice algo así como "entonces la frase es una oración subordinada sustantiva de complemento directo" y, de repente, todo cristo empieza a aplaudir y se oye "mec-mec-mec-mec-mec".

     

Nosotros cuando el profe se daba la vuelta levantábamos una revista porno (normalmente una Private, cuántas mentes adolescentes no ha pevertido y perturbado esta revista....) y toda la clase hacía la ola    
R.Y

A mí una que me hicieron mientras resolvía un problema de mate en la pizarra fue mostrar al profesor y a toda la clase el poster de Samantha Fox que guardaba como oro en paño en la carpeta.

Imaginaos el descojono general, incluido el profesor. No me eché a llorar de milagro.

Samantha Fox y Danuta fueron auténticas diosas para muchos de nosotros. Era como BMW y Mercedes, imposible elegir!!    
R.Y

o'tuerto escribió:Si bien yo era un ensañandor de primera, sobre todo en lo psicológico, pronto me daba cosica ver sufrir al prójimo y paraba. De hecho alguna vez actué de freno en algún caso.  
Tampoco he torturizado animalejos ni bichillos. No puteé nunca a profesores.
Un niño de perfil bajo, por lo que tampoco fui objeto de mofa y chanza ni agresión de otros niños.

Según mi madre, yo no me acuerdo... de pequeño me sentaba con las piernas abiertas delante de los hormigueros... y me zampaba las hormigas.

En cuanto a la empatía, si... excepto una vez, que me sigue torturando, nunca,creo,me he metido con nadie más débil ni lo he humillado.

calamardo escribió:y nadie chorizaba revista guarras en el kiosko?? fui yo el único??...también recuerdo lo de comprar pitis sueltos. A 5 pelas el pitillo..ahora el kioskero si hace eso iría directamente a prisión...

Presente!!!

Ibamos varios y había dos técnicas según kiosco, pantalla o distracción jajajajaja por eso teníamos tantas Private que después iban rulando y te llegaban con las hojas pegadas     

Joder qué recuerdos.
R.Y

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

Menudos cobardes hijos de puta. Humillando y acojonando entre todos a un chaval por irse de la lengua. Esta historia no me resulta graciosa, me da rabia.

o'tuerto escribió:Si bien yo era un ensañandor de primera, sobre todo en lo psicológico, pronto me daba cosica ver sufrir al prójimo y paraba. De hecho alguna vez actué de freno en algún caso.  
Tampoco he torturizado animalejos ni bichillos. No puteé nunca a profesores.
Un niño de perfil bajo, por lo que tampoco fui objeto de mofa y chanza ni agresión de otros niños.

Exactamente igual, aunque me habría gustado que alguien me hubiera enseñado a defenderme.
No quería decir nada para no frungiros el topic, pero he flipado con la cantidad de crueldad contra los animales que he visto.   
Curiosamente, la crueldad con las personas, que a ratos raya la delincuencia infantil, me escandaliza menos...

Maniac escribió:

o'tuerto escribió:Si bien yo era un ensañandor de primera, sobre todo en lo psicológico, pronto me daba cosica ver sufrir al prójimo y paraba. De hecho alguna vez actué de freno en algún caso.  
Tampoco he torturizado animalejos ni bichillos. No puteé nunca a profesores.
Un niño de perfil bajo, por lo que tampoco fui objeto de mofa y chanza ni agresión de otros niños.

Según mi madre, yo no me acuerdo... de pequeño me sentaba con las piernas abiertas delante de los hormigueros... y me zampaba las hormigas.

En cuanto a la empatía, si... excepto una vez, que me sigue torturando, nunca,creo,me he metido con nadie más débil ni lo he humillado.

Joder Maniac, el soldadito!! Jajajajaja
R.Y

Gora Rock escribió:

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

Menudos cobardes hijos de puta. Humillando y acojonando entre todos a un chaval por irse de la lengua. Esta historia no me resulta graciosa, me da rabia.

Vista desde hoy en día, da rabia, sí.

Pero con 14 años vete tú a saber...

Hombre, si empezamos con reproches e insultos mejor cerramos el tópic porque esto deja de tener gracia.
Digo.

loaded escribió:

Gora Rock escribió:

Rikileaks escribió:Esta noche me he acordado de un par de judiadas que le tuvimos que hacer a uno del cole por chivato. La cosa fue que, echando un mundialito en el patio del colegio un compi echó un pelotazo que voló y voló y alcanzó a un pavo en la calle que iba a salir con la moto (afortunadamente sin lesiones ni averias graves) Y claro, los allí presentes escurrimos el bulto y de 20 chavales o así nadie sabia nada. Hasta que alguien cantó. Y tras investigar fue identificado. Y la vendetta comenzó a andar.

Aparte de bolsas con mierda en el portal y tonterias de esas, la lección básicamente tuvo dos acciones:
- La que se conoció como El Susto, que fue simplemente atarlo de pies y manos, meterlo en un carrito de super que enfilaba una cuesta bastante pronunciada al final de la cual había curva cerrada, guardarrail y caida de unos cuantos metros. Claro, el carro a su vez estaba atado a una farola por lo que bajó algunos metros y se paró en la cuesta. Metafóricamente se cagó y literalmente se meó. Durante algún tiempo, el infecto chivato se ganó de esta manera el apodo de el Amarillo
- Y la venganza propiamente dicha fue cuando el Amarillo ya pensó que todo había quedado olvidado, de hecho los castigos de la historia del motorista ya habían pasado, y más o menos había vuelto a nuestro redil, y jugó con nosotros al escondite. Fue convencido para esconderse en un baño concreto del colegio en el que habiamos puesto un papel en el que estaba escrito No Olvidamos, bloqueamos la puerta con una silla y desde arriba le escupimos, le tiramos una traca de petardos y una rata muerta.

Ahora es buen tipo, está casado y espera un churumbel creo

Menudos cobardes hijos de puta. Humillando y acojonando entre todos a un chaval por irse de la lengua. Esta historia no me resulta graciosa, me da rabia.

Vista desde hoy en día, da rabia, sí.

Pero con 14 años vete tú a saber...

¿14? Igual alguno menos