RONDA 47 DEL TANGIBLE CONCURSO DE MICRORRELATOS. Gala a las 22:30.

Stoneheart escribió:
6. El sombrerero cuerdo

La gente dejó de tocarse -comentaba el sombrerero- justo cuando mi padre decidió jubilarse, tratando de que su hijo heredara su negocio y su demencia. Creía el hombre que su progresiva locura era inevitable maldición del gremio; el peaje de una vida dedicada a cubrir molleras y caletres, calvas antojadizas y melenas extravagantes.
Pero yo no sabía hacer otra cosa. Desde niño pasé mi tiempo entre el mostrador y el taller, entre hongos y hormas, aprendiendo un oficio que, como decía, empezó a desaparecer justo cuando me hice cargo. Apenas si tardé un lustro en bajar la persiana, harto de fabricar un bombín o un fedora únicamente de higos a brevas. La mitad de siglo desnudó las cabezas, y con ellas mi caja registradora. Solo hoy, en mi propia vejez, he sabido del fieltro y el mercurio, y he comprendido que la misma moda que me arruinó, me mantuvo cuerdo.  

Stoneheart escribió:7. Lo diminuto

“La gente dejó de tocarse”, como frase inicial de realidad imposible.
Nunca nadie tocó a nadie. Cuando dos átomos se intentan tocar, la fuerza electromagnética hace repulsión en los electrones y los mantiene separados. Jamás podremos poner nada en contacto con nada.
Recordad que los átomos tienen cargas positivas en su núcleo y están rodeados de una nube de electrones con carga negativa. Éstos son los responsables de que nunca se toquen los núcleos. Siempre habrá un espacio entre ellos. Y entre vosotros.
Son cargas eléctricas de la mano influyendo en las cargas eléctricas del coño, de la polla o del culo y viceversa. Todo es resultado de la interacción de campos eléctricos y ningún átomo de nada puede tocarse con otro.
En el beso, en ningún momento vuestros labios harán contacto con la persona a la que améis. Todo es una ilusión de la misma realidad, queridos.

Stoneheart escribió:8. Apocalipsis

La gente dejó de tocarse y no se volvió a escuchar al gallo.
La sombra era el territorio más buscado en  las plazas donde antaño las mujeres se sentaban para arremangarse los vestidos y buscar la luz.
Algunos animales se negaban a prestar sus servicios y solo tras severo castigo eran sometidos.
Las horas se tornaron artículos incomestibles y era tan grande la expectación de llanto que los rostros se interrogaban unos a otros en completo silencio.
Por fin llegó un sacerdote. Un hombre enjuto y de suaves ademanes pero que mostraba en los ojos una determinación fuera de duda. Aquí estoy porque me habéis llamado, decía sin un gesto, sin un sonido.
Los ancianos volvieron a santiguarse y un atisbo de esperanza comenzó a abrirse paso en el enrarecido ambiente.
Amanecido el segundo día, un mozo halló el cuerpo de sacerdote bautizado con las misma llagas y poseído por el mismo olor.

salakov escribió:tanto foroazkena y tanta hostia.

Stoneheart escribió:9. Coxal

La gente dejó de tocarse y a bailar separados tras la rotura coxal de Romario a Alkorta. Los tiempos de la lambada habían pasado, ahora estaban de moda los bailes lejanos.

Actualmente Romario es senador en Río de Janeiro. También merendador y desayunador.

Rafael Alkorta todavía busca su cadera, ahora como director deportivo de Lezama.

¿Gifs del Barça?

¡Andáatomalpolculo, Sonny Jim!

Stoneheart escribió:10. El templo en el aire y el gran vacío

La gente dejó de tocarse cuando el hombre de la túnica púrpura irrumpió en el presbiterio. Sudor, sangre, lágrimas y fluidos se deslizaban lentamente hacia el estrecho canal de desagüe, conformando allí una especie de magma viscoso y rosáceo. El canal—ligeramente inclinado—se prolongaba hasta el límite del templo de mármol suspendido en el aire. El hombre de la túnica seguido de la gente caminó hacia el borde exterior. Extasiados vieron como el rosáceo magma al caer al vacío adoptaba formas caprichosas y caleidoscópicas.

—Quiero vivir ahí—dijo uno de los hombres. Decepcionado por esa aseveración y por la ausencia de réplica del resto, el hombre de la túnica cerró la puerta del templo de un portazo.

Tras eso algunos se arrojaron hacia el nuevo mundo, otros aún esperan pacientes en la puerta del templo. Pero a todos les une una misma sensación: se sienten terriblemente solos.

Stoneheart escribió:11. Memorias del Líder

La Gente dejó de tocarse, de abrazarse, de besarse. La Gente dejó de follar. Llegaron los niños, y cada vez era más difícil echar un polvo en condiciones. Cambiaron las prioridades. La Gente empezó a creerse clase media. Una urbanización en las afueras con piscina y parque infantil. Lo aspiracional sobre lo material. Compensar la falta de sexo con series, con colocones esporádicos, con asistencia a conciertos de grupos tributo. El coste en dinero, en resacas, en broncas, no merecía la pena. Mejor poner algo en Netflix y luego intentar dormir, aunque nunca se dormía lo suficiente. Pero la revolución necesita sexo. La revolución será follando, o no será.
Echamos la culpa a los enanos, que habían aparecido y se habían cargado todo. Pero, sin embargo, ellos son la única esperanza. Ellos serán los que, dentro veinte años, culminarán lo que nosotros no fuimos capaces de terminar. Ojalá.

Stoneheart escribió:12. Neutrones

La gente dejó de tocarse.
La gente dejó de verse.
La gente dejó de oírse.
Un parque abandonado.
Un bar polvoriento .
Un balneario con musgo creciente.
En ese momento por fin Gea estuvo en paz.
Había ganado la partida de su vida
sin mover un dedo.

Stoneheart escribió:Buen salashow. Ya que no administra, al menos...

RegSound escribió:En el BBK tanto K como yo tenemos como preferencia después de Weezer conocer a salakov

salakov escribió:

RegSound escribió:En el BBK tanto K como yo tenemos como preferencia después de Weezer conocer a salakov

Nos sacaremos una foto con la mirada "Acero Azul".



Por y para el foro.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:1. La nueva generación

La gente dejó de tocarse los ojos para comprobar que lo que se mostraba delante de ellos era real. La gente dejó de tocarse el pelo como señal de coqueteo. La gente dejó de tocarse el estómago para indicar que la comida estaba buena. La gente dejó de tocarse la barba mientras pensaba. La gente dejó de tocarse el órgano reproductor como señal de desacuerdo. Se eliminaba todo lenguaje corporal para conseguir una civilización basada exclusivamente en el lenguaje verbal.

Con ello fue eliminándose el afecto, la empatía, la complicidad y otras cualidades que requerían del lenguaje no verbal. Así fue como nació nuestra actual generación, la generación de los ciborgs humanos. Es tal el punto, que ayer tuve una erección y aprovechó mi pareja (asignada gracias a un algoritmo) para copular con el fin de procrear. Tras el orgasmo sonreí. Esta mañana en la casa únicamente me encontraba yo.

Muy buena distopía. Me gusta especialmente la importancia que se le da al lenguaje no verbal, el cual se está perdiendo con tanto whatsapp, tanto twitter, tanto foroazkena y tanta hostia.

El ser humano desprovisto del tacto es un cyborg. Bravo.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:2. Watson, venga aquí, le necesito

«Los besos por correo no llegan nunca a su destino,
se los beben por el camino los fantasmas».
—Kafka—

La gente dejó de tocarse
cuando Bell inventó el teléfono.


       «Watson, venga aquí, le necesito»
       No existe contacto, fijaos,
       es un ruego.

Instrumento de la distancia,
artefacto de la separación,
su paradoja afluye perfecta:
acercar a quien se encuentra lejos,
alejar a quien se halla cerca;
todos en compartida incomunicación,
en concreción mundial de ausencias.
¡Herméticos son los nexos
propuestos por el mundo moderno!

Y ahora es incluso peor.
A través de las redes sociales
creamos un personaje
con el que intentamos gritar:
¡eh, estamos vivos!,
pero no lo estamos.
Encapsulados en un lugar
lejano, seguro y virtual,
actúan a todos los efectos
como la muerte,
en tanto en cuanto
nos alejan de la vida.

A través de las redes sociales
—osarios de almas,
sepulcros del tacto—
matamos nuestro verdadero yo,
o lo que es lo mismo,
nos suicidamos.

Teléfono significa “sonido lejano”.

La vida real está en otra parte.

.

Ideas desperdigadas, probablemente plagiadas de Bauman, para componer un poema sin métrica, sin rimas y sin encabalgamientos.

Marwan seal of approval.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:3. Subbótniki

La sociedad debe erradicar para
siempre el deseo individual de ser
más rico, sabio o poderoso

Gracchus Babeuf

La gente dejó de tocarse los huevos y se puso a trabajar. Lo hicieron de una forma desconocida hasta entonces: impetuosos, ufanos, incansables, solidarios…
La promesa de un mundo nuevo tocó a rebato, y a su son el mundo bailó. Explotados y alienados se fundieron en abrazos que perduran en la memoria de los más viejos. Los deseos individuales se desvanecieron en un mar de fervor hacia los más necesitados, que veían con lágrimas en los ojos el fin de la soberbia y la avaricia de los que sí podían.
Las almas crecieron, los cuerpos vibraron y, antes de lo previsto, los huevos se hincharon. Una vez los deseos cubiertos, por desaparecidos, el clamor «que trabaje Rita la cantaora» se instaló como un software maligno.
Y como a falta de pan buenas son tortas, hubo que dar tantas a tantos que perduran en las mejillas de los más viejos.

Me parece entrever una crítica al socialismo a través del conocido discurso neoliberal: «si todo es gratis, nadie trabaja».

A Hayek le gustaría.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:4. El asistente y la draconiana

La gente dejó de tocarse por imperativo legal tras la pandemia de escifosis. Otra consecuencia del mestizaje interplanetario implantado. El consejo arconte tuvo que tomar esa medida, al menos hasta tener dermoescudos eficientes para interacciones fisiológicas.
Los sensotorios eran un negocio floreciente en las metaurbes de la unión.

Malko atendía sus clientes, enfundándoles vainas sensoriales, suministrando los barbitúricos y supervisando su experiencia simulada.
Sona volvía a por otra sesión.
La señal de siempre; un pellizco en la pierna.
Sona se quitaba el dispositivo para recibir a Malko, ya con el torso descubierto, ante las presencias ausentes del resto de clientes narcotizados.
Los instintos afloraban, poros contra escamas, los fluidos, de familiar aroma, correteando entre ellos.

Ni leyes, ni amenazas mortales podían detener su libido durante aquellos encuentros fugaces.

A la pandemia de origen biológico desconocido, que asoló la zona el año siguiente, la llamaron malkosis rememorando la primera víctima mortal.

Pandemia galáctica.

Buen relato sci-fi.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:5. Lujur...

La gente dejó de tocarse en cuanto sonó el silbato y procedió a lamerse. Y así fue como las orgías reguladas acabaron con la espontaneidad.

Los reaccionarios jesuitas amigos de las normas se sentirán identificados.

Necesaria crítica.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:
6. El sombrerero cuerdo

La gente dejó de tocarse -comentaba el sombrerero- justo cuando mi padre decidió jubilarse, tratando de que su hijo heredara su negocio y su demencia. Creía el hombre que su progresiva locura era inevitable maldición del gremio; el peaje de una vida dedicada a cubrir molleras y caletres, calvas antojadizas y melenas extravagantes.
Pero yo no sabía hacer otra cosa. Desde niño pasé mi tiempo entre el mostrador y el taller, entre hongos y hormas, aprendiendo un oficio que, como decía, empezó a desaparecer justo cuando me hice cargo. Apenas si tardé un lustro en bajar la persiana, harto de fabricar un bombín o un fedora únicamente de higos a brevas. La mitad de siglo desnudó las cabezas, y con ellas mi caja registradora. Solo hoy, en mi propia vejez, he sabido del fieltro y el mercurio, y he comprendido que la misma moda que me arruinó, me mantuvo cuerdo.  

Bien hilada historia de sombreros y de la maldición que los aquejaba.

Me ha gustado.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:7. Lo diminuto

“La gente dejó de tocarse”, como frase inicial de realidad imposible.
Nunca nadie tocó a nadie. Cuando dos átomos se intentan tocar, la fuerza electromagnética hace repulsión en los electrones y los mantiene separados. Jamás podremos poner nada en contacto con nada.
Recordad que los átomos tienen cargas positivas en su núcleo y están rodeados de una nube de electrones con carga negativa. Éstos son los responsables de que nunca se toquen los núcleos. Siempre habrá un espacio entre ellos. Y entre vosotros.
Son cargas eléctricas de la mano influyendo en las cargas eléctricas del coño, de la polla o del culo y viceversa. Todo es resultado de la interacción de campos eléctricos y ningún átomo de nada puede tocarse con otro.
En el beso, en ningún momento vuestros labios harán contacto con la persona a la que améis. Todo es una ilusión de la misma realidad, queridos.

Relato entre lo físico y lo teológico. Da que pensar eso del tacto como ilusión.

Me ha gustado.

Toro escribió:

salakov escribió:

Stoneheart escribió:7. Lo diminuto

“La gente dejó de tocarse”, como frase inicial de realidad imposible.
Nunca nadie tocó a nadie. Cuando dos átomos se intentan tocar, la fuerza electromagnética hace repulsión en los electrones y los mantiene separados. Jamás podremos poner nada en contacto con nada.
Recordad que los átomos tienen cargas positivas en su núcleo y están rodeados de una nube de electrones con carga negativa. Éstos son los responsables de que nunca se toquen los núcleos. Siempre habrá un espacio entre ellos. Y entre vosotros.
Son cargas eléctricas de la mano influyendo en las cargas eléctricas del coño, de la polla o del culo y viceversa. Todo es resultado de la interacción de campos eléctricos y ningún átomo de nada puede tocarse con otro.
En el beso, en ningún momento vuestros labios harán contacto con la persona a la que améis. Todo es una ilusión de la misma realidad, queridos.

Relato entre lo físico y lo teológico. Da que pensar eso del tacto como ilusión.

Me ha gustado.

Bueno, no diría que el tacto es una ilusión, diría que es más bien algo antiintuitivo respecto a la idea primaria que percibimos sobre lo que es tocarse. Pero evidentemente las fuerzas electromagnéticas presionan y generan fuerzas en los receptores nerviosos que el cerebro interpreta como tocarse, no necesariamente que los nucleos de nuestros atomos toquen a los otros nucleos, porque eso nunca va a pasar. Siempre me gusta una reflexión física, y estos temas, que en este caso anda a caballo entre microrrelato y microensayo. Alguna impreción, como eso de que los átomos no pueden "tocarse" con otros... pues los orbitales son partes del átomo y si pueden contactar. Pero todo esto, inlcuido un análisis aún mayor, dispararía mi nivel de pedantería, y no es necesario. Me encanta que se haga pensar a la gente sobre esto, y eso es lo más importante para mi.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:8. Apocalipsis

La gente dejó de tocarse y no se volvió a escuchar al gallo.
La sombra era el territorio más buscado en  las plazas donde antaño las mujeres se sentaban para arremangarse los vestidos y buscar la luz.
Algunos animales se negaban a prestar sus servicios y solo tras severo castigo eran sometidos.
Las horas se tornaron artículos incomestibles y era tan grande la expectación de llanto que los rostros se interrogaban unos a otros en completo silencio.
Por fin llegó un sacerdote. Un hombre enjuto y de suaves ademanes pero que mostraba en los ojos una determinación fuera de duda. Aquí estoy porque me habéis llamado, decía sin un gesto, sin un sonido.
Los ancianos volvieron a santiguarse y un atisbo de esperanza comenzó a abrirse paso en el enrarecido ambiente.
Amanecido el segundo día, un mozo halló el cuerpo de sacerdote bautizado con las misma llagas y poseído por el mismo olor.

El fin del mundo narrado con buen pulso.

"Las horas se tornaron en artículos incomestibles», gran frase.

salakov escribió:

Toro escribió:

salakov escribió:

Stoneheart escribió:7. Lo diminuto

“La gente dejó de tocarse”, como frase inicial de realidad imposible.
Nunca nadie tocó a nadie. Cuando dos átomos se intentan tocar, la fuerza electromagnética hace repulsión en los electrones y los mantiene separados. Jamás podremos poner nada en contacto con nada.
Recordad que los átomos tienen cargas positivas en su núcleo y están rodeados de una nube de electrones con carga negativa. Éstos son los responsables de que nunca se toquen los núcleos. Siempre habrá un espacio entre ellos. Y entre vosotros.
Son cargas eléctricas de la mano influyendo en las cargas eléctricas del coño, de la polla o del culo y viceversa. Todo es resultado de la interacción de campos eléctricos y ningún átomo de nada puede tocarse con otro.
En el beso, en ningún momento vuestros labios harán contacto con la persona a la que améis. Todo es una ilusión de la misma realidad, queridos.

Relato entre lo físico y lo teológico. Da que pensar eso del tacto como ilusión.

Me ha gustado.

Bueno, no diría que el tacto es una ilusión, diría que es más bien algo antiintuitivo respecto a la idea primaria que percibimos sobre lo que es tocarse. Pero evidentemente las fuerzas electromagnéticas presionan y generan fuerzas en los receptores nerviosos que el cerebro interpreta como tocarse, no necesariamente que los nucleos de nuestros atomos toquen a los otros nucleos, porque eso nunca va a pasar. Siempre me gusta una reflexión física, y estos temas, que en este caso anda a caballo entre microrrelato y microensayo. Alguna impreción, como eso de que los átomos no pueden "tocarse" con otros... pues los orbitales son partes del átomo y si pueden contactar. Pero todo esto, inlcuido un análisis aún mayor, dispararía mi nivel de pedantería, y no es necesario. Me encanta que se haga pensar a la gente sobre esto, y eso es lo más importante para mi.

Para mi... ¿qué?

salakov escribió:

Stoneheart escribió:9. Coxal

La gente dejó de tocarse y a bailar separados tras la rotura coxal de Romario a Alkorta. Los tiempos de la lambada habían pasado, ahora estaban de moda los bailes lejanos.

Actualmente Romario es senador en Río de Janeiro. También merendador y desayunador.

Rafael Alkorta todavía busca su cadera, ahora como director deportivo de Lezama.

¿Gifs del Barça?

¡Andáatomalpolculo, Sonny Jim!

salakov escribió:

Stoneheart escribió:10. El templo en el aire y el gran vacío

La gente dejó de tocarse cuando el hombre de la túnica púrpura irrumpió en el presbiterio. Sudor, sangre, lágrimas y fluidos se deslizaban lentamente hacia el estrecho canal de desagüe, conformando allí una especie de magma viscoso y rosáceo. El canal—ligeramente inclinado—se prolongaba hasta el límite del templo de mármol suspendido en el aire. El hombre de la túnica seguido de la gente caminó hacia el borde exterior. Extasiados vieron como el rosáceo magma al caer al vacío adoptaba formas caprichosas y caleidoscópicas.

—Quiero vivir ahí—dijo uno de los hombres. Decepcionado por esa aseveración y por la ausencia de réplica del resto, el hombre de la túnica cerró la puerta del templo de un portazo.

Tras eso algunos se arrojaron hacia el nuevo mundo, otros aún esperan pacientes en la puerta del templo. Pero a todos les une una misma sensación: se sienten terriblemente solos.

Me he perdido algo y no sé el qué. Como leer un cómic de Jodorowski dibujado por Moebius.

Delirante, pero me gusta la prosa.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:11. Memorias del Líder

La Gente dejó de tocarse, de abrazarse, de besarse. La Gente dejó de follar. Llegaron los niños, y cada vez era más difícil echar un polvo en condiciones. Cambiaron las prioridades. La Gente empezó a creerse clase media. Una urbanización en las afueras con piscina y parque infantil. Lo aspiracional sobre lo material. Compensar la falta de sexo con series, con colocones esporádicos, con asistencia a conciertos de grupos tributo. El coste en dinero, en resacas, en broncas, no merecía la pena. Mejor poner algo en Netflix y luego intentar dormir, aunque nunca se dormía lo suficiente. Pero la revolución necesita sexo. La revolución será follando, o no será.
Echamos la culpa a los enanos, que habían aparecido y se habían cargado todo. Pero, sin embargo, ellos son la única esperanza. Ellos serán los que, dentro veinte años, culminarán lo que nosotros no fuimos capaces de terminar. Ojalá.

Uf, durísimo retrato del vasco-burgués del siglo XXI.

Duele verse retratado en algunos pasajes.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:12. Neutrones

La gente dejó de tocarse.
La gente dejó de verse.
La gente dejó de oírse.
Un parque abandonado.
Un bar polvoriento .
Un balneario con musgo creciente.
En ese momento por fin Gea estuvo en paz.
Había ganado la partida de su vida
sin mover un dedo.

Evocador pequeño gran poema.

Lo he disfrutado.

Stoneheart escribió:13. Pajas que matan, muertos que salvan.

La gente dejó de tocarse  de forma lujuriosa cuando aparecieron los primeros casos de ceguera. Los científicos acabaron demostrando que el onanismo era la causa de que millones de personas perdieran la vista de manera instantánea. Pero la humanidad era incapaz de frenar sus instintos más básicos.

En general, niños y ancianos conservaban la vista; fueron estos últimos los que determinaron que “hombre ciego, hombre muerto”.

Fue precisamente esta difícil decisión la que logró reducir los casos de invidencia.

Stoneheart escribió:14. Ámsterdam '97

La gente dejó de tocarse cuando las luces rojas se volvieron amarillas. En el escenario, la chica y el chico que habían estado follando se vestían mientras intercambiaban sonrisas, como si hubieran terminado de jugar al tenis o algo así.

Me levanté arreglándome el pantalón de forma sobreactuada aunque no me la hubiera meneado ni nada de eso. Daba vergüenza, claro, pero no quería parecer un bicho raro.

Al rato, en el Barrio Rojo, aquella pelirroja empezó a señalarme con el dedo. Imagínate el pitorreo. Los chicos me metían florines en el bolsillo mientras me empujaban hasta la puerta.

Y ahora, ya sabes, la memoría a veces se dispara como un interruptor ante ciertas cosas. Ante el color rojo, ese tono de color rojo, vuelvo a tener dieciséis. Vuelvo al momento en el que las luces se encendieron o cambiaron de color, y todo, de repente, empezó a ser distinto.

Stoneheart escribió:15. Nana de una madre muy madre.

La gente dejó de tocarse cuando se quedó ciega, no volvieron a pisar lo fregado y querían croquetas para cenar.
Sólo los huérfanos sabíamos que el futuro era nuestro, pero la revolución tenía que pasar por cortas unas cuantas cabezas tecnológicas.
Pero en esta granja de pollos nadie quiere una revolución que le saque de su zona de confort.
Por eso no voy a ser madre.

salakov escribió:Ojo que son las tres de la tarde del miércoles y el número se ha estancado en 15.

¿Procederemos a llamar "número Piedroncias" al "número Tacitus"? Sum sum.

Nomeko7 escribió:Cuál es el "número Tacitus"? Por cierto.

salakov escribió:

Stoneheart escribió:13. Pajas que matan, muertos que salvan.

La gente dejó de tocarse  de forma lujuriosa cuando aparecieron los primeros casos de ceguera. Los científicos acabaron demostrando que el onanismo era la causa de que millones de personas perdieran la vista de manera instantánea. Pero la humanidad era incapaz de frenar sus instintos más básicos.

En general, niños y ancianos conservaban la vista; fueron estos últimos los que determinaron que “hombre ciego, hombre muerto”.

Fue precisamente esta difícil decisión la que logró reducir los casos de invidencia.

He aquí el trabajo de una mente ahíta de bromuro que ha decidido compartir con nosotros las enseñanzas de Escribá de Balaguer.

Huele a menesianos ese trabajo; a pajas llenas de culpabilidad, huele. A manos encallecidas.