RONDA 9 DE LA QUINTA ERA DEL CONCURSO DE MICRORRELATOS. VAMOS A POR LA GALA

Frase: Hay algo en ti

Reglas:

REGISTRO HISTÓRICO:

ACTAS DE ESTA EDICION, HASTA LA GALA ACTUAL:

CLASIFICACIÓN V EDICIÓN:

RELATOS A CONCURSO

1.-Microtrap

Hay algo en ti que me provoca. Y eso que tú quieres yo te lo voy a dar
Paseando en mallas, marcando nalgas
Como Yung Beef a La Zowi, te voy a penetrar

Gozaremos en la cama, llamaré a mi pana
El por detrás, yo por delante
Tú ya sabes que en la cama me gusta que me llames comandante

Para terminar, fumaremos un canuto
Nada de coca, soy astuto
No me pidas un cunnilingus, yo contigo no discuto

2.-Dentro

Hay algo en ti que me obsesiona. No se puede ver, pero yo sé que está dentro de ti, puedo sentirlo. Me enamora, me subyuga, quiero verlo. Lo noto cada vez que nos cruzamos por la calle, cuando nos sentamos cerca en el metro, cada vez que coincidimos en el bar.
Me resulta sencillo seducirte y hacer que vengas a mi casa. Te desnudo, te tumbo en mi cama, te abro en canal. Y, sin embargo, no encuentro lo que buscaba, una vez más.
Limpio la sangre, entierro tus restos en el jardín, como he hecho otras veces.
Salgo a la calle, me cruzo con un chico, me sonríe. Noto algo. Creo que hay algo dentro de él.

3.-incidente nuclear nivel 2

Hay algo en ti que siempre me impidió tocar tu alma.

Entretejimos carcajadas y susurros, nos empapamos en vino y cálida saliva, resbalamos sobre nuestras pieles salobres. Mis pestañas barrieron el rastro de mis labios por tu carne erizada, y en mi cuerpo expectante trazaron mil rutas las yemas de tus dedos. Se diluyeron juntos en la noche nuestros alientos, dormimos hasta soñar sobre la misma almohada. Tantas veces.

Pero siempre de lejos. Nunca toqué tu alma.

Sólo una vez la vi. De pronto, tus ojos dejaron de ser espejo, y la vi. Yerta y ennegrecida, casi muerta, salvo por un estertor doliente y morboso, que olía a almendras amargas. Ayúdame, dijiste, y un imán de nostalgia me atrajo a rescatar el pasado de risas, vino y sudor del pútrido pantano venenoso que había visto.

Pero huí; sabía lo que le pasó al primer bombero que llegó a salvar Chernobyl.

4.-Misantropía

Hay algo en ti que odio. No te conozco, pero lo tienes. Con certeza. Tal vez te guste vestir pantalones amarillos, o muevas muchos los brazos al caminar, o adores terminar cada frase con el insufrible «¿eh que no?». Quizá pertenezcas a esa tribu de australopithecus mongoloides que dicen «lo siguiente» (imbéciles no, lo puto siguiente) o te guste mucho toquetear a tu interlocutor apuntalando cada palabra con un innecesario tacto seboso. ¿Cómo? ¿Qué eres de esos clasistas depreciables que se autodefinen «clase media»? Oh, cuánto te odio. Y odiaré cualquiera de tus postulados morales cuando no coincidan con los míos, así de sencillo me resulta odiar. Así de natural.
Mis odios son fortuitos, gratuitos y severos. Pánfilos que tildáis “ti”, hijosdeputa autoritarios, votantes de derecha, os odio sin distinción. Con un odio fraternal, os odio. Con la intensidad del amor que reservo para aquellos —definitivamente pocos— que no odio.

5.-A corazón abierto

Hay algo en ti que te hacía único, y por ello siempre brillarás en mi. Hoy me ha tocado decirte adiós con todo el dolor de mi alma y con las lágrimas brotando de los ojos.
Papá sabía que eras especial, tanto que te eligió para ser mi padrino. No se conformaba con que fueras sólo mi tío, pues su hermano pequeño tenía que estar más presente aún en mi vida, y yo se lo agradezco.
Hoy se me ha ido un ejemplo de como se ha de ser en la vida, alguien que ha marcado mi persona.
No sabía como expresarlo, y me he acordado de este santo foro, que ahora me está sirviendo de desahogo, y es que aunque salakov decida darme su poeta-negro, tú te mereces este sentimiento.

Descansa en paz tito.

6.-Mi mayor.

Hay algo en ti que no consigo recordar. ¿Me abrazabas de verdad o realmente me dabas una oportunidad? Creo recordar que no existía nadie más, por aquellos días nos bastábamos, éramos el abridor y esa botella de vino del no te quiero querer. La vía láctea, las conversaciones hasta el amanecer, las miradas que atraviesan prejuicios, el desespero de las horas que se transforman en minutos, y siempre hacía frío. El corazón de un hombre puede encoger bajo el tacto de un amor verdadero, pasajero y desbordante. Me derrumbo con el recuerdo del tacto.

Te veo en los aeropuertos entre la multitud, en las cafeterías de mi ciudad, en el reflejo de este anciano que aún te lleva en el bolsillo en forma de pañuelo y en el opus 10 nº3 de Chopin, que de forma abstracta, dibuja tus ojos verdes que algún día proyectaron la ilusión de un nosotros.

7.-Mármol blanco como la nieve

—Hay algo en ti que está roto, algo que te hace insensible al dolor, a las necesidades y deseos ajenos—me solía decir mi madre tras recordarme una vieja promesa. Sucedió años atrás, visité a mi moribundo abuelo en su desvencijada cabaña con un único fin: conseguir sus magníficas botas fabricadas con el mejor cuero de la región. —Son tuyas si prometes poner una lápida en mi tumba— me dijo. Pero los meses pasaron y cuando mi madre me recordaba esa promesa yo esbozaba una sonrisa arrogante. En la primera ventisca de aquel invierno volvía borracho del burdel cuando perdí el camino, solo recuerdo un destello de luz cegadora antes de desmayarme y casi morir congelado.

Sentado junto al fuego las palabras de mi madre reverberan hoy en mi cabeza, ahora sé lo profundo que es el dolor; incluso el que pueden producir unas piernas amputadas del cuerpo.

8.-Ronda nocturna

«Hay algo en ti que me hace evocar la ausencia, tu mirada esquiva; algo que te devuelve a mi presencia, esos labios carnosos; tus manos caídas con las palmas bien visibles me sugieren necesidad, tus pies a las diez y diez me reciben acogedores; ímpetu es lo que leo en tus hombros echados hacia el frente, energía en las rodillas flexionadas; esas orejas en abanico envuelven cualquier súplica y tu cabello revuelto apuntando al cielo desvela una evidente conexión cósmica. Todos esos algos hay en ti.
¿Y yo? La sombra que proyectas, una silueta al servicio de tus argumentos que existe gracias a la luz que...»

—Vamos Nicasio. Deja de darle la matraca al maniquí que es tarde y cierran el albergue.
—Es una diosa, Colás. Solo un soplo de vida haría falta.
—Pues tú para soplar te pintas solo —remató Colas con una risotada envuelta en aroma de anís.

9.-Joaquín

Hay algo en ti, Joaquín, que me pone de mala hostia. Esa presunta gracia gaditana, ese reírse tu propio chiste dos minutos antes de que lo termines, ese maldito chiste sin gracia que tú mismo eres. Me resultas detestable, Joaquín. Me consta que al 99,9% del país le caes guay, que eres el futbolista predilecto de Antena3 y que Bertín Osborne no tendría problema en comerte la polla si se lo propusieras, pero a mí me produces sarpullido. Das mucho asco, Joaquín. Mucho. Más rancio que las patatas onduladas del Día. Más trasnochado que los boxers de Joaquín Prats. Señorito. Andaluz.
> ¿Cómo no voy a poder pagar lo que quiera o ganar lo que gano? ¿Cómo va a ser, carajo?
> Pablo Iglesias nos quiere quitar de comer gambas y jamoncito.
> ¿Ha cambiado de champú, el de Podemos?"
> Los toros son nuestros. ¡Y al que no le guste que no mire!




10.-Palabras muertas

"Hay algo en ti que no está bien" son las únicas palabras que escribes. Luego haces una bola con el folio y lo lanzas a la papelera, con la actitud del equipo de baloncesto que va perdiendo por más de treinta puntos.

Buscas inspiración en las calles de siempre, el acto reflejo de caminar hacia la misma dirección mientras miras hacia todos los lados. La gente es distinta aunque en realidad es la misma, te dices, buscando frases ingeniosas. Frases sin fecha de caducidad, frases que sigan significando algo a la vuelta de la esquina.

"Días en la calle Fuencarral". "Una calle en Malasaña". Títulos de historias en las que una frase ingeniosa pueda sobrevivir. La casa por el tejado, otra vez. No lo dices y tampoco lo piensas. No caes en ello; da igual. La frase se te olvida. Hay algo en ti que no está bien.

11.-Da igual

Hay algo en ti que me recuerda a un abismo: si salto, me despertaré de golpe y tú jamás habrás existido.


12.-Madrasa

—Hay algo en ti que me recuerda a tu bisabuelo— dijo Ulugh Beg a su primogénito, quien sonrió halagado por la comparación con el sanguinario Tamerlán.
—Te perdono la vida, padre —mintió el usurpador—. Dejarás el trono y peregrinarás a Ciudad Santa.

El destronado sultán abandonó palacio y deambuló taciturno por callejuelas de adobe, entre aromas de plov y comino. Portillos se cerraban al paso del astrónomo guardando miradas medrosas, afligidas. Distraído llegó hasta su gran obra, la Madrasa, templo de ciencia erigido en el corazón del Registan, flanqueada por espigados minaretes que horadaban la noche de Samarkanda. Con un ademán atrajo a un estudiante que atravesaba la plaza.
—Joven, ¿podrías mostrarme el camino hacia La Meca?
El niño observó las estrellas, meditó y señaló la carretera a Bukhara.
Ulugh Beg asintió conmovido; partió, orgulloso de su legado, aun sabedor de que le acechaban y jamás llegaría con vida.

13.-La primera miel

Hay algo en ti que también será mío para siempre.
Tu lengua, que me prometía maravillas, prometía fuegos artificiales, dulces sabores a chicles de fresa acida o frutales caramelos jugosos.
Una orquesta rodeándonos. Una descarga eléctrica que me hiciera temblar.
Esa lengua despertaba instinto, curiosidad y ganas.
Esa lengua un día llegó. Me regaló una sensación confusa, me incomodó con sus movimientos, me dejo en la boca líquido viscoso templado con sabor irreconocible, dejó unos labios húmedos, pero no refrescados.
Esa lengua duró unos instantes y se fue. Me dejó solo ante otra etapa. De abandonar el ensimismamiento, de maduración. De reflexión y frustración ante el encuentro de un sueño infantil quebrado. Una ilusión ideal rebelada de forma cruda y realista.
Esa lengua que llegó no era la lengua que esperaba, que prometía todo aquello. Pero era mucho más real.
Nadie olvida su primer amor, tampoco olvida su primera lengua.

14.-Las cosas claras.

- Hay algo en ti....pero no eres tú, soy yo, que también hay algo en mi, repugnancia porque eres un baboso.

15.-Eres especial

Hay algo en ti que te hace casi único, y no solo por tu condición de albino, zurdo, daltónico y monárquico.
¿Que porqué? Te lo explico, campeón.
Mira; por ahora, en el estado actual de la medicina, somos mayoría los que creemos que tu poliorquidismo surgió por una división accidental de tu cresta genital con o sin el mesonefros antes de la octava semana de tu gestación en el Condado de Treviño, y dependiendo del sitio de la separación, tus testículos supernumerarios se están desarrollando con un epdidídimo y conducto deferente común o varios separados. Eso un tema que tenemos que analizar con los de Tele 5, aunque no tiene que causarte problemas.
Habla con recepción para que te den cita en quince días y pasa buen finde

Fuente (del plagio): (Acta méd. costarricense vol.47 n.4 San José Oct. 2005)

16.-Izquierda

-Hay algo en ti que me hace pensar que no necesitas volver. Llevamos muchos años viéndonos. Han sido horas y horas de conversaciones. Ahora hemos descubierto que algo ha cambiado. Y ese algo nos separa. ¿Qué es? No lo sé. ¿Seré yo? ¿Serás tú? Los colores, quizá. Pero, ¿por qué insistes en volver?

-Aquí me siento como en casa.

-Déjate de cuñadismos, que pareces Albert Rivera.

-Creo que nadie me entiende como tú.

-Creíque y penseque son amigos de tonteque. Esto ya lo habíamos hablado. Suéltate el pelo.

-¿Como David Summers?

-Mira que eres tonto. Tira, ¡y que no te vuelva a ver!

-¡Quiero seguir jugando con tu pelota!

-¡¿Qué pelota ni qué niño muerto?! Olvídate de mí, Iñigo.

-¡Jamás, Pablo! ¡Me recordarás hasta tu último día! ¡Me voy con Manuela y Pedro!



17.-Ajuste de cuentas

Hay algo en ti que me desagrada y me incomoda.
Nos reunimos unos cuantos amigos.
Tomamos unas cervezas y alguien cuenta una historia divertida.
Todos rompemos a reír a la vez y te veo mirar a tu alrededor preguntándote qué resulta tan gracioso.
Cuando se pide la cuenta eres el primero que agarra el ticket y lo repasa de arriba a abajo, también eres el último en sacar la cartera.
Sobre las 2 de la madrugada se ilumina la pantalla del móvil.
Seguro que eres tú el que ha enviado un "chiste" machista o uno de esos mensajes que debes reenviar si no quieres tener mala suerte por los siglos de los siglos.
Creo que con la edad me he vuelto más intolerante con tipos como tú.
No eres trigo limpio.
No aportas nada a mi vida.

18.-Jabuguitos

Hay algo dentro de ti… yo mismo me lo decía. Era enorme mi vientre, redondo como globo terráqueo; y al revés: mi cabeza se aguisantó hasta formar el total del cuerpo una caprichosa y ridícula persona humana. En un establo, arrodillado junto al heno, como las bestias, me puse de parto sin aviso. Por ser hombre no alumbré de manera natural, tuve que defecar a las criaturas, que fueron tres: tres cerditos con sus gorritos de marinero, cinta incluida.
El dolor en el culo-culo persistió fuera de la pesadilla durante días, pero al menos había despertado. No obstante, por la noche, al despedirme de mis hijos, albergo el temor de que en su lugar, arropados en sus camitas, están los tres jabuguitos con sus gorritos, y que llorosos, haciendo temblar sus rosados y redonditos hocicos porcinos, me hablan con una sola voz: Papá, cuéntanos un cuento.


19.-Correo nº 33

Hay algo en ti, querida, pero también en mi. Quizá sean las pastillas... pero no, porque no he vuelto a tomarlas. Quizá tu poca sensibilidad, treinta y dos correos sin respuesta. El porculero, o sea, mi psiquiatra, me aconsejaba sinceridad: la verdad cura, decía. Igual es cierto. Miro tus fotos y deseo odiarte, pero no puedo. Y te envío otro correo.
Estuvo mal cantar “Sarandonga” en la fiesta de tu prima Chus. Siempre está mal cantar “Sarandonga”, pero aún más encima de una mesa y en calzoncillos. El porculero sugirió que no me desinhibiese tanto. Y tampoco debí masticar media pamela de tu madre, aunque antes la hubiese rociado con ketchup. Vale. Pero hasta el porculero afirmó que todos merecemos una segunda oportunidad. Y eso que le pinté “Freud ha muerto” y “Más morapio” en el baño de la consulta.  Hay algo en ti. Y en mi. Y en el porculero. Seguramente sin arreglo.



20.-Alma de caoba.

Hay algo en ti que te diferencia de las demás. No has sido la primera y quizá no seas la última pero, por algún motivo, siempre vuelvo a ti. Será tu voz, tal vez el tacto de tu cuerpo o simplemente nuestra química que, con los años, nos ha vuelto más honestos el uno con el otro.
Muchas veces he pensado en tu nombre, pero referirse a ti con una desagradecida palabra no te haría justicia, pues pondría fronteras al amalgama de matices que moldean tu personalidad.
Hay algo en ti que me hace dejarme llevar. Me transporta a lugares oníricos que difuminan el dónde y el cuándo mientras bailamos una danza que nos conduce inexorablemente hacia el frenesí. En ese momento vuelvo al mundo de los mortales, abro los ojos y concedo a mis sentidos que te abandonen brevemente para disfrutar del reconocimiento hacia nuestra creación.

Oh, y el "ti" sin tilde.

Hazme tuyo.

salakov escribió:Oh, y el "ti" sin tilde.  

Hazme tuyo.

Lo que te guste a tí

Por cierto, he visto la gala de ayer y solo puedo decir:

volvamos al confortable underground

Las rondas de crimi siempre son buenas

RegSound escribió:Las rondas de crimi siempre son buenas

Gracias por los ánimos, los voy a necesitar 

…es verdad que hay algo en ti que nunca
ha podido someterse, una cólera, un deseo,
una tristeza, una impaciencia, un desprecio,
en suma, una violencia… y mira, tus venas
llevan oro, no barro; orgullo, no servidumbre.
Rey has sido, Rey desde siempre…



Aimé Cesaire — Las armas milagrosas

Ya tengo un relato amigos

Un buen relato, añado.

Y dejo esta canción aquí para tacitus:

Gracias Saladito

Buena frase, Crimi

Gran gala, Auti (Luis Eduardo)

FdC

Nostromo

Hay algo en ti.

FdC Fiebre en las gradas

Hay algo en Titi Henry que le ha convertido en el ídolo de Highbury

Bueno, pues parece que de momento no estamos baneados ni nada

¡Buena frase, Crimi!

Buenas... ando a la carrera pero ya he tomado nota de la frase, actualizaré durante la semana... y copiaré cabeceras también con las actas de la ronda 8

Autista escribió:Bueno, pues parece que de momento no estamos baneados ni nada

¡Buena frase, Crimi!

Eso solo es por tu culpa....porque no fuimos al hilo de blas una cosa...
m

[quote="tacitus"]

Gracias Saladito

Buena frase, Crimi

Gran gala, Auti (Luis Eduardo)[/quote]



m

Autista escribió:Bueno, pues parece que de momento no estamos baneados ni nada

¡Buena frase, Crimi!

Flechas a todo. Aunque esta mañana cuando he entrado ha sido así:

Autista escribió:Bueno, pues parece que de momento no estamos baneados ni nada

¡Buena frase, Crimi!

 Espero grandes relatos hoy, ahí lleváis inspiración:

Mejor esta:

Vamos arriba!!

Criminal pentatónico escribió:Vamos arriba!!

Siempre la asocio con El gran Lebowski.

Stoneheart escribió:

Criminal pentatónico escribió:Vamos arriba!!

Siempre la asocio con El gran Lebowski.

Es un temazo y está integrada en la peli de puta madre

Something in you caused me to
Take a new tact with you...

Vaya, aún existe este rincón. Buena frase, os leo.

Solo tengo un relato, mañana publico todo lo que tenga. No pelearse mientras tanto 

Una recomendación antes de irme a dormir (ayer estuve de boda y me pillé tal toña que llegué a pensar en algunos momentos que era yo el que me casaba...), este relato es absolutamente magistral y al parecer el relato preferido de James Joyce:



Aquí el enlace para leerlo:

https://ciudadseva.com/texto/cuanta-tierra-necesita-un-hombre/

Mañana relatos? Pero ya hay frase?

Criminal pentatónico escribió:Solo tengo un relato, mañana publico todo lo que tenga. No pelearse mientras tanto 

Spoiler:

Bah, si es sólo para dar algo de vidilla, que como Sugar no se pasa está esto muy pacífico.

estaba buscando la frase en el topic del prusés

Empieza el baile con dos relatazos

Criminal pentatónico escribió: (ayer estuve de boda y me pillé tal toña que llegué a pensar en algunos momentos que era yo el que me casaba...)

1.-Microtrap

Hay algo en ti que me provoca. Y eso que tú quieres yo te lo voy a dar
Paseando en mallas, marcando nalgas
Como Yung Beef a La Zowi, te voy a penetrar

Gozaremos en la cama, llamaré a mi pana
El por detrás, yo por delante
Tú ya sabes que en la cama me gusta que me llames comandante

Para terminar, fumaremos un canuto
Nada de coca, soy astuto
No me pidas un cunnilingus, yo contigo no discuto

2.-Dentro

Hay algo en ti que me obsesiona. No se puede ver, pero yo sé que está dentro de ti, puedo sentirlo. Me enamora, me subyuga, quiero verlo. Lo noto cada vez que nos cruzamos por la calle, cuando nos sentamos cerca en el metro, cada vez que coincidimos en el bar.
Me resulta sencillo seducirte y hacer que vengas a mi casa. Te desnudo, te tumbo en mi cama, te abro en canal. Y, sin embargo, no encuentro lo que buscaba, una vez más.
Limpio la sangre, entierro tus restos en el jardín, como he hecho otras veces.
Salgo a la calle, me cruzo con un chico, me sonríe. Noto algo. Creo que hay algo dentro de él.

Otro relatazo más

3.-incidente nuclear nivel 2

Hay algo en ti que siempre me impidió tocar tu alma.

Entretejimos carcajadas y susurros, nos empapamos en vino y cálida saliva, resbalamos sobre nuestras pieles salobres. Mis pestañas barrieron el rastro de mis labios por tu carne erizada, y en mi cuerpo expectante trazaron mil rutas las yemas de tus dedos. Se diluyeron juntos en la noche nuestros alientos, dormimos hasta soñar sobre la misma almohada. Tantas veces.

Pero siempre de lejos. Nunca toqué tu alma.

Sólo una vez la vi. De pronto, tus ojos dejaron de ser espejo, y la vi. Yerta y ennegrecida, casi muerta, salvo por un estertor doliente y morboso, que olía a almendras amargas. Ayúdame, dijiste, y un imán de nostalgia me atrajo a rescatar el pasado de risas, vino y sudor del pútrido pantano venenoso que había visto.

Pero huí; sabía lo que le pasó al primer bombero que llegó a salvar Chernobyl.

Pues a tomar por culo mi idea.

FdC

_________________________

Amor

Hay algo en ti, Fumiko, que no consigo aprehender. Será tu palidez de nieve, tus ojos de jade negro o algo más profundo escondido en tu alma, lo ignoro, pero este desconocimiento me llena de zozobra. ¿Acaso alguien sabe por qué ama? ¿Cuál es esa partícula del ser amado que le hace único y diferente? Yo me propuse descubrirlo, querida Fumiko. Y resultó decepcionante no hallarlo en tu mirada, tus ojos desalojados resultando dos insignificantes bolas acuosas. Tampoco me fue dado encontrarlo en tus vísceras, sonrojadas y malolientes como las de cualquier animal: de nada sirvió respirar a través de tus alveolos, de nada comer el limo de tus intestinos. No estaba en tu piel, con la que me cubrí, ni en tu corazón, el cual imaginé unido por un hilo rojo. He revisado cada centímetro de ti, amada Fumiko, y aún hoy se me escapa tu caprichosa singularidad. Perseveraré.

Clasificaciones actualizadas y cabeceras actualizadas incluyendo el acta de la última ronda

salakov escribió:Pues a tomar por culo mi idea.

FdC

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Amor

Hay algo en ti, Fumiko, que no consigo aprehender. Será tu palidez de nieve, tus ojos de jade negro o algo más profundo escondido en tu alma, lo ignoro, pero este desconocimiento me llena de zozobra. ¿Acaso alguien sabe por qué ama? ¿Cuál es esa partícula del ser amado que le hace único y diferente? Yo me propuse descubrirlo, querida Fumiko. Y resultó decepcionante no hallarlo en tu mirada, tus ojos desalojados resultando dos insignificantes bolas acuosas. Tampoco me fue dado encontrarlo en tus vísceras, sonrojadas y malolientes como las de cualquier animal: de nada sirvió respirar a través de tus alveolos, de nada comer el limo de tus intestinos. No estaba en tu piel, con la que me cubrí, ni en tu corazón, el cual imaginé unido por un hilo rojo. He revisado cada centímetro de ti, amada Fumiko, y aún hoy se me escapa tu caprichosa singularidad. Perseveraré.

Por tardón...

salakov escribió:Pues a tomar por culo mi idea.

FdC

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Amor

Hay algo en ti, Fumiko, que no consigo aprehender. Será tu palidez de nieve, tus ojos de jade negro o algo más profundo escondido en tu alma, lo ignoro, pero este desconocimiento me llena de zozobra. ¿Acaso alguien sabe por qué ama? ¿Cuál es esa partícula del ser amado que le hace único y diferente? Yo me propuse descubrirlo, querida Fumiko. Y resultó decepcionante no hallarlo en tu mirada, tus ojos desalojados resultando dos insignificantes bolas acuosas. Tampoco me fue dado encontrarlo en tus vísceras, sonrojadas y malolientes como las de cualquier animal: de nada sirvió respirar a través de tus alveolos, de nada comer el limo de tus intestinos. No estaba en tu piel, con la que me cubrí, ni en tu corazón, el cual imaginé unido por un hilo rojo. He revisado cada centímetro de ti, amada Fumiko, y aún hoy se me escapa tu caprichosa singularidad. Perseveraré.

Qué curioso, es casi lo mismo. Lo que no entiendo es cómo va a perseverar en este caso.

Fumiko hace trap?