RONDA 5.18 DEL BERMELLÓN CONCURSO DE MICRORRELATOS DE FOROAZKENA

El relato deberá incluir, en cualquier orden, las 5 palabras propuestas: Colibrí / Pomelo / Satisfyer / Follar / Bermellón

Reglas:

REGISTRO HISTÓRICO:

ACTAS DE ESTA EDICION, HASTA LA GALA ACTUAL:

CLASIFICACIÓN V EDICIÓN:

RELATOS A CONCURSO:

1.- Anglicismos

No soy amigo de infidelidades, pero cuando esa holandesa me invitó a su piso —a follar, se entiende—, no supe negarme. Mi hermoso colibrí, arrugado por años de desuso y apatía conyugal, demandaba néctar. Pero estaba nervioso, lo confieso. Demasiado tiempo sin.
«I wanna rugmunching», solicitó ella casi sin desvestirnos, lo cual me desconcertó. ¿Rugmunching? ¡Pues ahí que la arreé una buena cachetada en el culo!
«I’m hot», dije por unirme a la fiesta.  (y... ¿escupió en mi oreja?)
«Riming!», exclamó ella. (solté otra cachetada)
«Wisfling!», inventé yo. (hizo zumo de pomelo con mis testículos)
«My satysfier! I’m getting of!», ella. (pumba, otra cachetada)
«Pegging!», me quería sonar. (maldita la hora)
Comprobará el lector que mi falta de imaginación la suplo a base de hostias, su culo bermellón la prueba de ello. Pero, caray, ¡a mí también me dolía!
Moderneces del mundo moderno, asqueado y confundido regresé a casa.

* * *

2.- Visita inesperada

- “Al habla Pomelo, los padres acaban de irse del nido. Cambio.”

- “Colibrí, avisa cuando tengas visual del objetivo. Voy cogiendo sitio en la colina. Corto y cambio.”

Ayer Javier me confió en secreto que, durante su turno de reparto, le tocó llevar un paquete a Lidia, de un curso más. Era el famoso Satisfyer. Si antes teníamos difícil follar con este acné, ahora iba a ser imposible.

A medio camino de la cima de la colina, se puede ver perfectamente la habitación de Lidia. Me ajusto los prismáticos justo cuando entra Lidia en su cuarto y abre el paquete.

- “Colibrí, Pomelo, subid ya. El pájaro está…”

Me doy cuenta de que no tengo pilas. Fijo la vista y veo cómo Lidia se lleva las manos a la cabeza. Horrorizada, ve cómo acaba de dejar una mancha bermellón en la colcha.

Otro día será.

* * *


3.- Criaturas Salvajes

Me encantaba follarme la vida. Levantarme por la mañana y ponerme el increíble “Satisfyer” de los eternos The Wild Creatures. Aquella portada con un resplandeciente colibrí bermellón y azul turquesa de fondo, era artwork del bueno. Después exprimía un par de pomelos y me los bebía sin apenas añadirles azúcar. Era entonces cuando estaba preparado para salir a la calle.

Recorría aquella diminuta ciudad subido a mi skate de importación mientras en mis auriculares sonaba el primer EP de The Wild Creatures, un compendio de electrónica, jazz y drone, que convertía el arte musical del nuevo siglo en algo ciertamente refrescante.

Aquel día fue incluso más especial si cabe. Bajé la gran cuesta que daba a la plaza principal del pueblo y la vi. Era alta, rubia, ojos melosos. Su contoneo detenía el tiempo, y su naturalidad casi me provoca una caída de las gordas.

Fue amor a primera vista.

* * *

4.- La mochila austriaca

Colibrí Dorado, podían haberle llamado
Pomelo Gigante  o Rallador Oxidado,
pero le llamaron colibrí.
Es lo que tienen el amor libre los porros y el l.s.d
Empiezas por follar con todo lo que se mueve y acabas
en el registro civil viendo la cara de pasa del funcionario tomando un cierto tono bermellón por la vergüenza ajena
mientras inscribe el nombre que has elegido para tu vástago.
No nos engañemos, eso de Colibrí Dorado será muy inspirador y
sugerente...
La libertad y tal.
Malas noticias para ti.
Para 1970 ese rollo estaba desfasado.
Ahora  llevas corbata y cobras tu paguita en el congreso de los diputados.
Lo de tener un hijo que se llama Colibrí ya no te pega, ahora lo tuyo es controlar cómo van los números de tu inversión en Satisfyer.com
y procurar que se apruebe tu calendario neocon de mierda.

* * *

5.- Hambre

La Satisfyer II aterrizó sobre el felpudo bermellón con intenciones deshonestas en busca de su objetivo. La selva no daba tregua, haciendo que el tripulante Colibrí solo pudiera atisbar bello vello. Sin abnegarse y decidido, se desabrochó el cinturón y tomó rumbo hacia la escotilla. Escribió el código (f-o-l-l-a-r) y salió de su nave. A machetazo limpio fue cortando los arbustos hasta dar con el objetivo.

-Po´me lo como – dijo para sí mismo.

Se abalanzó sobre él con la lengua desatada por completo.

* * *

6.- Mañana de domingo

María ha llevado el desayuno al dormitorio. Su hija, a los pies de la cama, disfruta la tostada con zumo de pomelo viendo juntas dibujos en la tele.
Ventanas y balcón, abiertos, airean la estancia llevando una brisa a María, que tumbada y relajada observa de reojo la mesita y su último juguete, el satisfyer. Desde el divorcio, follar no es opción, fuera complicaciones.
Traviesas bajo las sabanas, casi imperceptibles, sus manos comienzan a jugar, hasta retorcerse girada sobre la almohada y cerrando los ojos, concentrada en su placer.
Al volver a abrir los ojos, le sobresalta la ausencia de Laura. Se incorpora bruscamente, descolocada, saliendo precipitadamente al balcón, aún aturdida del éxtasis. ¿Cuánto tiempo había pasado? Sobre la acera, la mancha color bermellón la indica donde debe mirar. Experimenta un impulso desesperado de volar a buscarla, creyéndose ligera cual colibrí en aquel estado enajenado.
Suicidio ampliado, rezaron los titulares.

* * *

7.- Hayami y el kanzashi mágico

Hayami era conocida por su inteligencia, su conversación y su belleza incomparable. Una mañana recibió una nota, el momento de su mizuage había llegado. El afortunado era Hiroshi, un hombre enormemente rico con fama de depravado y sádico. En casa de Hiroshi, indicaron a Hayami que caminara hacia el final del Jardín. Lo encontró sentado sobre una manta bermellón, bajo un árbol colmado de pomelos. Consoladores, plumas, velas masajeadoras y un satisfyer yacían sobre la manta.

—Ven, te voy a follar de todas las formas conocidas—ordenó Hiroshi.

Hayami sonrió y abrió su kimono. Hiroshi pensó que la mera contemplación de ese cuerpo ya valía todo lo que había pagado. Hayami quitó de su pelo el kanzashi que lo recogía y lo partió en dos. Al abrir su mano derecha un colibrí emergió de ella y al abrir la izquierda una bandada que se arrojó sobre los ojos de Hiroshi.

* * *

8.- Domingo

”Veremos como trata de levantarse tras el 0-3 el conjunto bermellón" eran las palabras que el narrador decía a la vez que Luis se quejaba amargamente:
-Otra vez se están follando al Mallorca, esto es insufrible.

Buscó en el mueble bar y sólo encontró ron y zumo de pomelo, pero que se le iba a hacer, cogió hielo y para delante.

A su vez, María salía de su habitación, a la cual Luis le vió de reojo el satisfyer, por lo que pensó "encima hoy a dos velas..."

María se dirigió a él:
-¿Quieres comer?
-Sí, venga, calentemos el colibrí en salsa.
-¡CODORNICES ,CAZURRO, CODORNICES!
-Eso... valiente puta mierda de día- masculló cabreado.

* * *

9.- En la herrería

Colibrí sonrió ensoñadora. Le debía el apodo a su abuela y al gesto de batir los brazos arriba y abajo desde que tenía dos años. De su abuelo siempre evoca aquella tarde en la herrería. Mientas él manejaba aquel enorme fuelle para avivar el fuego, ella gritaba «a follar, a follar» sofocando a su madre. Acto seguido, metía las manos en el montón de bermellón, riendo.
—Mira mamá, estos polvos son los que echa el abuelo. Los hace con el manubrio.
Ni el zumo de mil pomelos habría arrancado semejante rictus en la cara de su madre
—Es cinabrio —corrigió él, divertido y paciente —. Pero recuerda que ya no se usa. Ahora son pigmentos.
—Mamá, ¿harás pimientos para cenar? —remató Colibrí.
Volvió a la realidad con una carcajada, imaginando a su abuelo con el último modelo de Satisfyer machacando los «polvos del manubrio» en su viejo almirez de bronce.

* * *

10.- Words (don’t come easy)

-Tengo el clítoris henchido cual pomelo. Y tan bermellón, que el simple aletear de un colibrí en sus inmediaciones me bastaría para alcanzar el clímax.

-¿Cómo dices, Antonia?

-Que estoy más caliente que una perra y que tengo el coño que me va a explotar, Manuel.

-Ay, hija, es que no te entendía. Hablas muy raro cuando nos ponemos a follar.

-Es la sangre, que se me va de la cabeza. Mmmm… ¡Raudo! ¡Aplica el satisfayer sobre mi tumefacta feminidad!

-¿Ein?

-¡Que me pongas el aparatejo ese en el toto! ¡YA!

* * *

11.- Vota Juan

Llamadme Juan. Forero durmiente, forero en la sombra, pero eso no importa. No dispongo de música épica de fondo, tampoco soy forero de grandes palabras y Dios no me ha dado la voz del doblador de Bruce Willis, pero eso tampoco importa.  

Creo en los microrrelatos y creo en su historia. Sé que no tengo derecho, pero... ¿Por qué pido vuestro voto? Por cinco razones, que en realidad son cinco momentos. Cinco semanas, cincos galas, cinco lecturas. Toda una historia por cinco palabras inconexas. Dime "colibrí" yo te daré dragones astures. Dime "pomelo" y yo te susurraré "neskismo". Si me pides "satisfyer" yo te digo que siempre será mejor "follar" o simplemente desear, como el Virginiano. Dime "bermellón" y te diré sangre, te diré "...abuelo. Y un cuchillo".

Estaban todos reunidos en la mesa cuando se dieron cuenta de que los microrrelatos deberían recuperar su esencia.

Vota Juan. Vota microrrelatos.

* * *

12.- Alex Remiro, the insatysfier

Hola, soy Álex Remiro, portero de primera división.
Soy de Cascante, pueblo que recibe su nombre de… ¡pues de qué va a ser!
El año pasado cambié el Athletic por la Real Sociedad, que es como dejar Apple para irte a Xiaomi, como abandonar Nueva York para vivir en Baltimore.
La Real me paga dos millones de euros, que es una pasta gansa. Son giputxis, hay que aprovecharlo. Je je.
En las fotos siempre salgo con gesto de intensito, parece que me esté comiendo un pomelo.
Mi especialidad son las anchoas, curioso siendo de interior. Las preparo bonitas: salgo a por uvas, no las veo de lejos,…
En el vestuario, Isak me llama el colibrí. ¡Malditos negros y cómo nos acomplejan!
Antes vestía de bermellón pero ahora de verde.
Me gusta el color verde.
También me gusta follar. Je je.
Bueno, amiguetes, espero que ahora me conozcáis un poco mejor.

* * *

13.- Jack y Morgan

—Morgan, he traído lo que necesitamos para tu madre.
—¿Dónde estabas, Jack?
—Vengo volando del futuro con la solución.
—¿Cómo que volando?, ¿qué eres?, ¿un jodido colibrí?
—En el futuro los coches vuelan joder, el Maserati ya no necesita... carreteras… esto tenemos que darle a tu madre, el satisfyer.
—¿Qué es eso?
—Un invento sexual, tu madre te quiere follar, le damos esto para que se distraiga mientras arreglamos lo de tu padre... que lo encuentre en su cama, que se lo frote bien hasta... hasta ponerse el tema bermellón... y luego…
—Jack, ¿te estas tocando, mamonazo?
—Perdona, es que me estaba imaginando cosas. Pero vamos al lío, ¿cómo va lo de tu padre?
—Ayer estuvimos practicando con un pomelo.
—Jajaja, ¿qué dices? Para esas cosas es mejor la tarta de manzana.
—¿En serio? No sabía…
—Venga, vámonos que a este paso no naces y tenemos que volvernos al futuro.

* * *

14.- Plug and play.

- "El pajarico colorao se la mete hasta la empuñadura a la pájara pinta en lo alto del árbol...". Rodríguez, ¿podría hacer el favor de explicarme qué puta mierda es esta?

- Lo que usted me pidió, el guión del segundo capítulo del documental Orinoco Salvaje.

- Y un cojón de mico, yo le pedí algo así como "el colibrí rutilante venezolano exhibe su plumaje bermellón y desarrolla su ritual de apareamiento sobre el exiguo pecíolo del árbol del pomelo..."

- Si es lo mismo.

- Lo mismo mis cojones, Rodríguez, mis santos cojones. También es lo mismo que usted esté aquí jodiéndome la vida y ganando 3000 al mes por follar con la hija del jefe, a que ella descubra que un satisfyer cumple, mejorando incluso su función, y sale más barato.

- Qué carácter, por favor.

- Váyase a tomar por el culo.

* * *

15.- Últimos espunerismos docentes

Pese a su trastorno disléxico leve, con aplicación y sacrificio, Arturo consiguió ser profesor de secundaria. Proyectaba compensar sus hilarantes confusiones con rigor y seriedad, pero nada pudo evitar su mote, “Trabuco”, ni los súbitos y habituales aguaceros de carcajadas. Todo iba bien ayer en Biología, hasta que su cerebro traicionero trocó dos letras. "Si no estudiáis, vais a follar todas", dijo. El timbre permitió a su rostro bermellón abandonar el aula y dejar atrás el jolgorio. "Jodidos críos", pensó. "No distinguen un pomelo de un colibrí, y se ríen así de tonterías". Le abordó fuera una de sus alumnas de 2º. “Arturo”, dijo con voz inocente, “Mañana me llegará el satisfyer”. Trabuco parpadeó. Una sonrisa beatífica iluminó su rostro incauto. “Qué alegría que no escuches sólo a esa Rosaura, y aprecies a los Rolling”. “Dooooble”, rugió el pasillo del instituto. Tres horas después, explicaba al Inspector el asesinorio.

* * *

16.- Otra copa

El punzante sol de mediodía tras la cortina me hace entornar los ojos. Alargo la mano a tientas desde la cama derramando el vaso de pomelo con vodka que dejé anoche sobre la mesilla. Bragas viejas y bata, camino del baño paro en la terraza. Se escucha un colibrí, nada extraño en esta época, con los cafetos ya colmados de drupas de característico color bermellón. Me asomo, huele a banano y tierra húmeda. Recuerdo cuando de novios solía traer aquí a Martín, «a pasear a caballo en el cafetal», le decía yo siempre a papá, aunque él sabía que en realidad veníamos a follar. Pero le caía bien. De hecho, lo acabó dejando a cargo de la plantación. Martín volverá esta tarde. Otro viaje de negocios. Recojo el Satisfyer entre los pliegues de la sobrecama y lo guardo en el cajón, limpio la mesilla y me preparo otra copa.

* * *

17.- Una sociedad perfecta para los seres humanos

Manna Aden se despertó, contemplo por la ventana sus extensos jardines llenos de flores color bermellón, y múltiples aves entre las que destacaban los colibríes. Se dispuso a desayunar zumo de pomelo, leche de cabra y huevos revueltos. Y una vez satisfecha su hambre fue a su habitación, cogió su Satisfyer y se tumbó en la cama. Usarlo era indudablemente un placer, pero siempre sentía que algo faltaba. A pesar de las continuas evoluciones que había tenido el aparato entre el siglo XXI y el siglo XXIX, jamás había conseguido emular las verdaderas sensaciones que se tenían al follar con un ser humano de verdad. Era el precio a pagar por la sociedad perfecta que había creado. Un mundo completo solo para diez mil seres humanos. La reproducción natural, e incluso el más mínimo contacto estaban prohibidos. Pero era inevitable si querían seguir teniendo ese control de natalidad tan exhaustivo.

* * *

18.- Cómo deshacerse de un gilipollas, parte 1

—Mira, Agustín, yo creo que todas las tías son unas mal folladas... No me jodas, ahora van diciendo que se corren mejor con el Satisfyer ese que con un buen pollón.
—¿El satisfyer? Pues a mí me parece un gran invento, mi mujer tiene uno y no pongo en duda mi hombría. Entiendo que su placer es tan importante como el mío.
—Pero vamos a ver...
—¿El té negro de mango y pomelo? —La camarera interrumpió la acalorada conversación.
—Para mí —respondió Agustín.
El tono bermellón del rostro de su amigo auguraba la explosión.
—Es que estáis hechos unos maricones. Tú con el té de frutas, Paco que se ha tatuado un colibrí en el hombro... Iros a tomar por culo, hombre ya.
—José Javier, cállate ya. Tu masculinidad tóxica no nos gusta una mierda, eres un machista insoportable, no te quiere nadie y estamos hasta los cojones de ti.

* * *

19.- Fotomatonimia

Follar no es lo que más me gusta hacer con Diego. Es por eso que estoy aquí, esperando al ferrocarril. Mi equipaje —un insistente y amargo aleteo— no hace otra cosa que subrayar en rojo mi cobardía. Por otra parte, sé que en el futuro querré viajar a este día y no quiero ser yo la fotógrafa: he buscado un fotomatón. La cabina es estrecha e impúdica, y su espejo ha sido vandalizado con dibujos guarros y palabras malsonantes. Apenas veo mi rostro entre los gruesos trazos del “SATYSFIER!” que escribieron a gritos, pero me basta y es suficiente. Oculta tras el cristal, la máquina trabaja, puedo escucharla; un flash, el suelo oscuro y pasos de transeúntes. Al salir, bajo la coraza de hierro forjado, espero mis fotografías. Antes de guardarlas quisiera mirarlas; en una yo, un colibrí en otra, sigue un pomelo, y la última... solo es color. Bermellón.

* * *

20.- Otra noche más

No me hace falta encender la luz de la mesita porque, a través de las cortinas se cuela la luz de un rótulo parpadeante que tiñe las paredes de color bermellón. Los últimos clientes del Satisfyer se enfrentan a un solitario camino de regreso, con gestos torcidos como aquejados de un reflujo de pomelo.

Zumbidos de aparatos eléctricos y farolas terminales interfieren cuando cierro los ojos e intento formar una imagen de tu cuerpo en mi cabeza: aunque me toque, no sirve de nada. Así que te aparto e imagino colibríes revoloteando, campos abiertos, vida. Pero la noche huele a meados y la ventana está demasiado cerca de la calle.

Me aferro al paso del tiempo. Un minuto menos. Una hora. Un día. Cuando vengas descansaré por fin. Mientras follamos me da igual dónde estoy o si llega o no la mañana siguiente. Cuando estés aquí saldrá el sol.

* * *

21.- Noches de bohemia y de ilusión

Pongo 'Tengo un Colibrí' de Calcetines y Cachetes en el reproductor. De las conversaciones en la barra una capta mi interés.

-La polémica alrededor del Satisfyer es sin duda estéril. Una más en la que machitos viriles solo muestran su temor a ser reemplazados por una máquina en esto del follar. ¡Pero si todos vamos a ser sustituidos por una máquina! La civilización se ha vuelto gilipollas, es innegable.

Unos 50 años. Pinta de bohemio y usa sandalias. Dos hostias le daba, pero su partenaire me guiña el ojo sin cesar. Así que sigo emborrachándole. Ella me sonríe.

-Rubia, guapa, déjate llevar. ¿Sabes un pomelo así bien bermellón? Así te voy a dejar.

Joder con el bohemio. Cinco copas más y es un baboso. Ella me da su número, pero yo esta noche remato a lo grande. Dos hostias, popper y Orgía en el Doner Kebab.

* * *

22.- El coleccionista

Comenzaba a anochecer y aún no había reunido las monedas necesarias 
para comprarle a Salakov un puñado de palabras. El escurridizo búlgaro abandonaría su esquina en pocos minutos, quizás accediera a fiarme. El muy canalla ya enfilaba el oscuro callejón y tuve que emplearme a fondo para abordarle. En el momento del intercambio un potente foco nos intimidó y el búlgaro me empujó antes de echar a correr. Las cinco cajitas cayeron al suelo esparciendo las letras sobre la acera. De forma atropellada las recogí y las introduje desordenadamente en las cajas al tiempo que escapaba. Alcancé mi escondrijo sin sentir el acecho y mi excitación se acrecentó al sacar de mis bolsillos las cajas, una de las letras había quedado adherida a mi mano. Solo esperaba encontrar un maremagnun de letras sin sentido alguno y procedí a interpretar el contenido: floral berilo embolicar empollón y fresitas

* * *

Lo sabía.

Búho Lunático, mira lo que están haciendo con tu creación.

Me parece que los foreros vascos partimos con una clara desventaja esta ronda.

Stoneheart escribió:Lo sabía.

Búho Lunático, mira lo que están haciendo con tu creación.

Lamentable.......mira que tenéis una frase buena que salió de tu relato.....pero no......esta.mierda.
m

Las palabras las habéis elegido vosotros. Menudo potorro.

La verdad es que ha quedado difícil la cosa.

salakov escribió:Las palabras las habéis elegido vosotros. Menudo potorro.

La verdad es que ha quedado difícil la cosa.

La frase la pones tu....bueno....ya ni eso....
Lamentable....
Dimision.....
Administracion NO administrable.
m

FdC

¡Vaya tela!

Cuando el colibrí acabó con el Satisfyer y empezamos a follar, se le hinchó tanto la cabeza que parecía un pomelo de color bermellón.

m señor escribió:

salakov escribió:Las palabras las habéis elegido vosotros. Menudo potorro.

La verdad es que ha quedado difícil la cosa.

La frase la pones tu....bueno....ya ni eso....
Lamentable....
Dimision.....
Administracion NO administrable.
m

¡Administración lamentable!

salakov escribió:Las palabras las habéis elegido vosotros. Menudo potorro.

La verdad es que ha quedado difícil la cosa.

Pretende haber consultado a las bases , y así no tiene responsabilidad.

Mirad el lado bueno: tendrá cojones que alguien escriba un relato de psicópatas con esta "selección".

follar, qué soez.

salakov escribió:


El relato deberá incluir, en cualquier orden, las 5 palabras propuestas: Colibrí / Pomelo / Satisfyer / Follar / Bermellón

estas son las palabras del concurso de abogados ese? joder, que puto espíritu navideño más troll...

Salir de la zona de confort da miedo, al principio abruma.

¡Fuerza, Sugus!

Sugar Bug escribió:

salakov escribió:


El relato deberá incluir, en cualquier orden, las 5 palabras propuestas: Colibrí / Pomelo / Satisfyer / Follar / Bermellón

estas son las palabras del concurso de abogados ese? joder, que puto espíritu navideño más troll...

Es el mismo planteamiento, pero suelen poner palabras más políticamente correctas Sala no lo va a poder aprovechar

salakov escribió:Mirad el lado bueno: tendrá cojones que alguien escriba un relato de psicópatas con esta "selección".

Pues yo lo veo fácil. Bermellón, color de la sangre. Chupado.

salakov escribió:Mirad el lado bueno: tendrá cojones que alguien escriba un relato de psicópatas con esta "selección".

Lo habrá. No lo dudes.

Autista escribió:Me parece que los foreros vascos partimos con una clara desventaja esta ronda.

Escribamos de oídas.

Esmeralda escribió:

salakov escribió:Mirad el lado bueno: tendrá cojones que alguien escriba un relato de psicópatas con esta "selección".

Pues yo lo veo fácil. Bermellón, color de la sangre. Chupado.

y lamido también...

esta ronda se me antoja de entrada mucho más interesante que la anterior...

Sugar Bug escribió:

Hank escribió:

Esmeralda escribió:

salakov escribió:Mirad el lado bueno: tendrá cojones que alguien escriba un relato de psicópatas con esta "selección".

Pues yo lo veo fácil. Bermellón, color de la sangre. Chupado.

y lamido también...

jajaja

Para mí también es difícil, ¿eh?

Y no lloro tanto.

Stoneheart escribió:

Spoiler:

Búho Lunático, mira lo que están haciendo con tu creación.

salakov escribió:Mirad el lado bueno: tendrá cojones que alguien escriba un relato de psicópatas con esta "selección".

No veo tan complicado acabar escribiendo un micro en el que sea asesinado un tal salakov...

Sugar Bug escribió:

Hank escribió:

Esmeralda escribió:

salakov escribió:Mirad el lado bueno: tendrá cojones que alguien escriba un relato de psicópatas con esta "selección".

Pues yo lo veo fácil. Bermellón, color de la sangre. Chupado.

y lamido también...

Y si no también digo yo.

Tfdc:

Spoiler:

Spoiler:

salakov escribió:Para mí también es difícil, ¿eh?

Y no lloro tanto.

a darle al coco...

Joder... si nos ha traido el concurso de los abogados....

Voy a preparar actualizando las cabeceras y las traigo

Stoneheart escribió:

+ Millones

difícil esta ronda, no se me ocurre nada... y eso que me gusta enviar rápido...

Me gusta, me gusta. Y con colibrí tengo clarísimo por donde tirar. El resto no es difícil.

Y así obligamos a salakov a escribir. Win win de manual.

El abuelo.

El zumo de pomelo le caía por la barba blanca. El viejo Colibrí, el abuelo de Julia, disfrutaba del sol de media mañana mientras la oía follar en la distancia. Le gustaba oírla disfrutar de la vida. Lo que no le gustaba era el zumbido de colibrí del satisfyer con el que se masturbaba desde que mató a Eduardo, el hijo del Bermellón, con el cuchillo de degollar cerdos.

Tío Pete escribió:Me gusta, me gusta. Y con colibrí tengo clarísimo por donde tirar. El resto no es difícil.

Y así obligamos a salakov a escribir. Win win de manual.

por cierto, Pete, gracias x tus dos puntos, me alegra saber que alguien apreció mi relato...

Cabeceras actualizadas!!

Aunque no sabía si incluir las reglas o no vistos los derroteros

Reglas:

REGISTRO HISTÓRICO:

ACTAS DE ESTA EDICION, HASTA LA GALA ACTUAL:

CLASIFICACIÓN V EDICIÓN:

FdC

Fui complicado extraer el colibrí muerto, el satisfyer y el pomelo de aquel diminuto coño, la pobre apenas sabía de follar, por ello toda la zona era bermellón puro...

Duda tonta:

Follar tiene que ir en infinitivo?

Toro escribió:Duda tonta:

Follar tiene que ir en infinitivo?

No, se acepta cualquier tiempo verbal.

Para los baskos se sugiere el condicional, "follaría", o el subjuntivo, "follase".

Toro escribió:Duda tonta:

Follar tiene que ir en infinitivo?

en según que casos en futuro.

«Hubiere follado» debería dar punto extra

Sugar Bug escribió:

Toro escribió:Duda tonta:

Follar tiene que ir en infinitivo?

en según que casos en futuro.

futuro condicional: si no fuera Vasco, follaría

Esmeralda escribió:

Sugar Bug escribió:

Toro escribió:Duda tonta:

Follar tiene que ir en infinitivo?

en según que casos en futuro.

futuro condicional: si no fuera Vasco, follaría

si follara, no siriese vascuence.

Sugar Bug escribió:

Esmeralda escribió:

Sugar Bug escribió:

Toro escribió:Duda tonta:

Follar tiene que ir en infinitivo?

en según que casos en futuro.

futuro condicional: si no fuera Vasco, follaría

si follara, no siriese vascuence.

Vascongádico, por favor

Follar, tal vez soñar

que es poesía , me preguntas mientras clavas tu pupila en mis tetas, so guarro degenerado? poesái no sé, pero follar es lo que no vas a hacer hoy, iñaki!

A ver que se me ocurre de aquí al fin de semana, que adelanto el puente de diciembre para irme a Tenerife y veo que no me da tiempo a enviar nada

Aguardo vuestros chucruts.

Autista escribió:Me parece que los foreros vascos partimos con una clara desventaja esta ronda.

No sé

Aquí los relatos sci-fi, las distopías, las ucronías y los relatos autobiográficos funcionan muy bien

Combinarlo todo es caballo ganador

quakto escribió:A ver que se me ocurre de aquí al fin de semana, que adelanto el puente de diciembre para irme a Tenerife y veo que no me da tiempo a enviar nada

Si quieres consejos ...