RONDA 18 DE LA 7ª EDICIÓN DEL ESMERALDADO CONCURSO DE MICRORRELATOS. VOTACIONES CERRADAS. GALA A LAS...

Vinny Vedecci escribió:1. Bar Pentagonal

Cinco tipos entran en un bar cuyo interior es pentagonal. Cada uno se coloca en uno de los ángulos, pues lo tienen todo estudiado. Alejandro ve desde su sitio la barra. Braulio tiene la visión de la puerta de los aseos sentado en su taburete. Carlos visiona la puerta principal. Diego controla el escenario del karaoke y la gramola desde su posición. Emilio no le quita el ojo a las máquinas tragaperras desde el sofá en el que se toma su tónica.

Los relojes marcan las 16:52. Todo está planeado para que a las 17:00 se ponga en marcha el plan que tantos años han estado elaborando. La señal será un clásico del bar: cuando Esmeralda suba a las cinco en punto de la tarde a cantar "Caperucita Feroz", será entonces cuando... ¡Mierda, no sé cómo (cojones) acabarlo! Espero que al menos m me dé puntos...

Vinny Vedecci escribió:2. Mucho carbón

Cinco tipos entran en un bar y piden unos sándwiches.
—Lo siento, acabo de limpiar la plancha.
Piden unos cafés.
—Lo siento, acabo de apagar la máquina.
Cinco tipos salen de un bar.
Cinco tipos entran en un banco para pagar unos recibos.
—Lo siento, solo se pueden pagar recibos antes de las 10:30.
Cinco tipos salen de un banco.
Cinco tipos entran en una sede de Administración Pública para realizar una gestión.
—Lo siento, la ventanilla está cerrada. Vuelvan ustedes mañana o prueben online.
Cinco tipos salen de una sede de Administración Pública.
Cinco tipos entran en internet.
»Para proceder, introduzca su certificado electrónico.
Cinco tipos se miran los unos a los otros.
—¿Tenéis de eso, chicos? —pregunta Claus a tres de ellos.
—No, y ni idea de qué es. ¿Tú tienes, Olentz?
—Ni flores.
Cinco tipos deciden que mucho cabrón se va a quedar sin regalo este año.

Vinny Vedecci escribió:3. Pelicula experimental de la Prefectura de Osaka, Japón.

Cinco tipos entran en un bar, cuatro cruzan la despensa, tres bajan al sótano, dos a la bodega y solo yo cruzo las zamburguesas.

Vinny Vedecci escribió:4. Bar Bélico

Cinco tipos entran en un bar y el primero va disparado al baño, se está cagando, tras un terrible ataque la vida se le va patas abajo.
De los cuatro restantes, el oriental se lanza cual kamikaze sobre la tragaperras y lucha con su visión horizontal contra frutas y monedas, dispuesto a vencer a la máquina o hacerse el harakiri.
De los tres restantes, los dos cuñados se enfrentan en una encarnizada discusión política, atrincherándose cada uno en un extremo, con mucha tierra por medio, lanzándose proyectiles cada vez más dañinos.
El tipo restante duda entre pedir de tapa croquetas o ensaladilla, ambas posibles devastadoras armas químicas, aunque más apetecibles que el rancho.
Finalmente elige mal, convirtiéndose en el primer tipo que entra disparado al baño en el siguiente bar. Le seguirán otros cuatro, pero esa, amiguitos, es otra historia. Y esa mola más, porque sucede en el Bar Pacífico.

Vinny Vedecci escribió:5. Dando fe tomando café

Cinco tipos entran en un bar de carretera, cinco desconocidos citados por el mismo notario, cinco cartas con instrucciones precisas para acudir solos y discretamente. Como incentivo, la promesa de recibir relevantes noticias de alguien cercano. Todos barruntan herencia o similar.
En la mesa sombría del fondo, el notario les plantea la cuestión:
-Necesito saber quién de ustedes ha mantenido relaciones íntimas con la señora de esta fotografía, para poder iniciar los trámites de donación que nos ocupan. Debe retirarse quien no haya consumado con ella.
Levanta acta y una ceja el notario cuando ve que no abandona nadie, ni el profesor de yoga, ni el de inglés, ni el bibliotecario, ni el psicólogo, ni siquiera el sacerdote.
Devuelve la foto a su cartera, junto a la de sus hijos. Deberá ser precisa la donación que reparta con su revólver, una bala para cada amante; así, aún le quedará otra.

Vinny Vedecci escribió:6. Esta noche no triunfamos

Cinco tipos entran en un bar, con toda la pinta de los que te encuentras en todos los bares de este barrio hípster: treintaypocos, barba, pelo desaliñado, ropa vintage... Parecen muy extrañados, se les ve desorientados, como si hubiera algo que no entendieran. Inmediatamente, el que sin duda es el líder del grupo se dirige al camarero:

-Oye, disculpa, esto está muy muerto, ¿no?
-¿Qué quieres decir?
-Bueno, vine varias veces el año pasado y el local siempre me lo encontraba petado, con ambientazo, y hoy apenas somos seis o siete.
-Sí, bueno, con esto de la pandemia, pese a que tenemos mucha libertad para abrir los bares, la gente está recelosa y se queda en casa mucho más que antes. Esperemos que no tarde en volver la normalidad de antes.
-Esperemos.

Vuelve con sus amigos y, tras intercambiar unas palabras, se marchan del bar.
-Vámonos, hermanos, seguro que las 72 huríes podrán esperar un año.

Vinny Vedecci escribió:7. Bar Pentagrama

Cinco tipos entran en un bar cuyo interior es pentagonal. Les conoces, son los mismos del relato número uno. El plan es desvalijar la máquina tragaperras alimentada por un chino desde tiempos inmemoriales. Emilio vigila cuando Diego ve subir a alguien al karaoke. Son las 17:00 h. A Alejandro le sudan las manos, Braulio mueve nervioso su pierna. Entonces Esmeralda empieza a cantar: «Hola mi amor, soy yo tu lobo». Es la señal convenida, pero no pueden moverse. La voz celestial de Esmeralda ha abierto un vórtice en medio del bar. Acontece su canto un salmo de querubines, de su boca sale el sonido de sirena que enloqueció a Ulises. Carlos escucha embelesado mientras el pentágono torna en pentagrama invertido. Todo fue una trampa, el suelo es ahora un torbellino que los engulle voraz. Se creían lobos, pero eran caperucitas. El polvo se deshace y sobre la superficie sólo queda una máquina tragaperras. Y un chino.

Vinny Vedecci escribió:8. Cuatro tipos airados y uno medio tonto

Cinco tipos entran en un bar. Su aspecto resulta familiar aunque pocos recuerdan sus nombres. Cuando el mesero se acerca a tomarles nota, empiezan los problemas.

—¿Tinta negra para todos?
—Tan soso como siempre, Arial. Jengibre Brillante para mí.
—Helvética, ¿nunca dejas tus diseños de mierda?
—Old English, maldito carcamal, tendríamos que haberte dejado en algún diploma apolillado.
—Oiga, yo tomaré un Azul Pavo Real bien cargado.
—Madre mía, Garamond, creo con tus serifas ya pareces suficientemente... maricón.
—¡Bastardilla!
—¿Os sabéis el chiste del tipo que entra en un bar, pide un ron y el camarero le pregunta cuál y él responde... pero si ya se lo dije... Negrita? ¿Os lo había contado? No me miréis así... yo sólo quería relajar el ambiente y...

En ese momento, el camarero decide volver resignado tras la barra mientras todos se abalanzan sobre Comic en una lluvia de asteriscos, almohadillas y caracteres especiales.

Vinny Vedecci escribió:9. Chillones

Cinco tipos entran en un bar cantando a gritos ante la mirada del enfurruñado tabernero, que no tiene ganas de problemas. Para su sorpresa, el resto de parroquianos se les une, desgañitándose entre berridos desafinados. Pronto, el dueño del antro se suma al grotesco coro, y salen todos a la calle atronando a cuantos transeúntes se cruzan en su camino. Cada vez más peatones engrosan las filas del improvisado orfeón, e incluso muchos conductores que al principio protestaban a bocinazos acaban abandonando sus vehículos para formar parte del desfile improvisado. Ya anochece, y en toda la ciudad retumba el estruendo de un ejército de vocingleros desatados. La fiebre de los chillones se va extendiendo a las poblaciones vecinas, y en un par de días en el mundo entero resuena una cacofonía aberrante.
Para entonces los cinco tipos ya descansan en sus casas. Duermen plácidamente, con tapones en los oídos y una sonrisa de oreja a oreja.

Vinny Vedecci escribió:10. Pendrágono

Cinco tipos entran en un bar como despistados, levantando mis sospechas. Decido seguirles. Su comportamiento continúa errático. Desde la barra apunto al primero con el DharmaWatch confirmando mis dudas: Viññana. Identifico el orden del resto; Sankhara, Sañña, Vedana y Rupa, el cuerpo, a quien me aproximo. Debe ser el primero. Lentamente saco del tahalí el estilete de Damasco. Lleva enhebrado el hilo zirconiano.
Vertiginosamente giro a Rupa por el hombro ensartando el estilete por su ombligo para atravesar su abdomen, y tomándolo con la otra mano para repetirlo con los demás. Dispongo rápidamente en posición pendragonal a todos engarzados para su prensado sobre el hilo. El potente golpe sobre el sacro emite un destello cegador.
El resultado; un único tipo en el suelo retomando la consciencia.
—Otros cinco agregados reagrupados —comento al petrificado barman—, cinco días ganados para mi Bardo Dharmata —sentencio henchido. El pobre ignora haber visto al mejor CazaKhandhas de todos los tiempos.

Vinny Vedecci escribió:11. Bar Pentotal

Cinco tipos entran en un bar cuyo interior es pentagonal. Romario, el primero de todos, la choca con el camarero mediante un saludo secreto que sólo ellos conocen. Tras él, Ronaldinho se ha quedado en el hall bebiéndose el agua del florero. «Deja algo», le solicita Paul Gascoigne al mismo tiempo que Asier del Horno camina con paso firme hacia la barra para pedir un kalimotxo. «Sin licor de mora, que no somos maricones», especifica. Pero falta el quinto. Con andares de dios egipcio y flequillo rubio impoluto, Guti hace su aparición en el bar. «¡Qué passssa!», golpea con confianza la espalda del chino que mata el tiempo jugando a las tragaperras. Pero eso molesta al chino, que entrecierra los ojos (más). Son las 16:43 h. y el bar enfurecido engulle a los futbolistas como voraz boca de Sarlacc. En segundos, todo vuelve a estar como al principio. A lo lejos, se acercan Alejandro, Braulio, Carlos, Diego y Emilio…

Vinny Vedecci escribió:12. Desvaríos de pagafantas

Cinco tipos entran en un bar. Lettera Lovers, parpadeaba el neón rojo. Tras la transmutación, descubren que les han correspondido las letras QUESO. Q comienza a rezongar:

-      Ya os decía yo que yendo juntos íbamos jodidos.

-      Pero si hay miles de palabras de cinco letras,  te podía tocar yendo tres, irá mejor que cuando te tocó Z – murmuró S, colocándose el tupé en el espejo.

-      Ahora ligaréis todos, menos yo, como siempre - seguía gimiendo la Q.- A vosotros os vale cualquiera. No me dejéis solo, somos colegas.

Había muchas A, L y R, como siempre. U encontró una T guapísima, S se enroscó a una E. Q seguía rezongando cuando tropezó con alguien. Se volvió. Era una U.

-      Hola, encantada. Esta es mi amiga I. Qué rabito más mono, por favor. ¿Bebéis algo? ¿Tus amigos?

-      ¿Qué amigos?

Vinny Vedecci escribió:13. El encantamiento bajo el mar

Cinco tipos entran en un bar apurando una colilla que pisotea el último. Los cinco son corpulentos y van vestidos igual, un traje azul claro.
Sentados junto a la ventana del bar esperan café.
—¿Recordamos el repertorio, verdad? —preguntó el saxofonista.
—Tommy, tenemos diez temas, siempre es el mismo, tranquilo —contestó Danny, el bajo.
—¿Y si probáramos terminar con alguna versión? Algo más animado. "Earth Angel" es nuestro mayor éxito tenemos que tocarlo y así tienen su momento beso los chavales, pero hacer después una despedida más alegre —anotó Reginald, el batería.
—Me parece buena idea. ”Mr. Sandman” la he practicado y no es difícil ¿Qué te parece Marvin?... ¿Marvin?... ¡Ey, Marvin!
Lloyd zarandeó al líder de la banda, absorto mirando la ventana.
—Lo siento, no estoy centrado. Creo que será el último concierto de los Starlighters, el primo Chuck me ha ofrecido acompañarle de gira este verano, y creo que su trayectoria tiene mucho futuro.

Vinny Vedecci escribió:14. Chupito amargo

Cinco tipos entran en un bar de un polígono cualquiera. Acercan varias banquetas y se sientan junto a la barra mirando al frente. El espejo devuelve un puñado de rostros derrotados. El camarero, un chaval de brazo tatuado y camiseta de tiras, comienza a prepararles lo de siempre, pero el más veterano le hace una seña con índice y pulgar. Hoy solo chupito. El murmullo de fondo del telediario habla sobre ellos. Apenas quince segundos de la noticia del ERTE, pronto enterrada bajo conmovedoras imágenes de un león marino rescatado en un tejado de Nueva Zelanda tras una tormenta. Un parroquiano que lee el periódico en una mesa del rincón se levanta, coge el mando para apagar la tele, y el tabernero pone música. Mientras suena Wonderful Tonight de Clapton el viejo currela echa mano a la cartera en el bolsillo de sus ajados pantalones de taller, pero el chico le detiene. Hoy invita la casa.

Vinny Vedecci escribió:15. Literatura y exilio

Cinco tipos entran en un bar
Los tres son los grandes poetas de Chile
Nicanor Parra y Roberto Bolaño.

Vinny Vedecci escribió:16. Barman

Cinco tipos entran en un bar de forma atropellada. Parecen estar borrachos. Mientras uno se acerca a la barra, los demás desenfundan sus penes enhiestos apuntando en todas direcciones.
—Esdo es un adraco, buchacho —dice el primero al atónito barman—. Danos dodas dus vaginassssssss.
El barman abre los brazos con desespero, baja la mirada a su entrepierna y hace la maniobra. Una especie de AK-47 aparece entre sus piernas flacuchas.
—Todos fuera —grita haciendo un barrido con su enorme artefacto—. A la puta calle.
Los borrachos hacen mutis y abandonan el local heridos en su orgullo. ¡Qué desilusión!
Doña Magdalena se acerca a la barra con parsimonia, apoya la taza de café vacía en la barra y suspira.
—Otro cafetito con leche, Santos. ¡Qué nervios!
—Marchando. ¿Quiere otra magdalena, doña…? —y calla por no parecer redundante.
—¿Y por qué no un churrito, Santos? Empiezo a echar de menos la guerra.

Vinny Vedecci escribió:17. 4 cuñados y un funeral

Cinco tipos entran en un bar:
—Hay muchos camiones aparcados en el parking, seguro que aquí tienen un menú cojonudo —dice Santi.
—Chata, ve poniendo unas cañas. A ver cómo lo haces… Uy, no, mejor déjame a mí que le dé al tirador que tú no tienes ni idea —explica Jorge a la camarera.
—Ya he cogido las entradas para el recital de Bertín. Me las ha pasado un contacto a la mitad del precio de taquilla —cuenta Iván a los demás.
—Joder, me parece que aquí los camareros son sudacas, putos inmigrantes que vienen a quitarnos el trabajo —manifiesta Javier.
—Bueno, hombre, no criminalicemos a los extranjeros, la mayoría es gente trabajadora que viene buscando prosperar y buscar nuevas oportunidades —comenta Iñigo.
Los otros cuatro ponen cara de incredulidad. Santi se acerca a Javier y le dice al oído:
—Vaya tolili el nuevo del curro, al salir le damos unas hostias para que espabile.

Vinny Vedecci escribió:18. Cinco vidas

Cinco tipos entran en un bar, cinco pares de brazos y cinco pares de piernas cosidos por una misma levita, que es del mismo tono que el carbón. Son cinco cabezas repartidas alrededor del único cuello, a la manera de un verticilo, que se alternan para ordenar el menú diario. Atestigua el mozo que sirven las mesas, que antes de formar ese escarabajo de ciudad, esa suerte de araña civilizada, los cinco tipos eran en realidad uno solo. “Debe ser muy cansado ser uno mismo todo el rato. Uno acaba por aburrirse. Uno se inventa otras vidas, pero al final... supongo que solo se puede ser uno mismo, ¿no?".

Vinny Vedecci escribió:19. Tipos duros

Cinco tipos entran en un bar para discernir quién aguanta más bebiendo. A Comic le piden el carné, siempre ha tenido una pinta infantil insoportable, bobalicona. Chicago cree siempre que tiene las de ganar y Courier está decidida a plantar batalla, al fin y al cabo es mucho más vieja que cualquiera. Bodoni ha perdido la paciencia, en contra de su comportamiento habitual tan anodido, tan invisible. Wingdings no deja de hablar, pero a este tipo no se le ha entendido nunca.

Ninguno de los cinco cuenta con las malas pulgas del camarero, que barruntaba jaleo: Hoy solo tengo disponibles chupitos de AltF4, idos todos a casa.

Vinny Vedecci escribió:20. Eterno retorno

Cinco tipos entran en un bar. El primero en pedir es el adolescente con tejanos rotos:

—Un cubalitro, anda. Si por ti fuera —dice al niño, a su lado—, estaría matándome a estudiar con un vaso de leche para tenerlos contentos…

Sin dejarlo acabar, el de treinta y tantos le da un capón:

—...y en cambio te pasarás años discutiendo con ellos mientras el mundo sigue girando. ¡Vaya rebelde estás hecho! Yo quiero una cerveza de barril. Y unas aceitunas…

—...y un mayordomo y una azafata —se burla el de la barba y las canas incipientes—: lo quieres todo y harás lo que sea por conseguirlo. Aunque te quedes solo por el camino, ¿no? Ponme un café, que vengo del INEM y…

—¿Qué café ni qué…? Ponle un gintonic —dice el abuelo. Yo, nada. Somos todos gilipollas. Y no, —mira al niño— no podemos remediarlo. ¿Quieres una Coca Cola?

Vinny Vedecci escribió:21. Granizo

Cinco tipos entran en un bar haciendo la conga. Pronto todo el local se suma al festejo, cantando y riendo, y nos quedamos arrinconados contra la barra.
-¿Salimos de aquí? -me dice, por encima del ruido.
-Vale.
Fuera hace frío. Eso no es nada, dice, y me habla de sus años de estudiante en Rusia, a -45 grados, cuando el peligro era quedarse dormido esperando el bus.
-Pues esto para mí ya es bastante -le digo.
-Pues nos vamos. ¿Vives lejos? Te acerco a casa.
¿Me fío?
Venga, me fío. El viento se me cuela por el abrigo mientras volamos en la moto. Me agarro a él lo justo, ni mucho ni poco. Empieza a granizar, caen piedras grandes como uvas. Yo me río, miro hacia el cielo que se abre sobre nosotros. Para, para, grito, que es aquí.
¿Le invito a casa?
-Bueno, ya nos veremos…
Está lloviendo mucho ahora, digo, ¿te apetece subir?

Autista escribió:

Autista escribió:

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:1. Bar Pentagonal

Cinco tipos entran en un bar cuyo interior es pentagonal. Cada uno se coloca en uno de los ángulos, pues lo tienen todo estudiado. Alejandro ve desde su sitio la barra. Braulio tiene la visión de la puerta de los aseos sentado en su taburete. Carlos visiona la puerta principal. Diego controla el escenario del karaoke y la gramola desde su posición. Emilio no le quita el ojo a las máquinas tragaperras desde el sofá en el que se toma su tónica.

Los relojes marcan las 16:52. Todo está planeado para que a las 17:00 se ponga en marcha el plan que tantos años han estado elaborando. La señal será un clásico del bar: cuando Esmeralda suba a las cinco en punto de la tarde a cantar "Caperucita Feroz", será entonces cuando... ¡Mierda, no sé cómo (cojones) acabarlo! Espero que al menos m me dé puntos...

¿Soy el único que se ha dado cuenta de que los personajes son A, B, C, D y E? ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:2. Mucho carbón

Cinco tipos entran en un bar y piden unos sándwiches.
—Lo siento, acabo de limpiar la plancha.
Piden unos cafés.
—Lo siento, acabo de apagar la máquina.
Cinco tipos salen de un bar.
Cinco tipos entran en un banco para pagar unos recibos.
—Lo siento, solo se pueden pagar recibos antes de las 10:30.
Cinco tipos salen de un banco.
Cinco tipos entran en una sede de Administración Pública para realizar una gestión.
—Lo siento, la ventanilla está cerrada. Vuelvan ustedes mañana o prueben online.
Cinco tipos salen de una sede de Administración Pública.
Cinco tipos entran en internet.
»Para proceder, introduzca su certificado electrónico.
Cinco tipos se miran los unos a los otros.
—¿Tenéis de eso, chicos? —pregunta Claus a tres de ellos.
—No, y ni idea de qué es. ¿Tú tienes, Olentz?
—Ni flores.
Cinco tipos deciden que mucho cabrón se va a quedar sin regalo este año.

La última frase debería de haber hecho el juego de palabras entre cabrón y carbón. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:3. Pelicula experimental de la Prefectura de Osaka, Japón.

Cinco tipos entran en un bar, cuatro cruzan la despensa, tres bajan al sótano, dos a la bodega y solo yo cruzo las zamburguesas.

Han sido asesinados o abosrbidos a otra dimensión, me dejan con la duda. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:4. Bar Bélico

Cinco tipos entran en un bar y el primero va disparado al baño, se está cagando, tras un terrible ataque la vida se le va patas abajo.
De los cuatro restantes, el oriental se lanza cual kamikaze sobre la tragaperras y lucha con su visión horizontal contra frutas y monedas, dispuesto a vencer a la máquina o hacerse el harakiri.
De los tres restantes, los dos cuñados se enfrentan en una encarnizada discusión política, atrincherándose cada uno en un extremo, con mucha tierra por medio, lanzándose proyectiles cada vez más dañinos.
El tipo restante duda entre pedir de tapa croquetas o ensaladilla, ambas posibles devastadoras armas químicas, aunque más apetecibles que el rancho.
Finalmente elige mal, convirtiéndose en el primer tipo que entra disparado al baño en el siguiente bar. Le seguirán otros cuatro, pero esa, amiguitos, es otra historia. Y esa mola más, porque sucede en el Bar Pacífico.

La duda para la comida debería de haber sido entre croquetas o garbanzos con espinacas, que esas sí son auténticas armas químicas. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:5. Dando fe tomando café

Cinco tipos entran en un bar de carretera, cinco desconocidos citados por el mismo notario, cinco cartas con instrucciones precisas para acudir solos y discretamente. Como incentivo, la promesa de recibir relevantes noticias de alguien cercano. Todos barruntan herencia o similar.
En la mesa sombría del fondo, el notario les plantea la cuestión:
-Necesito saber quién de ustedes ha mantenido relaciones íntimas con la señora de esta fotografía, para poder iniciar los trámites de donación que nos ocupan. Debe retirarse quien no haya consumado con ella.
Levanta acta y una ceja el notario cuando ve que no abandona nadie, ni el profesor de yoga, ni el de inglés, ni el bibliotecario, ni el psicólogo, ni siquiera el sacerdote.
Devuelve la foto a su cartera, junto a la de sus hijos. Deberá ser precisa la donación que reparta con su revólver, una bala para cada amante; así, aún le quedará otra.

Todos sabemos que los sacerdotes tienen otras inclinaciones sexuales. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:6. Esta noche no triunfamos

Cinco tipos entran en un bar, con toda la pinta de los que te encuentras en todos los bares de este barrio hípster: treintaypocos, barba, pelo desaliñado, ropa vintage... Parecen muy extrañados, se les ve desorientados, como si hubiera algo que no entendieran. Inmediatamente, el que sin duda es el líder del grupo se dirige al camarero:

-Oye, disculpa, esto está muy muerto, ¿no?
-¿Qué quieres decir?
-Bueno, vine varias veces el año pasado y el local siempre me lo encontraba petado, con ambientazo, y hoy apenas somos seis o siete.
-Sí, bueno, con esto de la pandemia, pese a que tenemos mucha libertad para abrir los bares, la gente está recelosa y se queda en casa mucho más que antes. Esperemos que no tarde en volver la normalidad de antes.
-Esperemos.

Vuelve con sus amigos y, tras intercambiar unas palabras, se marchan del bar.
-Vámonos, hermanos, seguro que las 72 huríes podrán esperar un año.

Hipsters que no dicen ser veganos. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:7. Bar Pentagrama

Cinco tipos entran en un bar cuyo interior es pentagonal. Les conoces, son los mismos del relato número uno. El plan es desvalijar la máquina tragaperras alimentada por un chino desde tiempos inmemoriales. Emilio vigila cuando Diego ve subir a alguien al karaoke. Son las 17:00 h. A Alejandro le sudan las manos, Braulio mueve nervioso su pierna. Entonces Esmeralda empieza a cantar: «Hola mi amor, soy yo tu lobo». Es la señal convenida, pero no pueden moverse. La voz celestial de Esmeralda ha abierto un vórtice en medio del bar. Acontece su canto un salmo de querubines, de su boca sale el sonido de sirena que enloqueció a Ulises. Carlos escucha embelesado mientras el pentágono torna en pentagrama invertido. Todo fue una trampa, el suelo es ahora un torbellino que los engulle voraz. Se creían lobos, pero eran caperucitas. El polvo se deshace y sobre la superficie sólo queda una máquina tragaperras. Y un chino.

Si el chino no llora no tiene sentido el relato. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:8. Cuatro tipos airados y uno medio tonto

Cinco tipos entran en un bar. Su aspecto resulta familiar aunque pocos recuerdan sus nombres. Cuando el mesero se acerca a tomarles nota, empiezan los problemas.

—¿Tinta negra para todos?
—Tan soso como siempre, Arial. Jengibre Brillante para mí.
—Helvética, ¿nunca dejas tus diseños de mierda?
—Old English, maldito carcamal, tendríamos que haberte dejado en algún diploma apolillado.
—Oiga, yo tomaré un Azul Pavo Real bien cargado.
—Madre mía, Garamond, creo con tus serifas ya pareces suficientemente... maricón.
—¡Bastardilla!
—¿Os sabéis el chiste del tipo que entra en un bar, pide un ron y el camarero le pregunta cuál y él responde... pero si ya se lo dije... Negrita? ¿Os lo había contado? No me miréis así... yo sólo quería relajar el ambiente y...

En ese momento, el camarero decide volver resignado tras la barra mientras todos se abalanzan sobre Comic en una lluvia de asteriscos, almohadillas y caracteres especiales.

Yo hecho en falta algunas de las que en vez de letras tiene dibujitos. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:9. Chillones

Cinco tipos entran en un bar cantando a gritos ante la mirada del enfurruñado tabernero, que no tiene ganas de problemas. Para su sorpresa, el resto de parroquianos se les une, desgañitándose entre berridos desafinados. Pronto, el dueño del antro se suma al grotesco coro, y salen todos a la calle atronando a cuantos transeúntes se cruzan en su camino. Cada vez más peatones engrosan las filas del improvisado orfeón, e incluso muchos conductores que al principio protestaban a bocinazos acaban abandonando sus vehículos para formar parte del desfile improvisado. Ya anochece, y en toda la ciudad retumba el estruendo de un ejército de vocingleros desatados. La fiebre de los chillones se va extendiendo a las poblaciones vecinas, y en un par de días en el mundo entero resuena una cacofonía aberrante.
Para entonces los cinco tipos ya descansan en sus casas. Duermen plácidamente, con tapones en los oídos y una sonrisa de oreja a oreja.

Esto no es un relato, es un concierto de Dropkick Murphys, no mintáis. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:10. Pendrágono

Cinco tipos entran en un bar como despistados, levantando mis sospechas. Decido seguirles. Su comportamiento continúa errático. Desde la barra apunto al primero con el DharmaWatch confirmando mis dudas: Viññana. Identifico el orden del resto; Sankhara, Sañña, Vedana y Rupa, el cuerpo, a quien me aproximo. Debe ser el primero. Lentamente saco del tahalí el estilete de Damasco. Lleva enhebrado el hilo zirconiano.
Vertiginosamente giro a Rupa por el hombro ensartando el estilete por su ombligo para atravesar su abdomen, y tomándolo con la otra mano para repetirlo con los demás. Dispongo rápidamente en posición pendragonal a todos engarzados para su prensado sobre el hilo. El potente golpe sobre el sacro emite un destello cegador.
El resultado; un único tipo en el suelo retomando la consciencia.
—Otros cinco agregados reagrupados —comento al petrificado barman—, cinco días ganados para mi Bardo Dharmata —sentencio henchido. El pobre ignora haber visto al mejor CazaKhandhas de todos los tiempos.

Os quejáis de que me invento grupo, pero estos nombres propios no se quedan atrás. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:11. Bar Pentotal

Cinco tipos entran en un bar cuyo interior es pentagonal. Romario, el primero de todos, la choca con el camarero mediante un saludo secreto que sólo ellos conocen. Tras él, Ronaldinho se ha quedado en el hall bebiéndose el agua del florero. «Deja algo», le solicita Paul Gascoigne al mismo tiempo que Asier del Horno camina con paso firme hacia la barra para pedir un kalimotxo. «Sin licor de mora, que no somos maricones», especifica. Pero falta el quinto. Con andares de dios egipcio y flequillo rubio impoluto, Guti hace su aparición en el bar. «¡Qué passssa!», golpea con confianza la espalda del chino que mata el tiempo jugando a las tragaperras. Pero eso molesta al chino, que entrecierra los ojos (más). Son las 16:43 h. y el bar enfurecido engulle a los futbolistas como voraz boca de Sarlacc. En segundos, todo vuelve a estar como al principio. A lo lejos, se acercan Alejandro, Braulio, Carlos, Diego y Emilio…

Debería habérselo currado más y no meter a Paul que no jugó en España y los otros cuatros sí. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:12. Desvaríos de pagafantas

Cinco tipos entran en un bar. Lettera Lovers, parpadeaba el neón rojo. Tras la transmutación, descubren que les han correspondido las letras QUESO. Q comienza a rezongar:

-      Ya os decía yo que yendo juntos íbamos jodidos.

-      Pero si hay miles de palabras de cinco letras,  te podía tocar yendo tres, irá mejor que cuando te tocó Z – murmuró S, colocándose el tupé en el espejo.

-      Ahora ligaréis todos, menos yo, como siempre - seguía gimiendo la Q.- A vosotros os vale cualquiera. No me dejéis solo, somos colegas.

Había muchas A, L y R, como siempre. U encontró una T guapísima, S se enroscó a una E. Q seguía rezongando cuando tropezó con alguien. Se volvió. Era una U.

-      Hola, encantada. Esta es mi amiga I. Qué rabito más mono, por favor. ¿Bebéis algo? ¿Tus amigos?

-      ¿Qué amigos?

Las letras deberían de haber formado un TU SI QUE VALES en honor a César Brandon. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:13. El encantamiento bajo el mar

Cinco tipos entran en un bar apurando una colilla que pisotea el último. Los cinco son corpulentos y van vestidos igual, un traje azul claro.
Sentados junto a la ventana del bar esperan café.
—¿Recordamos el repertorio, verdad? —preguntó el saxofonista.
—Tommy, tenemos diez temas, siempre es el mismo, tranquilo —contestó Danny, el bajo.
—¿Y si probáramos terminar con alguna versión? Algo más animado. "Earth Angel" es nuestro mayor éxito tenemos que tocarlo y así tienen su momento beso los chavales, pero hacer después una despedida más alegre —anotó Reginald, el batería.
—Me parece buena idea. ”Mr. Sandman” la he practicado y no es difícil ¿Qué te parece Marvin?... ¿Marvin?... ¡Ey, Marvin!
Lloyd zarandeó al líder de la banda, absorto mirando la ventana.
—Lo siento, no estoy centrado. Creo que será el último concierto de los Starlighters, el primo Chuck me ha ofrecido acompañarle de gira este verano, y creo que su trayectoria tiene mucho futuro.

No se ha nombrado en ningún momento a Marty. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:14. Chupito amargo

Cinco tipos entran en un bar de un polígono cualquiera. Acercan varias banquetas y se sientan junto a la barra mirando al frente. El espejo devuelve un puñado de rostros derrotados. El camarero, un chaval de brazo tatuado y camiseta de tiras, comienza a prepararles lo de siempre, pero el más veterano le hace una seña con índice y pulgar. Hoy solo chupito. El murmullo de fondo del telediario habla sobre ellos. Apenas quince segundos de la noticia del ERTE, pronto enterrada bajo conmovedoras imágenes de un león marino rescatado en un tejado de Nueva Zelanda tras una tormenta. Un parroquiano que lee el periódico en una mesa del rincón se levanta, coge el mando para apagar la tele, y el tabernero pone música. Mientras suena Wonderful Tonight de Clapton el viejo currela echa mano a la cartera en el bolsillo de sus ajados pantalones de taller, pero el chico le detiene. Hoy invita la casa.

Los leones marinos se rescatan en California o Alaska, no en Nueva Zelanda. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:15. Literatura y exilio

Cinco tipos entran en un bar
Los tres son los grandes poetas de Chile
Nicanor Parra y Roberto Bolaño.

No veo a Neruda con los otros 4. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:16. Barman

Cinco tipos entran en un bar de forma atropellada. Parecen estar borrachos. Mientras uno se acerca a la barra, los demás desenfundan sus penes enhiestos apuntando en todas direcciones.
—Esdo es un adraco, buchacho —dice el primero al atónito barman—. Danos dodas dus vaginassssssss.
El barman abre los brazos con desespero, baja la mirada a su entrepierna y hace la maniobra. Una especie de AK-47 aparece entre sus piernas flacuchas.
—Todos fuera —grita haciendo un barrido con su enorme artefacto—. A la puta calle.
Los borrachos hacen mutis y abandonan el local heridos en su orgullo. ¡Qué desilusión!
Doña Magdalena se acerca a la barra con parsimonia, apoya la taza de café vacía en la barra y suspira.
—Otro cafetito con leche, Santos. ¡Qué nervios!
—Marchando. ¿Quiere otra magdalena, doña…? —y calla por no parecer redundante.
—¿Y por qué no un churrito, Santos? Empiezo a echar de menos la guerra.

Es cafelito, CA-FE-LI-TO. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:17. 4 cuñados y un funeral

Cinco tipos entran en un bar:
—Hay muchos camiones aparcados en el parking, seguro que aquí tienen un menú cojonudo —dice Santi.
—Chata, ve poniendo unas cañas. A ver cómo lo haces… Uy, no, mejor déjame a mí que le dé al tirador que tú no tienes ni idea —explica Jorge a la camarera.
—Ya he cogido las entradas para el recital de Bertín. Me las ha pasado un contacto a la mitad del precio de taquilla —cuenta Iván a los demás.
—Joder, me parece que aquí los camareros son sudacas, putos inmigrantes que vienen a quitarnos el trabajo —manifiesta Javier.
—Bueno, hombre, no criminalicemos a los extranjeros, la mayoría es gente trabajadora que viene buscando prosperar y buscar nuevas oportunidades —comenta Iñigo.
Los otros cuatro ponen cara de incredulidad. Santi se acerca a Javier y le dice al oído:
—Vaya tolili el nuevo del curro, al salir le damos unas hostias para que espabile.

Ninguno ha hablado de ir de putas. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:18. Cinco vidas

Cinco tipos entran en un bar, cinco pares de brazos y cinco pares de piernas cosidos por una misma levita, que es del mismo tono que el carbón. Son cinco cabezas repartidas alrededor del único cuello, a la manera de un verticilo, que se alternan para ordenar el menú diario. Atestigua el mozo que sirven las mesas, que antes de formar ese escarabajo de ciudad, esa suerte de araña civilizada, los cinco tipos eran en realidad uno solo. “Debe ser muy cansado ser uno mismo todo el rato. Uno acaba por aburrirse. Uno se inventa otras vidas, pero al final... supongo que solo se puede ser uno mismo, ¿no?".

Me falta información de como se reparten las piernas y (sobre todo) los brazos en un único cuerpo. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:19. Tipos duros

Cinco tipos entran en un bar para discernir quién aguanta más bebiendo. A Comic le piden el carné, siempre ha tenido una pinta infantil insoportable, bobalicona. Chicago cree siempre que tiene las de ganar y Courier está decidida a plantar batalla, al fin y al cabo es mucho más vieja que cualquiera. Bodoni ha perdido la paciencia, en contra de su comportamiento habitual tan anodido, tan invisible. Wingdings no deja de hablar, pero a este tipo no se le ha entendido nunca.

Ninguno de los cinco cuenta con las malas pulgas del camarero, que barruntaba jaleo: Hoy solo tengo disponibles chupitos de AltF4, idos todos a casa.

¿por qué no cuentan que estos son los que luego enseñan los nardos en el bar donde se encuentra doña Magdalenas? ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:20. Eterno retorno

Cinco tipos entran en un bar. El primero en pedir es el adolescente con tejanos rotos:

—Un cubalitro, anda. Si por ti fuera —dice al niño, a su lado—, estaría matándome a estudiar con un vaso de leche para tenerlos contentos…

Sin dejarlo acabar, el de treinta y tantos le da un capón:

—...y en cambio te pasarás años discutiendo con ellos mientras el mundo sigue girando. ¡Vaya rebelde estás hecho! Yo quiero una cerveza de barril. Y unas aceitunas…

—...y un mayordomo y una azafata —se burla el de la barba y las canas incipientes—: lo quieres todo y harás lo que sea por conseguirlo. Aunque te quedes solo por el camino, ¿no? Ponme un café, que vengo del INEM y…

—¿Qué café ni qué…? Ponle un gintonic —dice el abuelo. Yo, nada. Somos todos gilipollas. Y no, —mira al niño— no podemos remediarlo. ¿Quieres una Coca Cola?

El abuelo no pide nada parece. ¡Esto es intolerable!

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:21. Granizo

Cinco tipos entran en un bar haciendo la conga. Pronto todo el local se suma al festejo, cantando y riendo, y nos quedamos arrinconados contra la barra.
-¿Salimos de aquí? -me dice, por encima del ruido.
-Vale.
Fuera hace frío. Eso no es nada, dice, y me habla de sus años de estudiante en Rusia, a -45 grados, cuando el peligro era quedarse dormido esperando el bus.
-Pues esto para mí ya es bastante -le digo.
-Pues nos vamos. ¿Vives lejos? Te acerco a casa.
¿Me fío?
Venga, me fío. El viento se me cuela por el abrigo mientras volamos en la moto. Me agarro a él lo justo, ni mucho ni poco. Empieza a granizar, caen piedras grandes como uvas. Yo me río, miro hacia el cielo que se abre sobre nosotros. Para, para, grito, que es aquí.
¿Le invito a casa?
-Bueno, ya nos veremos…
Está lloviendo mucho ahora, digo, ¿te apetece subir?

Mirar para arriba cayendo granizaos... lástima que uno no le haya roto la nariz por imprudente. ¡Esto es intolerable!

m señor escribió:Hasta aquí el show emanorado de reg


K

m señor escribió:

RegSound escribió:

Vinny Vedecci escribió:21. Granizo

Cinco tipos entran en un bar haciendo la conga. Pronto todo el local se suma al festejo, cantando y riendo, y nos quedamos arrinconados contra la barra.
-¿Salimos de aquí? -me dice, por encima del ruido.
-Vale.
Fuera hace frío. Eso no es nada, dice, y me habla de sus años de estudiante en Rusia, a -45 grados, cuando el peligro era quedarse dormido esperando el bus.
-Pues esto para mí ya es bastante -le digo.
-Pues nos vamos. ¿Vives lejos? Te acerco a casa.
¿Me fío?
Venga, me fío. El viento se me cuela por el abrigo mientras volamos en la moto. Me agarro a él lo justo, ni mucho ni poco. Empieza a granizar, caen piedras grandes como uvas. Yo me río, miro hacia el cielo que se abre sobre nosotros. Para, para, grito, que es aquí.
¿Le invito a casa?
-Bueno, ya nos veremos…
Está lloviendo mucho ahora, digo, ¿te apetece subir?

Mirar para arriba cayendo granizaos... lástima que uno no le haya roto la nariz por imprudente. ¡Esto es intolerable!

Tu eres el.romantico que toda persona querría a su lado.
m