Concurso de MICRORRELATOS Azkenero - Ronda 12 - Neska for the win! Otra vez!

Ya estamos en la Ronda 12. Ya tenemos nueva frase!

Normas:

Frase:
"De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica...”

Clasificación Última Ronda:

CLASIFICACIÓN GENERAL

1 Sean - 33 puntos
2 Motorelvez - 31 puntos
3 Eloy - 30 puntos
4 Neska - 21 puntos
5 Coch - 18 puntos
6 DarthMercury - 17 puntos
7 Fresx - 14 puntos
7 Borogis - 14 puntos
8 atabal - 13 puntos
9 metalbert - 12 puntos
10 Silver - 10 puntos
10 Nomeko7 – 10 puntos
11 Godofredo - 8 puntos
12 Rayo – 7 puntos
12 Blas - 7 puntos
13 Buho - 6 puntos
14 Hank - 5 puntos
14 Maniac - 5 puntos
14 Preparan - 5 puntos
14 Alflames - 5 puntos
14 Rudicio - 5 puntos
15 Jojomojo – 4 puntos
16 Azrael - 3 puntos
16 Alinoe – 3 puntos
16 Jackinthebox - 3 puntos
17 danitoledo - 1 punto
17 Guaje - 1 punto
17 M.Karmen - 1 punto
17 Crackersoul - 1 punto

Clasificación global por puntos totales:

PODÉIS VER LOS RELATOS DE TODAS LAS RONDAS ORDENADOS POR AUTOR EN ESTE LINK

https://docs.google.com/document/d/1jB5odLgZy0AhOo0xPpbUOefot-Ps7D2nrKfKS25i7v4/edit?usp=sharing



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Frase de la semana: "De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica..."



RELATOS


1. P: De ahí su nombre artístico, pero ¿Cómo se le ocurrió la idea para el canal?
De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica, era mi berrinche. Pensaba que insistir en practicar ese ejercicio estéril molestaría lo suficiente a mis padres para que dejasen mentirme diciendo que estudiar me serviría para el futuro.
Tuve que desistir pronto, pegué el estirón mucho antes que mis compañeras y la soriasis en los párpados y mis ojeras estropeaban el maquillaje.
Cuando vi que ser youtubera [sic] daba dinero fácil, lo tuve claro. Nadie se espera que aparezca una vigilanta [sic] oculta en un disfraz mitad de jirafa mitad de oso panda. Pero el número de visitas a “Terrorismo Dadá” se debe al final de los videos, al efecto que consigo cuando ven esos splits perfectamente ejecutados con la única intención aparente de evitar accidentes en los semáforos. En realidad lo hago porque sus caras son las que me permiten vivir de esto.
P: Gracias por su tiempo, Anitu Gallardo.


2. Siamese dream

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica.
Dibujar con la cinta espirales infinitas en el aire,
lanzar las mazas desafiando la ley de la gravedad,
bailar con la pelota coreografías imposibles,
brincar sobre la cuerda al ritmo frenético de su corazón,
girar el aro en torno a su cintura... y la de su hermana siamesa.
Sería preciso que coordinasen los movimientos.
Su hermana soñaba con ser pianista.


3. BOBBY

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Una pena haber nacido con pene, pues desde que tuve uso de razón, fantaseaba con aquellas acróbatas del aire. Me fascinaba verlas doblarse como si fueran de goma. Sus maquillajes, su dulzura. Nunca olvidaré la tremenda paliza que me dio mi retrógrado padre cuando me pilló disfrazada con mallas y una fina camiseta de licra. Todavía me duele contemplar la cicatriz que me dejó en la cara. Cuando cumplí los 20 había olvidado completamente aquella obsesión por la gimnasia más elegante. Conseguí mi vagina, ¡y vaya si la conseguí! Metía dentro de ella todo lo que podía, incluyendo frutas y hortalizas. El placer mental era tal, que incluso fui capaz de olvidar al desgraciado de mi padre. Él jamás me comprendió, ni siquiera cuando años después de haberme largado de casa, mi madre lo dejó por una de mis mejores amigas.


4. No hace falta estudiar

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. De hecho, entrené hasta los 14 sin un mísero trofeo o medalla. Probé todos los aparatos, pero tener un ojo vago es un hándicap excesivo en este deporte. La pelea de ese año con mi madre fue de órdago. Se rindió, admitió por fin que su niña ya era una mujer y renunció a proyectar sus sueños y frustraciones sobre mí.

Todo eso lo sé ahora, después de cinco años de psicólogos.

Eso sí, al final la obsesión de esa hijaputa ha servido para algo: no salgo al escenario por menos de 2.000$, propinas de los clientes aparte. En Las Vegas, The Vip Room se llena cada noche para ver mis spagats.


5. Justicia

De pequeña, siempre soñaba con ser gimnasta rítmica. Como su hermana. No temía el esfuerzo ni el sacrificio. Los entrenamientos interminables no le asustaban si le permitían salir a la pista, actuar y sentir las salvas de aplausos del público, llegar a casa y recibir las felicitaciones de sus padres. Más tarde, mientras ella acababa los estudios secundarios, aquella niña mimada y estúpida ya había conseguido llegar a la alta competición, y todos decían que pronto ganaría su primera medalla. Ella, en cambio, no tenía talento, ni coordinación, ni sentido del ritmo. Por suerte, para ser juez de gimnasia rítmica no hacía falta nada de eso. Sólo estudiar, y ser muy perfeccionista. Cuando la admitieron en la Federación, se frotó las manos con malicia."


6. La victoria más dulce

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Recuerdo aquel verano viendo las olimpiadas en casa de Amhed en su pequeña televisión y como jugaba en mi habitación, haciendo ejercicios un tanto ridículos, fantaseando con ser campeona olímpica.

Un día mi padre me pilló jugando. No entendió nada.

-¡En qué clase de mujer te vas a convertir! –me gritaba mientras me azotaba con el cinturón.

Ese día comprendí que a las mujeres nos hacen culpables de los ojos con los que nos miran, por eso nos obligan a cubrirnos. Ahí comenzó mi lucha. El dulce sabor de cada milímetro de libertad ganado compensa todos los castigos y humillaciones sufridas. No temo al dios de los hombres.

Quizás esta sea mi última entrada en este blog. Hoy me han condenado a pena de muerte por ofensas al profeta. Es mi gran victoria. Son ellos los que me temen a mí.


7. ¿En qué piensa cuando toca el piano, Miss Lambreaux?

«De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica pero fue rechazada el día en el que asesinaron al Doctor King. Lloró toda la noche. A la mañana siguiente, su padre le compró un piano de segunda mano».

«Con 21 años tuvo que inventar un nombre artístico para que su madre no la reconociera en los carteles que anunciaban sus actuaciones en aquellos clubs, ubicados en plena Bourbon Street, que no cerraban hasta el amanecer».

«Cuando ya contaba con fama y dinero, quiso inscribir a su hija en la academia de gimnasia rítmica más prestigiosa de Nueva Orleans pero los sueños de ésta eran muy distintos a los suyos».  

- ¿En qué piensa cuando toca el piano, Miss Lambreaux?
- ¿Vio el otro día a esa joven? Gabrielle Douglas se llama.
- Sí, claro, la primera gimnasta rítmica negra que logró un oro olímpico.
- Pude haber sido yo... En eso pienso.


8. Sucedió una noche

De pequeña soñaba con ser gimnasta rítmica, y aun a pesar de la reticencia de mi madre y de cierta incredulidad por parte de mi padre, me prometí a mí misma que lo conseguiría. Entrené duro siempre que podía, estudiaba y entrenaba como nadie lo ha hecho en su vida. El tiempo transcurría, los estudios no me iban bien y el progreso de mi entrenamiento tampoco era lo que yo esperaba.
Segura de no conseguir mi objetivo, acabé la fiesta de mi diecisiete cumpleaños en casa de Herminio con una idea clara.
Los años de duro entrenamiento me habían puesto mazas, así que a pesar de sus constantes negativas, lo hice pasar por el aro arrancándole la ropa hasta dejarlo en pelotas. Era joven y tenía cuerda para rato, tanta, que aquella noche salí encinta.
Es lo más cerca que he estado nunca de ver cumplido mi sueño.


9. Reciclaje profesional

“De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica” confesé en un intento de empatizar con él. Quizás debí haber empezado por ahí. Había partido ya cuatro mazas contra su cráneo y la cinta con la que le había amordazado había absorbido la sangre. Tendría que volver a renovar material y cada vez estaba más convencida de que estos interrogatorios no me estaban saliendo rentables.


10. Pequeño fallo de ejecución

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Admiraba por televisión a todas aquellas princesas pequeñitas y perfectas, que volaban por la pista como hadas mientras agitaban, gráciles, sus cintas infinitas de color rosa. Hipnotizada por sus bailes, trataba de emularlas delante del espejo, mientras me imaginaba a mí misma flotando junto a ellas, compartiendo la felicidad de la poesía en movimiento. Hasta que un día mostraron el primer plano de una gimnasta rusa que había cometido un pequeño fallo de ejecución, y con él, perdido toda posibilidad de medalla. En ese momento comprobé en su rostro los largos años de sacrificio y privaciones, el enorme esfuerzo físico y la gran presión a la que estaban sometidas todas aquellas niñas. Descubrí la tristeza y la pérdida de la inocencia de aquella carita de porcelana, rota ahora en mil pedazos. Decidí cambiar de canal, y con el tiempo, de sueños.


11. Poltergeist.

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica.
Mis únicos juguetes eran el aro, la cinta, la pelota, la cuerda y las mazas, me encantaba lanzarlos por el aire y recogerlos para volver a lanzarlos una y otra vez.
Ahora no tengo mis juguetes, juego con otros, pero los gritos de entusiasmo se han convertido en alaridos de terror.


12. La sombra y la ficción

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica y acompasadamente: noches infantiles pobladas de anillas, potros y paralelas, a intervalos regulares.
De adolescente soñaba con ser bailarina clásica y profundamente: tangos, valses y arabesques nocturnos en una danza letárgica hasta el amanecer.
Fue joven y soñaba con encontrar un compañero sexual y agitadamente, en madrugadas inquietas y húmedas. Lo encontró y juntos soñaron ser una pareja estable y confiadamente, en noches de amor y cotidianidad que permanecieron inalterables lo que dura una vida.
Y ella aún no lo sabe pero esta noche, abrazada a él, soñará su último sueño. Profunda, confiada, acompasadamente soñará con ser una niña que sueña ser gimnasta.


13. Sweat dreams

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Se veía a sí misma rodeada de espectadores que la observaban embelesados. Su frágil cuerpo deslizándose por el tapiz al compás de la música, en perfecta armonía. Ella saliendo de la pista, saludando con ambas manos, y la multitud puesta en pie pidiendo a gritos su medalla de oro. Ahora, ovacionada tras su primera actuación, esos sueños le volvieron a la mente. Tal vez su debut no fuera tal y como había esperado, pero contonearse asida a una barra, jaleada por tipos que apestaban a sudor y alcohol, y bajo una lluvia de billetes era mucho más divertido.


14. Pesadilla

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Cada mañana, cuando tengo que pasar de la cama a la silla de ruedas en la que estoy debido a mi lesión lumbar crónica, pienso que ojalá alguien me hubiera quitado ese sueño de la cabeza.


15. All I have to do is dream

"De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica...”

En su corta carrera aspiró a muchas platas.

El "caballo" era su manera de seguir soñando.


16. Camina
De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Concretamente, gimnasta rítmica de lanzamiento de Barbies sobre caballo volador rosa.

Lo sé. Los sueños de una niña de 7 años no siempre son fáciles de alcanzar.

Un día mi padre paró su coche junto a la carretera y me acompañó hasta un pequeño establo. Allí estaba el caballo más bonito que he visto en la vida, pintado de rosa, con unas pequeñas alas de alambre sujetas con una cuerda. Mi padre sacó dos barbies de una caja y yo viví los 15 minutos más felices de mi vida. Entonces, 4 hombres entraron en el establo y dieron tal paliza a mi padre que lo dejaron en silla de ruedas de por vida.

Desde ese día mi deseo fue conseguir que mi padre volviera a andar.

Hoy, frente a todos ustedes, puedo decir que mis sueños de niña se han hecho realidad.


17. Hoz y martillo

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica y llorar de emoción en el podio de Moscú 80 mientras suena el himno de la Unión Soviética. Irina Gagarin, soy de Utrera, pero este era mi nombre de batalla, porque yo ya de muy niña ya era materialista dialéctica, soñadora y proletaria. Espiral, zigzag, espiral... y lanzamiento ¡camarada Lenin!


18. Otros tiempos.

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica pese al constante rechazo de su familia. Lo intentó en tantas ocasiones como palizas le dio su padre. Era suficientemente mayor para el trabajo del campo pero demasiado pequeña para saber que una mulata sureña jamás llegaría a la competición.


19. El futuro por delante

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Con ocho años, vestida en traje de baño de Mickey Mouse y polainas rosas, nos entretenía a todos los críos del barrio haciendo exhibiciones con su hula hoop y balón de Nivea. Nos cobraba 50 pesetas. Para pagar sus viajes a las olimpiadas, decía.

Pero sus sueños de podios y medallas se truncaron con la adolescencia. Le crecían la tetas y le seguían creciendo y creciendo. Dejó las clases de gimnasia, se volvió cohibida y tímida. Y lo pasaba mal con su cruel mote de Pili Perolas.

Hace veinte años que no sabía nada de ella, pero se me acaba de caer la vaselina encima del teclado por el shock que me he llevado al verla delante mio en la pantalla de ordenador. Ya no lleva polainas, y ahora se llama Paulina Pechotes, y aun sigue cobrando para verle hacer el espagat.


20. Espesa bruma

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica...

Lo repetía incesante. Punto por punto. Palabra por palabra. Como una suerte de mantra, acaso una ensoñación, con la que saciar su desmedido afán de protagonismo. Alcé la mirada. Sus antaño delicados y risueños gestos se mostraban ante mí como actos rebosantes de rencor e hipocresía.

I used to love her...  Sí. Había llegado el momento de completar la estrofa. Agarré la botella más próxima y la rompí en mil pedazos. Tan sólo me separaban unos metros. Pude ver el pánico en los ojos del resto de comensales. A medida que me aproximaba, la sala comenzó a difuminarse. Escuché sirenas en la distancia. Las siluetas retorcían sus inertes cuerpos conforme yo iba perdiendo la visión. Al fondo, mi objetivo terminaba de adentrarse en la espesa bruma de la zozobra.

Siete de la mañana. El triste caminar hacia la deriva avanza inmisericorde.


21. Andrés


De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Si se detenía a pensarlo, en realidad no entendía muy bien cuál había sido el origen de ese sueño que, con el paso de los años, se había convertido en una obsesión. Bien mirado, no tenía mucho sentido: ni conocía a nadie que practicara ese deporte, ni en su pueblo había tan siquiera un lugar donde practicarlo.
Pero, desde luego, lo que carecía de sentido era desear ser algo que la sociedad no entendería. Si ya se daba cuenta de que iba a ser difícil que le dejaran de llamar Andrés, era una meta imposible querer ser gimnasta, con ese cuerpo que la adolescencia estaba haciendo crecer.
En silencio, cada noche, ensayaba, soñaba con ir a los juegos olímpicos… y con tener la valentía de contar a los demás lo que sentía. Y cada noche, terminaba decidiendo que lo mejor era guardar silencio.


22. Svetlana
De pequeña soñaba con ser gimnasta rítmica, y convertirme en campeona olímpica. Llegué a ser titular dentro del equipo de la mejor escuela de la ciudad trabajando muy duro.
Todo parecía estar bajo control hasta que se convirtió en algo obsesivo. Nunca olvidaré aquella tarde de febrero cuando mi entrenadora, Svetlana, me llevó al vestuario, y en tono amenazador me dijo que si no dejaba de ganar peso, pasaría a ser suplente. A partir de ese momento comencé a dedicar todo el tiempo posible a entrenar, mis resultados escolares fueron de mal en peor, dejé a mis amigos de lado y empecé a hacer dieta.
Mientras Svetlana estuviera contenta todo valía.
Pero un día fallé, y acabé en el hospital.
En los meses que estuve ingresada, mi entrenadora nunca vino a visitarme.


23. Canadá

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica profesional para evitarle a sus padres las penurias de la carretera. En pleno trance de aceite hirviendo y letargo matinal incluso tuvo espacio para meter su cintura entre los huecos de los aros que chisporroteaban en la freidora para realizar una rutina perfecta a ojos del jurado. Suerte de gorrito rosa, que deslizó una gota de sudor hasta su nariz justo a tiempo para que finiquitase la ración sin quemaduras graves. Se preguntó dónde estarían actuando en aquel momento mientras bandeja en mano ensayaba una caída de ojos para regocijo de los presentes, dando por iniciado un nuevo día.


24. Sacrificio
De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica pero mi talento era nulo. Mis movimientos, inseguros y torpes, sólo generaban insoportables miradas de compasión y un humillante chismorreo.

Hasta que el Círculo me hizo la promesa. Mi primer ritual resultó penoso. Golpeé vacilante una, dos, tres veces el cráneo, sin resultados. Al ver la sangre y los ojos suplicantes sentí violentas arcadas.

Recordé las risas indisimuladas de mis compañeras gimnastas, del público, del jurado. Nunca más iba a fracasar. Eché el martillo hacia atrás y aplasté con todas mis fuerzas la cabeza. Fragmentos de hueso y seso me salpicaron el rostro.

Ahora tengo el talento, pero necesito asegurarme el oro. Reconozco al Sacrificio, le pidió al Culto triunfar en la escritura.  Shub-Niggurath tiene otros planes. Mira el mazo de los antiguos en mis manos ahora firmes. Solloza. Lo último que oye es mi voz, "lo siento {usename}".

25. Sutil gimnasta polaca de los años 70

- De pequeña soñaba con ser gimnasta rítmica y, a la vista está, lo logré
y fui mucho más allá de los lindes de mis sueños ¿no cree?

El entrevistador asiente instando a Lara Lewandowska, mito sepia de la
gimnasia rítmica polaca, a continuar con su relato...

- Pero mire, conocí a mi actual marido cuando apenas tenía 17 años y mis
responsabilidades no impidieron que pudiera ser campeona olímpica y del
mundo. Sin embargo, creo que no se me recuerda como a otros deportistas
porque no se me conocen manchas en mi expediente. Ni sufrí
abusos de entrenadores, ni drogas, ni desórdenes alimenticios, ni cambios
de sexo, ni...mis memorias o un biopic de mi vida carecerían del drama y el
tremendismo que genera críticas apasionadas y grandes recaudaciones...

Arrastrando sensaciones homologables al despecho, Lara finge no haber
notado a su entrevistador tragándose, sufrido, un bostezo.


26. Trozokarne

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. No tenía ritmo, ni era especialmente atlética.
En el instituto su ambición fue el baloncesto, pero era enana y manca.
Al llegar a la universidad se esforzó por entrar en el equipo de debate, pero no aceptaban sordomudos.
Pasados los treinta se interesó por el atletismo. Echó de menos tener dos piernas.
Pasó su vida frente al televisor deseando no ser ciega.
Murió soñando que no había nacido.


27. La viuda negra

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica y para eso me preparé. Me inscribieron a clases desde los cuatro años y así fue como dar volteretas por el suelo, realizar saltos imposibles o manejar objetos con ambas manos se convirtieron en mi día a día. Técnicas y trucos que no escondían secretos para mí.

Hoy en día, veinticinco años después, no es precisamente una medalla de oro lo que cuelga de mi cuello. Digamos que la sustituí por otra medalla, una de identificación. Eso sí, sin mi preparación temprana jamás habría llegado a convertirme en quien soy actualmente. Mi nombre es Romanova, Natasha Romanova, y mi estirpe ha defendido a la Unión Soviética desde que puedo recordar.


28. HOY NO COMO EN CASA

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica..
-¡¡Elena!! ¿Has visto lo que ha escrito Toño en su cuaderno?
-Cielo, te he dicho mil veces que no fisgues en su Diario.
-¡Y una mierda! Mientras viva en esta casa...
-No puede hacer otra cosa.
-¡Con veintinueve años! ¡Y dice que quería ser gimnasta...!
-Antonio, ya sabes que Toñín de crío siempre fue un poco...
-¡No le llames Toñín, Elena! A su edad yo ya me había casado contigo.
-Porque estaba preñada. Quería una niñita con toda mi alma...
-Una niñita que hiciese gimnasia rítmica.
(Se oye un portazo y un vozarrón)
-Buenas. ¿Qué carajo hacéis ahí?  Hoy no como en casa.
-¿Y eso cielo?
-Don Antonio, quítese de ahí, carcamal. Me he encontrado a Mari Puri y me invita a conejo. Al ajillo.
-¿No te da vergüenza que te invite una mujer, hijo?
-¡Antonio...!
-Ninguna, padre. Ya la compensaré. Abur.


29. En busca de la felicidad

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Entrenaba duramente y se prometía que iba a triunfar. Su madre le había aleccionado para que fuese la mejor. Tan interiorizado lo tenía que el día de la primera competición importante ya no se acordaba de que realmente estaba viviendo el sueño de su madre y no el suyo. Participó en la competición y al final toda su vida resultó ser un fracaso. No era lo suficientemente buena y sus resultados fueron mediocres. Desde ese momento la relación con su madre fue de mal en peor, y acabaron por perder todo contacto. Años después se casó y tuvo una niña. En ese momento los resortes del pasado se pusieron en marcha y la frustración por un fracaso, que en realidad no era suyo, se puso en marcha. Está vez conseguiría demostrarle a su madre que no era una fracasada.


30. Veinte años

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Él quería ser astronauta. Qué curioso que nos hayamos acordado de ello, tras veinte años sin vernos. Tampoco había mucho más de lo que hablar y en cuanto han repartido la metadona nos hemos ido cada uno por nuestro lado. Quizás dentro de otros veinte años lo encontremos graciosísimo, pero hoy podríamos habernos metido nuestros recuerdos por el culo.


31. EL SUPER.

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica como todas las compañeras de clase. Ninguna lo consiguió pero su sueño la mantenía distraída en su puesto de trabajo.
Intentaba que todos los clientes pasaran por el aro con sus ofertas y cuando no lo conseguía le sentaba como un autentico mazazo. Aún así, le echó pelotas a la vida y siempre tiró de la cuerda de su hogar para salir adelante.
Por su cinta de caja pasaban cientos de productos diarios y los introducía en las bolsas haciendo piruetas con sus pequeñas manos.


32. Elenita

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Vengo de una familia con tradición olímpica, eso lo sabe todo el mundo. Mi hermano fue incluso abanderado de nuestro país. Aún recuerdo la emoción que sentí cuando le vi desfilar, no podía parar de llorar…
Desgraciadamente siempre fui muy patosa y ya bien pronto mi familia supo que mis sueños no se cumplirían. Intentaron inscribirme en los Special Olympics, ya que dicen que me falta un hervor - algo que también me viene de familia - pero tampoco di el nivel, aunque por poco.
Decidí pues casarme con un hombre de buena genética y hacer de mi hijo un campeón olímpico. Es un chico muy espabilado y estoy segura que hubiera sido un gran atleta si no se hubiera disparado al pie.
Ahora tenemos que decidir si ir por los Special Olympics o a por los Juegos Paralímpicos, opciones no nos faltan.


33. Hermanos

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Eso fue antes de que mi madre volviese a trabajar y obligase a mis dos hermanos mayores a cargar conmigo por las tardes. El aro, la cinta y los juegos de niñas dejaron de interesarme cuando aprendí a construir casetas en los árboles, a cazar culebras en las vías y a guardar sus secretos. No me importó descubrir prematuramente la identidad de los Reyes Magos, ni que pegaran a mi primer novio cuando le vieron tontear con Sandra, la hija del panadero.

Hace ya 16 años desde aquel Agosto, cuando se fueron para no regresar a las fiestas de un pueblo cercano. La magia también desapareció. Hoy, comprando a mi hija un maillot rosa, me acordé de ellos. Me hubiera gustado que tuviese hermanos.


34. SAID

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica olímpica. Recuerdo con cariño cuando me acompañabais a entrenar, cuando veníais a los campeonatos.
Tardé en darme cuenta de que no era mi sueño, sino el vuestro.
Mi sueño real está a minutos de cumplirse.
Nunca os gustó Said, no lo intentasteis, no disimulasteis, pero esta carta no es de reproche, ni os guardo el más mínimo rencor por ello.
Cuando la leáis, seguramente habréis tenido que dar ya muchas explicaciones sobre mí, sólo quiero que sepáis que vuestra hija es muy feliz, y eso es lo que quiero que contéis.
Los niños de la escuela que veo desde mi ventana son víctimas de una guerra que ganaremos, y algún día comprenderéis que estáis en el bando equivocado.


35. Sin sombras, no hay luces.

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica y en el sueño me movía con el equilibrio de una bailarina. Era una voluntad inconsciente y engañosa porque al despertar, estaba capturada dentro de un estado de tristeza, de excesiva responsabilidad. En el gimnasio, tenía la compulsión por el perfeccionamiento corporal y mental que los sacrificios exigen y mi cuerpo se enfrentaba a mi sueño. Ahora, con 72 años, dentro de mi propia impureza, intento recordar años pasados, que se presentan como monedas, que de tan manoseadas, han perdido su imagen.


36. Gloria

-De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica ¿verdad?
-No lo sé, doctor, no creo que nunca soñara con dedicar mi vida a joderme el cuerpo. Y la vida. No maté a Gloria porque ganara más medallas que yo, ya se lo dije. Lo hice porque era idiota. Y feliz. Todo el puto día sonriendo. Cada vez que una de las dos ganaba algo, venía corriendo a abrazarme ¡A mí!
¿Sabe cuántas veces le pedí que dejara de hacerlo? No, no lo sabe. Si lo supiera no estaría aquí, me habría dado el alta hace tiempo. Pero sigo aquí, en esta mierda de diván, hablando con esta mierda de loquero, en la mierda de cárcel de la mierda de ciudad en la que nací.
Doctor.
-Diga.
…
-¡JODER!
¡ESCUPA ESO!
¡MIERDA!
¡¡¡MIERDA!!!!!
Ya van tres este mes ¡joder!


37. Hallogym

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica con tanta ansia que lo logré. Pero el puesto de primera gimnasta del equipo me lo arrebató Eva. Lo soñó con más intensidad. Pero me vengué, y ya que disponía del material adecuado lo utilicé.
Una noche de Halloween, en el vestuario, estando solas, la dejé inconsciente de un certero golpe con la maza. La até con la cuerda al aro, y éste al grifo de la ducha. Sentada, inconsciente y con los brazos en alto, le metí laboriosamente a presión la pelota en la boca. Os haría un dibujo pero se me da mejor relatarlo. Cuando se recuperó le quité las punteras y empecé a hacerle cosquillas con la cinta en sus mágicos, delicados y sensibles pies hasta que murió de una risa que no pudo reír.
Las noches de Halloween, si prestáis atención, escucharéis su risa ahogada en las duchas.


38. Más que suficiente

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica, pero esto al final resultó ser una auténtica pesadilla. Entonces dejó de soñar con ser algo en concreto en la vida, y poder diferenciar cada día las cosas que merecen la pena de las que no se convirtió en su único deseo, anhelo o sueño.

Con eso sería más que suficiente.


39. El día perfecto.

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica, pero ni en el más ambicioso de sus sueños llegó a imaginar que conseguiría el campeonato de Europa en una final individual. Tembló al subir al podio, y hecha un mar de lágrimas escuchó el himno de su país y observó las banderas, que se elevaban a poco a poco hasta lo más alto del estadio, una medalla de oro colgaba de su cuello y reposaba entre sus diminutos pechos. Había sacrificado todo su crecimiento, todo su desarrollo natural y jamás podría tener hijos, pero lo había conseguido.
Saltó del podio y besó intensamente a Carla, su novia, compañera de equipo, y ambas tuvieron que ir a ver a su cruel y retrogrado padre, apostado de pie en la primera fila de la grada. Con ojos vidriosos dijo unas palabras que jamás olvidarían – estoy orgulloso de teneros -, fue el día perfecto.


40. Nobody expects the Spanish Inquisition

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Aunque las piernas no la acompañaran, por no hablar de la oposición familiar. Era alta, desgarbada, y con unos ligamentos que se negaban a estirarse más allá de los límites que la razón imponía a unas articulaciones por lo demás insulsas.
Por una vez, decidió aprovecharse del nombre de su familia y bajar a jugar con las cosas del trabajo de papá: Alexia Torquemada llegaría a formar parte del equipo olímpico.


41. Barbie superstar

- De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica, luché duro, me sacrifiqué durante toda mi infancia, sin disfrutar nada y llegué a conseguir una medalla olímpica.
Después hice mis pinitos de modelo, era realmente buena, en serio. Hice un anuncio de champú en Portugal. Hasta me acosté con Mark Vanderloo.

Pero, ¿para qué?, ¿de qué me ha servido?, ¿quién se acuerda ahora de mi?... La vida es muy puta, ¿sabes?

Venga Joe, ponme la última…

- Wendy, creo que deberías irte a casa. Estamos cerrando y llevas toda la noche en ese taburete bebiendo sola. Descansa un poco. Mañana será otro día.


42. Sueños valseados

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Con tocar en la luna la trompeta. Soñaba que viajaba a lomos de Fujur con Atreyu. Soñaba con El Aviador, La Rosa, y el fin de los Baobabs. Soñaba con Pandora y su caja de los vientos y bailaba con cierzos, alisios y tramontanas. Soñaba con ser la sexta de Los Cinco. Con tener un collar mágico que cambiaba los colores de las cosas. Soñaba con ser princesa y científica y rockera.

Me entretuve con mis sueños. Los cogí, los solté, les di tres vueltas. Hice con ellos tantas piruetas que crecí sin darme cuenta, y se mezclaron en un vals con las certezas, obligándome a soñar sólo dormida. Pero como no me da la gana, a veces, cual gimnasta rítmica, vuelvo a hacer piruetas con mis sueños de pequeña, mientras levanto el dedo a las certezas.


43. El viaje a Egipto

De pequeña soñaba con ser gimnasta rítmica, por lo que entrenaba en el polideportivo cada dos días de aquel verano. Al salir de él fue cuando me encontré con David y Pablo, en la orilla del río, colocando sin descanso tablas en una barca hecha con madera de palés. La mochila de los Cazafantasmas de Pablo estaba dentro de la barca, y según me confesó ese día, repleta de bocadillos de Nocilla. Una vez repararon en mi presencia, me dijeron visiblemente emocionados:

-¡María! ¡Nos vamos a Egipto! ¡Vente con nosotros, volveremos mañana!

Me reí. No tenía sentido avisarles de lo absurda que era su idea, ni explicarles por qué era imposible llegar hasta Egipto en un día desde aquel pueblo perdido del Ebro. Me despedí y proseguí mi camino, incapaz de imaginar la cantidad de aventuras que vivirían en ese viaje.


44. De niña a mujer

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica, cirujana o astronauta. Mientras las demás niñas jugaban a la comba y cuchicheaban confidencias entre risitas en el patio de vecinos, ella se sumergía en sus libros y viajaba a la luna y luego al centro de la tierra de la mano de Verne, admiraba las ilustraciones de la vieja enciclopedia del salón, practicaba elongaciones y hacía el pino frente al espejo del armario de la abuela, esperando que algún día sus sueños se hicieran realidad.
Qué distinta aquella niña de esta mujer cuya imagen entrando esposada en el juzgado aparece en la portada del periódico de hoy, acompañada del siguiente titular: “Madre mata a su bebé a golpes por interrumpirle mientras juega al Candy Crash”.


45. ...

De pequeña, soñaba con ser gimnasta rítmica. Quería bailar, ser una con la cinta y la pelota. Parar los latidos del corazón de 15000 personas en plena pirueta. Notar el aire vibrar con los gritos y los aplausos en una recepción arriesgada.
De pequeña, quería ser el centro de atención, la estrella, la reina del baile y la jefa de animadoras. Estudiar en Yale y ser la editora del periódico del campus.
De pequeña era la niña mimada de papá y del pueblo. El hada rubia cantarina que ayudaba con las compras a las abuelas.
De pequeña, tras las cortinas de las vecinas, era la huerfanita hija del sheriff, la niña que vivía casi sola, la pobrecita Mary-Lou.
A los 14 años, besó a Greg. A las dos semanas folló con un hombre en los lavabos de la estación de tren. A los 15 años tomó cocaína...

muy bien ahi adelantandote motorelvez!

Y a partir de ahora el que saque a relucir malos rollos se lleva una hostia y 3 puntos de penalización (nueva norma).

coño, a eso lo llamo yo tirar de la cadena, ... grande, Motor, ....

A ver si llegamos a 40 en esta ronda para mantener la media. Venga ....

Organization..

Me gusta.

Bravo

Dónde estoy? Quién soy? Ha vuelto a ocurrir.

CrackerSoul escribió:A ver si llegamos a 40 en esta ronda para mantener la media. Venga ....

prometo mandar el mio lo antes posible! i swear! como? ni idea. pero lo haré.

Nomeko8 escribió: Quién soy?

Nomeko8, lo dice el foro...

Me he quedado en el 20. Mañana me acabo de leer el resto.

todo esto me suena a tongo...

Ellis escribió:todo esto me suena a tongo...

no. esta vez no te dejamos participar.

Grande Motor!!!

Me voy de viaje tranquilo sabiendo que esto está en buenas manos.

Tengo mis votos decididos. Los mando mañana en cuanto abran las urnas.

Es todo psicológico peeeeeeeeero, frescorrrr!!!!

Spoiler:

Sean escribió:Grande Motor!!!

Me voy de viaje tranquilo sabiendo que esto está en buenas manos.

Tengo mis votos decididos. Los mando mañana en cuanto abran las urnas.

Tráete un pingüinillo.

Sean escribió:

Stoneheart escribió:

Sean escribió:Grande Motor!!!

Me voy de viaje tranquilo sabiendo que esto está en buenas manos.

Tengo mis votos decididos. Los mando mañana en cuanto abran las urnas.

Tráete un pingüinillo.

Por si no te pillo antes de irte pásalo bien y traete lo que quieras menos un oso argentino que luego se pasa de las 150 palabras y tenemos que impugnar

Me quedan dos relatos por publicar (que me diaculpen los autores pero no puedo/quiero hacerlo desde el móvil), asi que mañana (a falta de que llegue alguno más) los publico sobre las 9:30 para llegar a los 40 (relatos).

Apuntado.

Bueno, 40 y el de Mary Lou Retton, 41... En la línea... Mañana leo los que faltan...

genial

Stoneheart escribió:

Sean escribió:Grande Motor!!!

Me voy de viaje tranquilo sabiendo que esto está en buenas manos.

Tengo mis votos decididos. Los mando mañana en cuanto abran las urnas.

Tráete un pingüinillo.

¡Y un disco de tangos para mí!

¡Qué bien se respira aquí!

Neska escribió:

Stoneheart escribió:

Sean escribió:Grande Motor!!!

Me voy de viaje tranquilo sabiendo que esto está en buenas manos.

Tengo mis votos decididos. Los mando mañana en cuanto abran las urnas.

Tráete un pingüinillo.

¡Y un disco de tangos para mí!

Entre el pinguino, el oso y el disco de tangos, no se si me va a caber todo en la mochila

Sean escribió:

Neska escribió:

Stoneheart escribió:

Sean escribió:Grande Motor!!!

Me voy de viaje tranquilo sabiendo que esto está en buenas manos.

Tengo mis votos decididos. Los mando mañana en cuanto abran las urnas.

Tráete un pingüinillo.

¡Y un disco de tangos para mí!

Entre el pinguino, el oso y el disco de tangos, no se si me va a caber todo en la mochila

Yo fui la primera en pedir.

Neska escribió:

Stoneheart escribió:

Sean escribió:Grande Motor!!!

Me voy de viaje tranquilo sabiendo que esto está en buenas manos.

Tengo mis votos decididos. Los mando mañana en cuanto abran las urnas.

Tráete un pingüinillo.

¡Y un disco de tangos para mí!

Y un tanga de maradona para mí!

Sugar Bug escribió:

Neska escribió:

Stoneheart escribió:

Sean escribió:Grande Motor!!!

Me voy de viaje tranquilo sabiendo que esto está en buenas manos.

Tengo mis votos decididos. Los mando mañana en cuanto abran las urnas.

Tráete un pingüinillo.

¡Y un disco de tangos para mí!

Y un tanga de maradona para mí!

Yo quiero la edición japonesa del single de Lithium, con obi y sin abrir a ser posible.

Sean escribió:

Neska escribió:

Stoneheart escribió:

Sean escribió:Grande Motor!!!

Me voy de viaje tranquilo sabiendo que esto está en buenas manos.

Tengo mis votos decididos. Los mando mañana en cuanto abran las urnas.

Tráete un pingüinillo.

¡Y un disco de tangos para mí!

Entre el pinguino, el oso y el disco de tangos, no se si me va a caber todo en la mochila

El oso noooooo

Sigo flipando con el primero, qué es ¿Anitu Gallardo? por otro lado me gusta lo de "Terrorismo Dada", bueno, doy un repaso a los demás pero no puedo evitar releer el primero.

Koikila escribió:Sigo flipando con el primero, qué es  ¿Anitu Gallardo? por otro lado me gusta lo de "Terrorismo Dada", bueno, doy un repaso a los demás pero no puedo evitar releer el primero.

Es un WTF? de libro... por otro lado detecto algo... amargura?

Kupak escribió: Me tomo en serio que aquí algunos ofrecen algo de ellos a los demás. Ni más ni menos.

Ésto a la primera página xD.

Ciclóncósmico escribió:

Kupak escribió: Me tomo en serio que aquí algunos ofrecen algo de ellos a los demás. Ni más ni menos.

Ésto a la primera página xD.

Uno que ha decidido ser optimista

Ciclóncósmico escribió:

Kupak escribió: Me tomo en serio que aquí algunos ofrecen algo de ellos a los demás. Ni más ni menos.

Ésto a la primera página xD.

Sin bromas, a la primera página.

Saludos desde el hospital.
Evidentemente mis tres puntos seran para el 32.
Ese nombre es lo mas grande.

YOMISMO escribió:Saludos desde el hospital.
Evidentemente mis tres puntos seran para el 32.
Ese nombre es lo mas grande.

oooooohhhhhhhh

metalbert escribió:

YOMISMO escribió:Saludos desde el hospital.
Evidentemente mis tres puntos seran para el 32.
Ese nombre es lo mas grande.

oooooohhhhhhhh

Es que es muy bueno ese relato, toda la mala leche del foro está reflejada en el relato, BUENISIMO!!....felicidades, ahora serás mas tú...
m

m señor escribió:

metalbert escribió:

YOMISMO escribió:Saludos desde el hospital.
Evidentemente mis tres puntos seran para el 32.
Ese nombre es lo mas grande.

oooooohhhhhhhh

Es que es muy bueno ese relato, toda la mala leche del foro está reflejada en el  relato, BUENISIMO!!....felicidades, ahora serás mas tú...
m

Tremendo el 32, a mí también me pirra, qué mimo pone, qué sadismo, qué mamonazo!!!

Kupak escribió:

m señor escribió:

metalbert escribió:

YOMISMO escribió:Saludos desde el hospital.
Evidentemente mis tres puntos seran para el 32.
Ese nombre es lo mas grande.

oooooohhhhhhhh

Es que es muy bueno ese relato, toda la mala leche del foro está reflejada en el  relato, BUENISIMO!!....felicidades, ahora serás mas tú...
m

Tremendo el 32, a mí también me pirra, qué mimo pone, qué sadismo, qué mamonazo!!!

El 32 tiene un gran fallo gramatical, imperdonable para una infanta educada en los mejores colegios

YOMISMO escribió:Saludos desde el hospital.
Evidentemente mis tres puntos seran para el 32.
Ese nombre es lo mas grande.

A ver si lo he entendido bien... ¿Ya ha nacido Yomismita? ¿se llama Elenita?

rudicio escribió:

YOMISMO escribió:Saludos desde el hospital.
Evidentemente mis tres puntos seran para el 32.
Ese nombre es lo mas grande.

A ver si lo he entendido bien... ¿Ya ha nacido Yomismita? ¿se llama Elenita?

Acabo de verlo en otro hilo:

¡¡Enhorabuena!!

Enhorabuena, Yomismo!

Yomis felicidades!! Disfruta de la nueva familia.

YOMISMO escribió:Saludos desde el hospital.
Evidentemente mis tres puntos seran para el 32.
Ese nombre es lo mas grande.

Enhorabuenísima Yomismo!!!!! A disfrutar